No Escape

21. No no no no

           

Departamento de Alec

25 de Julio de 2017

2:10 am

Pov Alec

Salimos del lugar lo más rápido que pudimos y sin mirar atrás un solo momento, solo descansamos hasta que estuvimos a varios kilómetros del lugar.

Ya en el departamento de policías nos dedicamos a revisar la libreta y descubrir el nombre de las personas que compartieron la noche con Verónica y Dark. Mientras que en las USB se encontraban varios videos de las cámaras de seguridad, que debo analizar; es decir trabajo en casa.

No hablo con Magnus de lo que paso en Afraid, no hablamos del momento que compartimos en la pista, ni del beso en la habitación, ni de lo que sea que paso con Michael, solo seguimos en silencio hasta llegar al departamento.

—Tomare un baño... yo... lo necesito.

— ¿Quieres hablar de lo que paso?

—No realmente, solo necesito estar solo.

— ¿Estarás bien? — Pregunto con dejo de preocupación en mi voz.

—Totalmente.

—Si necesitas algo... solo dímelo, sabes que puedes confiar en mí.

Solo asiente con la cabeza antes de entrar a la habitación y cerrar la puerta tras él. Escucho el agua de la regadera caer y de inmediato me pongo a trabajar con las nuevas pistas del caso. 

Cuando pasan 15 minutos y el agua sigue cayendo comienzo a preocuparme, luego de vivir durante casi un mes con Magnus aprendí que no tarda más de 10 minutos en tomar un baño. Un hueco en la boca del estómago me indica que algo va mal.

Me encamino a la habitación y entro sin tocar.

—Magnus...—Llamo en apenas un susurro.

Nada, solo el agua.

Toco la puerta del baño.

—Magnus... ¿está todo bien?

Nadie contesta y comienzo a preocuparme.

—Magnus abre la puerta. —Los nervios comienzan a colarse en mi sistema — ¡Magnus!

Intento abrir la puerta para notar que está bloqueada y entonces la golpeo con los puños. Corro a la cocina en busca del juego de llaves que abre las puertas dentro del departamento y con manos temblorosas las tomo de la taza y corro de nuevo a la habitación.

Al momento en que abro la puerta la imagen que me recibe es la de Magnus en el piso, con diferentes frascos de pastillas a su alrededor.

—No, no, no, no, no. ¡Magnus!

Me acerco a su cuerpo inconsciente y lo tomo en mis brazos, me meto a la regadera con él y dejo que el agua fría empape nuestros cuerpos, cubriendo el sudor de mi frente. Sin pensarlo demasiado hundo mis dedos en su boca de forma que toco su garganta y provoco una arcada, repito el procedimiento en varias ocasiones hasta hacer que regrese en sí y devuelva las pastillas, todas ellas quiero creer.

—Vamos Magnus. —Retiro los cabellos húmedos de su frente mientras acaricio su espalda.

— ¡NO!!NO! ¡¿Qué has hecho?! ¡¿Por qué lo hiciste?! —Aun con su poca fuerza logra sacar su ira y golpearme débilmente con los puños en el pecho.

— ¡Magnus tranquilo! — Intento tomar sus manos sin éxito.

— ¡Lo estaba logrando!!Quería morir ¡Debiste dejarme... debiste hacerlo.

Logro abrazarlo contra mi pecho, mientras su voz se va a pagando y da paso a los sollozos descontrolados.

—No digas eso Magnus, todo está bien. Vas a estar bien, te lo prometo. Solo necesito que confíes en mí.

—No puedo... no puedo... —Lo dice tan bajo que apenas entiendo lo que dice. — No quiero que nadie salga herido por mi culpa, no quiero que nada te pase Alec.

Sus palabras me dejan sorprendió.

—Nada malo me pasara y a ti tampoco. Solo háblame Mags... confía en mí, te lo suplico.

No dice nada más, solo lo siento asentir levemente con la cabeza y lo abrazo más a mi cuerpo dejando que el agua caiga sobre nosotros y que sea el único sonido en la habitación.

En cuanto el susto del momento pase y logre tranquilizarse hablaremos de todo. Lo sucedido hace unos momentos no puede quedar así, no después de que intentara quitarse la vida.