Escapémonos (Adrien Agreste/Chat Noir x Tu)

9. Asocial

POV Bella.

Otro Jueves normal en la escuela. Entré junto a mi hermana, como siempre, pero esta vez las paredes tenían afiches del torneo de esgrima de mañana, al que "todos" debían asistir.

Yo sólo sonreía, porque sabía que ni yo ni Adrien iríamos a ese bobo torneo.

Dejé a mi hermana en su salón y luego pensaba... ¿Como sería nuestra salida? De todas maneras seguía feliz, además que este Viernes al fin no esperaría 1 hora al autobus escolar.

Si, todos los Viernes debía esperar una hora de más junto a mi hermana, porque como salíamos temprano se demoraba con otras escuelas que salían mucho más temprano, con niños más pequeños y eso. Incluso ya traíamos almuerzo para ocupar ese tiempo.

Un Viernes al fin libre de eso es lo mejor.

Me dirijí a mi salón, fuí a mi asiento y me puse a escuchar mi canción favorita. Estaba bastante feliz, y no podía esperar para que llegara el día de mañana.

Llegó la maestra, y adios a mi música. La clase, lenta y aburrida, y fué en el recreo cuando ví a ese rubio, esta vez hablando con las chicas sentadas atrás de él y luego con su amigo. Unos minutos después, Adrien se acercaba a mi asiento.

--Hola.--me saludó él, con su sonrisa diaria.

--Ho-hola.--correspondí el saludo.

Nuevamente se sentó en el asiento de Nathaniel.

--Escucha... no se si serán muchas salidas ultimamente, o esta es muy "a ultima hora" pero...

Ya sospechaba lo que quería decir.

--...¿Te gustaría salir conmigo y unos amigos hoy? Irá Nino, y también Marinette y Alya, que son dos chicas muy simpáticas.

Sospecha confirmada.

--¿E-en serio? ¿A-a mi?--pregunté dudosa.

Después de lo que pasó con el otro grupo, no estaba segura de volver a salir con más personas de mi edad. Si ya me sentía algo incómoda con Adrien, con los demás ni hablo.

Aunque casi nunca lo hize ni en mis escuelas anteriores ni en esta, la verdad.

--Si, y creí que querrías venir. Mira, si quieres te las presento en el almuerzo, así las conoces mejor.

Aún así rechazaría. No más grupos grandes...

--Mi mamá no me va a dejar.--dije, excusándome.

--Pues... invéntale una excusa.--me suplicaba.

No me gustaba verlo suplicar, ni ponerlo triste.

--N-no quiero me-mentirle otra vez.--tartamudé.

--Pero...

Tocó el timbre, salvada por la campana.

--Solo piénsalo ¿Si?--dijo finalmente el rubio.

--S-si.--respondí.

Adrien se volvió a su asiento, y yo me quedé en el mío. Volvió a hablar con los tres otra vez, preguntándome si lo hacía de mí o no.

En la clase de matemáticas estuve pensando... ¿Por qué ultimamente estoy muy pendiente de Adrien? Para mi la respuesta era facíl, era lo único que tenía como "amigo". Aunque también pensé el algo que tal vez no quería admitir...

Creo que ya me empezaba a gustar.

Preferí dejar de pensar en eso, y pensar en otra cosa... ¿Debería salir con ellos hoy? La idea de hablar con personas de mi edad me asustaba, según mi mamá, desde pequeña. Decía que me aislaba en los recreos para comer mi colación completamente sola, y a pesar de que no me acuerdo muy bien debió haber sido cierto ¿No?.