El profesor continuaba hablando algo sobre los grandes escritores de la época medieval. Sigo preguntándome: ¿A quién le interesa lo que pasó hace tantos años? No sé porque pensé eso. Amo la literatura y si me interesan los grandes escritores, pero estoy tan... desconcentrada y distraída. No pude dormir en toda la noche, creo que cada vez mis ojeras se hacen mucho más notorias haciéndome lucir horrible. Miré a mi lado izquierdo, en donde debería estar sentado Justin, pero él no ha llegado. Quizás sea mejor que venga el día de hoy y eso me ayudaría a despejar de mi mente. Estoy confundida y no debería. No debería confundirme si tengo un novio, al cual amo, no debería dejar que esos bichos jueguen en mi estómago haciéndome sentir cosquillas por otro chico que no sea mi novio. Necesito hablar con Erick, necesito de sus abrazos, necesito sentirlo cerca. Pero, aún quedan demasiados días para que vuelva de su viaje.
El timbre se hizo escuchar en todo el salón. Al fin había terminado este latoso día. Se ha vuelto latoso gracias a que Justin no se presentó hoy… Camino rumbo a la biblioteca. Tengo que terminar de ordenarla, ya estaba quedando menos. Aproveché que Justin no vino y avancé un poco más. No quiero seguir viniendo aquí a diario y toparme con él, ya tengo suficiente viéndolo todos los días sentado al lado de mí. Dejo mi mochila encima de una pequeña mesa que se encontraba en un rincón de la enorme de biblioteca.
Estaba distraída en mis propios pensamientos. El libro que tenía en mis manos resbaló hasta caer ruidosamente al suelo. Lo recojo con cuidado para volver a ponerlo en su lugar correspondiente. Ese había sido el último libro, había terminado completamente la biblioteca. Fue fácil, sin la presencia de Justin incomodándome. Tomé mis cosas para dirigirme hacía la salida. Las calles estaban solitarias y desiertas, debo admitir que me estaba causando un poco de miedo.
Llegué a mi casa, pero me detuve de nuevo. Ahí estaba él, sentado en la orilla de la vereda de mi calle. Le sonreí dulce. Me devolvió el gesto con una sonrisa hermosa.
Camino rápido hacía él... ¿Qué estoy haciendo? ¿Acaso es este otro de mis malditos impulsos? Me detengo en seco, más bien, vuelvo a la tierra. Vuelvo tarde, cuando me percaté de lo que estaba sucediendo, estaba colgada en sus brazos, abrazándolo fuertemente. ¿Qué acabo de hacer? Me separo de él. Mis mejillas se tornan de un color rosado.
—Lo siento —musito nerviosa. Mi mirada seguía en el suelo. No quería mirarlo a los ojos. Me perderé en ellos de nuevos y en este momento, es lo último que quiero. ¡Qué vergüenza, ______! ¿Cómo pude correr a abrazarlo como si fuera mi... novio?
—No te preocupes —me sonríe.
—¿Qué te sucedió, Justin?
Me percaté de que en su rostro tenía algunas heridas acompañadas con sangre. Toco con delicadeza su mejilla, la cual estaba morada, y luego me desvió a su labio hinchado. Justin cerró sus ojos como si disfrutara de mis caricias y mi estómago se retorció por completo.
Sacó mi mano de su mejilla y la acaricio con dulzura, como si fuese una muñeca de porcelana. ¿Por qué tiene que hacer gestos tan dulces, delicados y encantadores? Me volveré loca, loca.
—Nada importante —dijo frío— No insistas. No te diré —me aseguró siendo frío de nuevo, como adivinando lo que estaba pensando y lo que le estaba pidiendo. ¿Cómo supo que seguiría preguntando?... —¿Por qué llegas a esta hora, ______?
—¿Me estás controlando?
—No, no es eso... es que —titubea.
—Era broma, Justin —le digo con una sonrisa— Me quedé terminando de ordenar la biblioteca.
—No deberías haberlo hecho, _____. Era mi responsabilidad también. ¿Roark te dijo algo? ¿Él te dijo que lo hicieras?
—No —negué con la cabeza— Sólo quería distraerme.
—Es peligroso que andes sola. Más a esta hora. Además, mira las calles, están desiertas y podría...
—Justin, lo sé... ¿Por qué te preocupas tanto? —le sonrío de nuevo. Al parecer, mi pregunta le ha intimidado. No me responde. Su mirada es impenetrable de nuevo. Parece serio, enojado, disgustado quizás, misterioso y también podría decir que está un poco nervioso. Quiero que me responda. Necesito escuchar su respuesta.
