Capítulo 22: La reflexión.

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-Así que, ¿has pensado en algo en estos últimos tiempos, Remi?-preguntó Patchouli a Remilia al comenzar la merienda del té. Remilia le contestó con sabiduría luego de pensar un poco:
-Sí, he estado reflexionando acerca de que ella ha estado sola. No es porque ella no sea mala, sino que no tiene a nadie quien la consuele y le comprenda más que nosotras.
-Si para algunos dicen que lo que más duele es la verdad, para otros lo que les duele más es el amor porque es un sentimiento neutral y fuerte- añadió Patchouli y toma un sorbo de su taza de té-. El hecho en que ella sea clasificada como una ermitaña y una persona fría no significa que no pueda dejar de sentir sus emociones y sentimientos, sino que al final ser odiada y amada resultarán ser lo mismo que ser lastimada y sanada.
-¿Y de todo esto es que ella no tiene a nadie sólo porque es diferente?
-Sí. Porque nadie está exento de los estereotipos que da la gente para lastimar a otros para así obtener un beneficio personal, pero cuando se acerca la hora de la verdad, las personas que lastiman a otros resultaron que al terminar esos estereotipos ellos son los únicos y verdaderos afectados.
-Dios, eso es muy fuerte y nadie lo toma en serio como si no hubiera pasado nada. Y además, Yukari nos oculta un plan para que guardemos silencio para culparnos de algo que no hicimos y construir un muro para que no podamos salvarla. Ella es peor que un político corrupto: quiere dinero, quiere poder, quiere culpar a personas inocentes de algunos crímenes que no hemos hecho, como matar a alguien. Lo que dijo ella sólo es porque tiene miedo de que pueda ser honesta y justa y yo estoy segura de eso. Pero de lo que no sabe es que yo ya no necesito que nos sobreprotejan de algo que le parece malo y que ya tengo la madurez suficiente para ser consciente de que esa joven necesita de nuestra ayuda y sobre todo de mi compasión, a pesar de que me consideran como una niña consentida y malcriada pero no es así: aunque sea algo carismática y un poco mimada, tengo un buen corazón- y sus ojos se llenan de lágrimas y una gota de lágrima cae en su taza de té y en una hoja de papel-. Ella siempre ha sufrido mucho porque nadie le da una mano para que se levante luego de que se cae; nadie se da cuenta de que ella existe; nadie la consuela porque tienen miedo de que su pasado pueda afectarles. Pero yo soy la única que le dio la mano, que la consuele y que sé que ella existe en este mundo y que necesita una familia que jamás la abandonará.
-Hermana...-respondió Flandre con tono de tristeza en su voz-. Yo también quiero a esa joven porque ella no tiene a nadie quien le da ese cariño- sus lágrimas recorren en sus mejillas-, pero yo no quiero que ella sufra lo mismo que los demás. Aún así, ella no estará sola.
Remilia, al escuchar esas palabras, le da un abrazo a su hermana y la consuela con sus palabras:
-No te preocupes, Flan. En cuando la salvemos y que pueda estar en nuestra familia, todo va a estar bien sin importar que nos digan que no podemos hacerlo. Y lo haremos bien por todos.
-Así es- respondió Paulette con un tono cálido en su voz-. Ella no estará sola ya nunca más.
-¿Eh? Hermana, ¿quién es ella?
-Ah, casi lo olvidaba- dijo Remilia con tono de sorpresa y con una sonrisa nerviosa-. Flan, te presento a mi amiga de la infancia: Paulette Higgins.
-Mucho en conocerte- contestó Flandre con alegría al estrechar su mano con la de Paulette-, Paulette. Mi nombre es Flandre Scarlet.
-Un gusto, Flan- añade Paulette con una sonrisa serena y lanza una risita-. Eres tan tierna y adorable, además de ser una buena niña.
-¡Muchas gracias :3!- contesta Flandre con alegría al sentirse tan querida.
-Hey, Remi. ¿Qué haciendo? ¿Quién es ella?- dijo Rutt al llegar a la sala con un tono descortés en su voz.
-¡Rutt!- exclamó Remilia con disgusto y decide tomarle el brazo derecho hasta casi arrancárselo de su cuerpo y voltea hacia Paulette con una sonrisa y lanzando una risita-: Lamento mucho por la interrupción, ella es Rutt. Pero creo que ella ha bebido mucho últimamente. Ufufufufu, y debemos hablar inocentemente de asuntos personales. Con permiso, volveré en un segundo porque ella y yo iremos a la sala del piano.
-S...¡Sí! Debemos hablar de eso después de todo- añadió Rutt con alegría y sudando frío del dolor. Las dos chicas se dirigen a la sala del piano y Remilia le dice apretando los dientes:
-Ven aquí, ven aquí, ¡Ven aquí!
-¡Ouch! ¿¡Por qué me jalas el brazo!? ¿¡Acaso te hice algo malo!?
Remilia le contesta con un tono estricto y algo enojada:
-¡Sabes muy bien que hay visitas y es de mala educación hablar sin ni siquiera decir "con permiso" o "disculpen"! ¡No me digas que anoche bebiste un vino tinto echado a perder porque sí lo hiciste porque te comportas como una necia, pervertida y maleducada!
-Lo siento mucho, pero ni siquiera sé que vendrían visitas. 7_7. ¡Pero sabes muy bien que no puedo fijarme quién está en la Mansión! ¡Y tú diciendome: <<Rutti, deja de ser tan maleducada y sé una damisela educada>>! ¡¿Pero qué crees?! ¡Sorpresa~! ¡ Sabes que tengo todo el maldito derecho de estar en esta casa y nadie me da órdenes de una niñita consentida y malcriada que quiere salvar a una mujercita de su pasado!
-¡Pero qué terca eres!- gritó Remilia al ponerse roja de la furia y tira al suelo el collar de Rutt al suelo rompiéndolo- ¡Tú mal comportamiento incluso me hace vomitar y no sabes qué está pasando realmente! Pero dime: ¡¿Qué es de lo que quieres realmente?! ¡¿Por qué te comportas así como una criminal?!
-¡¡Quiero que me dejes en paz!!- gritó con furia Rutt hasta agarrar a Remilia brutalmente por el cuello hasta estrangularla y empujarla a la pared hiriéndola. De repente, recibe un puñetazo de la mujer enmascarada que apareció de la nada en la quijada hasta soltar a Remilia. Flandre, al ver a su hermana lastimada cayendo en sus brazos, exclama:
-¡Remilia!
Y justo en ese instante, una furia descontrolada le abruma hasta que corre por la cocina y saca un cuchillo hasta agarrarle con violencia el brazo izquierdo a la joven y le clava el cuchillo en el hombro hasta golpearle en la nariz. Rutt le da un puñetazo en la cara pero Remilia le tuerce con fuerza su tobillo hasta romperlo mientras ésta grita de dolor. Pronto comenzó una furiosa pelea hasta que entonces Paulette le grita a Rutt, ya que ésta le da varios puñetazos en la cara y empujó a Flandre hasta la pared dejándola malherida:
-¡Ya basta! ¡Dejalas en paz, Shizuku!

Touhou Biological Clock. (TouhouMaria#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora