Touhou Biological Clock. (TouhouMaria#1)

Capítulo 11: Una luz en la oscuridad. (1/4).

Antes que nada, esta canción es de un creepypasta llamado "NES Godzilla" y es donde el protagonista entra al cementerio. Es una canción muy triste pero a la vez muy hermosa y la puse como música de fondo para este capítulo. Espero que les guste esta bella melodía.

Advertencia:
Este capítulo puede contener escenas muy tristes o que pueden causar un momento emotivo al lector, además de contenido menor de terror psicológico y -10% de gore. Se recomienda discreción.

La autora.

-------------------------------------------

24 de diciembre de 1888.
Invierno.

En la Mansión Scarlet como en Maidstone East y todo Londres se preparan para la nochebuena. Remilia acaba de cumplir trece años y Flandre cuatro años. Alice y Anthony estuvieron comprando regalos para sus familiares y sus empleados, pero Remilia le regalaría algo a la muchacha que no se requiere de dinero ni de riquezas: desde que ella era una niña encontró una estrella de plata en su cuarto. Al mostrarlo a su madre, ella decidió que encontraría a la persona que pueda ser querida. Y esa promesa se ha cumplido. Remilia ha encontrado a una persona que sí comprende cómo ella se siente. Ella puede tener una mejor vida, una nueva esperanza y un mejor futuro. Sin importar que su pasado la obliga a ser una joven solitaria, puede que algún día sea liberada de esos ecos del pasado. Al llegar a casa, Alice ayuda a las sirvientas a decorar la sala; Anthony practica una pieza musical en el piano y Remilia se dirige al jardín para cortar rosas para la chica. Cuando salió al jardín, lo que vio es muy maravillosamente hermoso: la nieve cae hasta la mano de Remilia; los rosales parecían estar adornados de plata con la escarcha; las flores brotan hasta salir convertidas en hermosos copos de nieve; y lo más bello es una rosa blanca ha sido brotada de la nieve junto con las demás. El jardín parece más que un precioso espectáculo jamás visto de un invierno diferente a los demás. Como un niño pequeño jugando en la lluvia, Remilia empieza a bailar suavemente mientras que los blancos copos de nieve en forma de pétalos plateados, mostrando alegría. Flandre, al ver el más bello espectáculo, decide salir a ver.

-Este paisaje es muy bonito, hermana-dijo Flandre al acostarse en la nieve. Remilia se sienta a ver el jardín adornado del invierno más elegante y hermoso que han tenido en su vida.
-Lo sé- contesta Remilia. Al mirar a los ojos de su hermana, muestra una tierna sonrisa al juntar sus manos. Las dos niñas nunca han sentido ese amor tan especial que es heredado de su madre. Flandre siente una profunda nostalgia al recordar sus primeros pasos en la nieve desde que ella era apenas una niña pequeña con tan sólo un año, y Remilia también recuerda esos años en que jugaba junto con sus primas a las guerras de bolas de nieve y a crear muñecos de nieve.
-¿Sabes? Echo de menos aquellos momentos de la infancia en donde aquí solíamos jugar, cuando el mundo no era tan malo- dijo Remilia al acostarse en la nieve.
-¿Tú crees que podamos volver a hacer esos juegos en la nieve?
-Yo digo que sí. :)
-Ah. Pero...¿Puede también estar la chica?
-Espera...¿A qué te refieres? ¿Acaso no sabías de que ella no tiene una familia?
Flandre niega con la cabeza. Saca de su bolsillo un pañuelo, en donde está envuelto una pequeña caracola blanca. Sus pequeñas manos se juntan con las manos de su hermana, y le dice:
-Ésta es la única caracola blanca en el mar. Si ella no puede ir al mar, puede escucharlo.
-¿Vas a regalar esa caracola a ella?- pregunta Remilia con un tono de tristeza en su voz. La pequeña acepta con la cabeza, y pronto sus ojos se llenan de lágrimas.
-Yo...yo sólo quería...ser buena con ella...*snif*. Pero...no vayas a enojarte conmigo- dijo Flandre con pucheros. Remilia se compadece de ella y la abraza diciéndole:
-No estoy enojada contigo- y Flandre apenas muerde su labio inferior tratando de no gritar-. Estoy segura de que ella pueda tener una buena vida.