capitulo 47- El imperio.

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THOMAS.

Camino por el pasillo del hospital rapidamente hasta llegar a la habitación donde estaba internado, papa se las arreglo para que me dieran de alta por lo tanto solo vine a cambiarme y ya esta.

-Thomas.-Ian entra justo en el tiempo que me coloco la chaqueta, hago un mueca, aun me molesta la herida del hombro la del abdomen no tanto.

-¿que sucede?-pregunto mientras recojo todo y lo meto en el bolso.

-el abuelo quier...

-Thomas.-me giro con sorpresa al escuchar la voz del señor Mark Simons, un hombre que a pesar de que ya debe de tener unos 70 años mas o menos, se le ve en forma y realmente fuerte, aun sigue a cargo de sus negocios y ha conocido sus bisnietos.

-señor Simons que gusto.-digo mientras me acerco a el y le doy un fuerte abrazo, este hombre ha sido como un abuelo para mi, lo conozco desde que era un pequeño y siempre he convivido con Ian aunque a veces el chico sea un verdadero dolor de culo.

-vamos, que nos están esperando.-dice y mira mi vestimenta.-deberías de ir a ponerte un traje muchacho, estas serán reuniones de trabajo.-ruedo los ojos para luego recibir un golpe en mi cabeza.

(...)

Veo el lujoso lugar, el señor Mark tenia razón, me hubiera dado vergüenza si entraba informal a este lugar, todo se ve tan... Elegante. Seguimos hacia un ascensor directamente y el chico que nos recibe dentro marca el numero 20, a medida que subimos pienso en muchas cosas y una de ellas es en el suceso del vídeo.

Cierro los ojos.

Tengo que ayudarla, tanto en estos momentos como mas adelante, se ve que no esta bien, ¿claro como no? En manos de esa loca cualquiera.

-señores.-salimos del ascensor y caminamos por el espacioso lugar.

-señor Mark.-me giro al escuchar el ingles con un fuerte acento ruso, miro al hombre enfrente de mi. Alto, fuerte y con un cabello increíblemente rubio, un rubio MUY rubio, casi blanco. Lo que mas destella de este tipo no es ni siquiera sus ojos azul frío, no, es su maldito cabello.-Señor Thomas.-dice mientras me tiende la mano.-el Mark me dijo que necesitaba hablar conmigo, la verdad era de que tenia curiosidad de conocer al descendiente que lleva las riendas del negocio Varoni. Un placer, soy Harold Kavarkow-dice, tengo el presentimiento que de aquí saldré hablando ruso.

-así es.-afirmo.-tengo un gran problema y bueno, se me ha ocurrido la brillante idea de que en Rusia se puede desatar mi gran problema.-el rubio muy rubio me observa fijamente.

-bueno, vengan. Hablemos mejor sobre este problema.-dice. Todos pasamos a un salón, rápidamente un chico comienza a servir vasos con vodka.

-no gracias.-digo al tipo que me ofrece un vaso, el ruso me observa fijamente de nuevo y alza una ceja.

-¿nuestro invitado no tomar vodka?-demonios, creo que le falta un poco aprender el idioma.

-si, es solo que estoy siendo medicado.-el tipo alza mas la ceja, si es posible. Frunzco el ceño al ver su inquietud.-el día que secuestraron a mi novia me dieron dos disparos.-digo, el chasquea la lengua y asiente.

-comprendo.-dice.-¿asi que esto es por tu novia?-asiento.-¿que piensas hacer? O mejor aun ¿tienes la sospecha de alguien? En Europa existe algo que se le llama “El Imperio” - hace comillas con sus dedos.-es algo así como a lo que ustedes llaman Mundo Oscuro.-el señor Mark y yo asentimos.-ellos son los que manejan los negocios allá, su servidor, osea yo, soy parte de ese Imperio y por lo tanto muevo muy bien el negocio.

-¿Podemos tener contacto directo con el imperio?- pregunto frunciendo el ceño al ver al mismo chico ofrecerme de nuevo un vaso de Vodka, vuelvo a negar y el chico hace su camino.

La risa del Ruso me distrae.

-Hombre, los rusos no se llevan muy bien de la mano con los estadounidenses.-dice riendo.

-yo soy Ingles.-ambos me miran sorprendidos.-señor Mark, mi padre es de Londres al igual que mi madre.-digo mientras observo como asiente mientras recuerda el suceso cuando papa hizo a la familia volver al mundo.

-en ese caso el contacto si puede ser un poco mas directo.-dice el ruso.-necesitaras traductor, no solo estarán los rusos sino que tambien estarán los alemanes, holandeses, entre otros... Europa es muy grande y así como hay una unión Europea para los buenos, tambien lo hay para los malos.

-espera, espera... ¿Alemanes?-pregunto mientras el ruso me mira raro.-¿Oliver Askew pertenece a ese mundo?

-¿la familia Askew? Fue una de las fundadoras.-dice. Y sonríe.-¿lo conoces?-pregunta.

-es mi amigo.-el asiente.

-entonces las posibilidades de contacto serán mejores.-lo veo pensar en algo.-¿tu novia por casualidad no es una de los mellizos Blair?-lo miro seriamente, el asiente.-la forma en la que esa chica esta sufriendo no es para nada normal.-me levanto de golpe y me acerco a el. El rubio se levanta y con el, sus manos en son de paz.

-¿que sabes tu?-rujo, pensar en lo que sufre mi muñeca me revuelve el estomago.

-su vídeo rodó por todo el Imperio, por algo me sorprendió ver como Askew se retiro de la reunión de forma tan repentina la noche de ayer.

-¿Oliver sabe?-pregunto, Harold asiente y yo sin mas me doy media vuelva y me dispongo a caminar.

-Varoni.-me giro dándole la cara.-no actúes sin pensar, habla con Askew y crea un plan, liego hablas con el Imperio y ahí decidirán su paso a seguir, Rusia es muy grande y demasiado sangrienta, un movimiento en falso y la chica lo pasara peor, ten mi concejo presente, la persona que la tiene secuestrada no ser para nada normal.-dice mientras se acerca y coloca una mano sobre mi hombro.-suerte.-estrechamos la mano y el señor Mark y yo nos retiramos.

-se inteligente muchacho, el rubio Ruso tiene razón.-río al darme cuenta que no fui el único en notar eso.

-nos toca esperar.-suspiro mas no es fácil señor Mark, ella sufre.

-y sufrirá mas sino tomas las cosas por el lado frío.

Asiento y miro mi reflejo en el ascensor.

Te encontrare muñeca.

Bailes peligrososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora