ANOCHECER (VIXX Fanfic Yaoi)

Una esperanza

Me volví loco de desesperación. Sus palabras taladraron hondo en mi.

No quería volver a lo mismo. Me imaginé a mi Won Sik planeando todo desde su universo, detallando cada mirada y haciendo de mi, un muñeco inservible. Sabía que el conocer a ese chico en la silla de ruedas no era ninguna casualidad y que era aquel hechicero el que me tenía como estúpido viviendo otra vez, una vida creada por él.
Decidí alejarme y refugiarme en el trabajo, conseguí otro en una tienda de comestibles abierto las 24 horas que me mantenía despierto, así comencé de nuevo.

La importancia de en verdad olvidar y seguir adelante, se volvieron lo principal en mi vida. Dejé atrás el sufrimiento de la separación y ese desesperante tormento que me tumbaba cada noche. Me hice añicos obligándome a dejar de llorar por él.

Pasé largos días mirando el tiempo irse y esperando con alegría que algún automóvil me lanzara fuera de la motocicleta y me hiciera morir antes de llegar al hospital. Regresé a aquella época en la que el suicidio me parecía la mejor solución, pero temía que si lo hacía, regresaría a esa cabaña a su lado. No soportaría el tener que volver a pasar por lo mismo.

Un año más terminó, siendo así la prueba de que al menos podría vivir en paz.

***

Cuando la primavera terminó y comenzaron las lluvias, yo ya era amigo de varios chicos de mi trabajo en la mensajería. Uno de ellos se casaría pronto, por lo que me ví en la necesidad de gastar un poco de mis ahorros en un traje nuevo para la ceremonia.
Tenía ahorrado lo suficiente para poder conseguir un boleto de autobús y viajar al pueblo de dónde era su prometida y sería la boda, mi oportunidad de ir más lejos se veía detenida por la excesiva renta y el transportarme de un trabajo al otro. Mis amigos y yo estuvimos planeando el viaje con varios meses de anticipación, necesitaba unas largas vacaciones y aprovecharía el casamiento de mi amigo para despejarme.

Seguiría mi vida cómo mejor me pareciera, si veía que me estaba guiando hacía algún lado, yo me encargaría de detenerlo y tomar otro camino. Tenía la sensación de que Won Sik seguía moviendo los hilos de esta vida.

El hotel donde nos hospedamos estaba alejado de la iglesia donde sería la ceremonia. Teníamos que transportarnos en autobús o tomar un taxi. Para mis demás amigos la forma más rápida fue el taxi pero para mí era más económico el autobús, así que ellos tomaron su primer opción y yo la segunda. El trayecto sería corto, pasaría por un pueblo que está a las orillas de un enorme bosque, pero traspasa una larga carretera que lleva a la siguiente estación, de ahí sería caminar unas cuantas calles y la iglesia estaría entre la carretera y la entrada al bosque.

El frío y la lluvia fueron mis acompañantes todo el trayecto hasta la pequeña iglesia donde sería el casamiento. Llegue demasiado temprano, algunos familiares seguían caminando de un lado a otro terminando los últimos arreglos. Me sentí incómodo y esperando que mis demás amigos estuvieran próximos a estar conmigo, me di una vuelta por los alrededores de la capilla. La lluvia había cesado y el frío solo era la humedad que estaba impregnada en todo el lugar. Me senté en una de las bancas alejadas de toda la gente y me relajé viendo hacia la entrada del bosque. Miré con detalle cada árbol y aspiré el olor de la hierba mojada.

Fue inevitable no recordar. Las visiones que ya eran borrosas, regresaron como si una luz se encendiera en mi cabeza. Mis manos temblaron y todo se puso negro a mi alrededor. Algo apretaba mi cabeza evitando que respirara. Me concentré en no dejar que el temor se apoderará de mi y cerré los ojos para tranquilizarme.

—Si que eres valiente recién nacido Leo.

Me obligué a no abrirlos de nuevo, aguardé expectante para descubrir si mi propio cerebro me estaba jugando una mala broma o si en verdad la voz pertenecía a aquella persona.