Mi nombre es Blair o eso es lo que me hicieron creer... ¿Mi único crimen? Nacer. Trataron de alejarme de esta guerra pero no se puede alejar a alguien que este involucrado desde antes de nacer.
BSAA, DSO o Umbrella Corps, da igual de que bando este...
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En voz de Leon
"A veces, el precio a pagar por seguir con vida, es peor que la muerte... sobrevivir no es vivir."
Hace 15 minutos Rebecca y Chris se marcharon del lugar, yo decidí quedarme para mostrarle que no estaba sola, sé que se siente que alguien más decida tu futuro, que cambien completamente tus planes y que te amenacen usando a terceras personas. Blair tiene la misma edad que yo tenía cuando paso lo de Raccoon City y eso hace que me sienta más identificado con ella, por esa razón no puedo irme de aquí hasta saber que será de su vida.
Me pregunto, ¿cómo le hace para sonreír siempre? Cada vez que iba a visitarla siempre tenía una sonrisa en su rostro, aun después de que le realizaran estudios dolorosos, ella era amable en todo momento. No entiendo como alguien puede ser tan positivo después de estar privado de su libertad por meses... después de que fuera tratada como un objeto.
Vi cada uno de los videos que contenía la USB que le dio a Chris, vi cómo era encerrada junto a zombies, lickers, cerberus, eleminators, entre otras creaturas derivadas del virus progenitor. Las primeras veces no sabía cómo defenderse, tenía una pésima puntería, pero al pasar el tiempo, sabia como usar cualquier tipo de arma de fuego, cada vez se hacía más ágil; ya no se inmutaba al ver otra BOW distinta; su rostro se hacía cada vez más duro; estaba rompiéndose; lo sé porque así me siento yo.
Estaba sentado esperando, creo que Blair me paso los nervios, no sabía qué hacer para entretenerme. Vi como la puerta se abría y me pare, Blair se acercó a mí y para mi sorpresa me abrazo, se había colgado en mí de modo que me vi obligado a sostenerla.
—Soy libre, podre ver a mis padres y a mi mejor amiga. Llévame a celebrar.
—¿A dónde quieres ir?
—No lo sé, no conozco la ciudad, pero me gustaría algo tranquilo y que tengan alcohol — nos miramos fijamente, parecía que los segundos se hubieran detenido en sus ojos color miel, en esa dulce sonrisa. No había rastro de aquella expresión dura, pero que tenga una sonrisa no significa que este bien —. ¿Nos vamos?
