Capítulo 28: Daño.

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En voz de Blair

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En voz de Blair

"La vida es injusta para los que no temen amar, pues son los que más sufren de desamor y los cobardes son los que más gozan lo que no les corresponde"

—Por favor, tranquilízate, Blair. Tienes que estar calmada —pidió Rebecca cansada de verme caminar de un lado a otro dentro de su lugar de trabajo.

— ¿Cómo me voy a calmar? Apenas puedo cuidar de mí, ¿cómo se supone que cuide de alguien más? —Rebecca no supo que decir a eso. Es obvio, algo que tenemos en común es que no sabemos cómo terminamos trabajando en lo que hacemos, simplemente nos vimos en medio de un conflicto —. ¡No sé cómo paso!... bueno sí lo sé, pero a lo que me refiero es que no sé en qué fallo.

—Los métodos anticonceptivos no son 100 porciento efectivos. —Pare el andar y me deje caer en el asiento disponible a un lado de mi amiga.

—Voy a ser mamá —susurré y giré mi cabeza para verla—. Voy a tener un hijo de Leon.

—Él se pondrá feliz. Leon te adora y amara al bebé que viene en camino. —Rebecca colocó una mano sobre mi espalda para darme ánimos.

— ¿Cómo se lo diré?... "Hola Leon, fíjate que nos tocó la suerte de ser de las personas a las que les fallaron los anticonceptivos y en nueve meses tendremos que cambiar pañales. Así que felicidades, estamos embarazados."

—Si se lo dices así, le dará un infarto —respondió Rebecca mientras reía bajito, provocando que también me diera risa —. Cuéntaselo después de la cena. Tal vez se paralice un momento, pero se lo tomara bien.

— ¿Y si no lo quiere tener? ¿Seré buena madre?

—No digas tonterías. Claro que lo va a querer, será su mayor dicha. Y tú serás una excelente madre, a ese bebé nunca le va a faltar amor.

— ¿Estas segura? —Mi inseguridad preguntó.

— ¡Pues claro que estoy segura, tonta!

—Gracias por todo Bec. Pero bueno, ya no te quitare más tiempo. Me voy a comprar todo para la cena.

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