12._ Sorpresa en el escenario.

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Akira Berglind

— Lo estábamos esperando. Por eso estuve atento a tu temperatura aquella vez, suele presentarse cuando despertamos pero esta vez fuiste como tu madre quien tardó más.

Hago una mueca, soltando un suspiro suave como el soplido del viento, uno que pasa desapercibido entre el silencio de mi habitación en la cual me mantengo con la luz apagada por una fuerte migraña de las cuales no sufría hace tiempo.

—Tienes una base humana, eso es lo que te hace crecer y tener debilidad a las drogas químicas pero ahora, esta desaparece saliendo a la luz y luego suprimiéndose.

Ahora lo entiendo, realmente me costaba encontrarle sentido pero sus respuestas siempre era sobre eso, pero con el tiempo, pensé que me había vuelto menos vulnerable por mi aumento de poder y no debido a esto.

Es una simple gripe, que de simple para mí no tiene nada pues me está haciendo pasar por un mal momento ¿No sé podía manifestar de manera diferente? No sé ¿Una alergia? No, una gripe completamente moleta en todo en la cual mi temperatura corporal natural ahora está tal y como la de los humanos, un poco más alta. ¿Pero por qué sucede esto? La base humana se presenta expresando todo aquello de lo que no me enfermé en una simple semana... Una que apenas comienza.

— Sentirás las necesidades instintivas tal y como nosotros después de esto. Por los registros que revisé de Ronald, estos en algunas cosas coinciden contigo tal como la canción de dominación y probablemente hubieses llegado a ser un demonio más que un espíritu. Por eso, tenemos la sospecha de que tú te verás más afectada por la necesidad de sangre o la tentación por un alma.

De eso me he dado cuenta, en necesidades por deficiencia de energía tiendo a sentir muchas ansias por la sangre y eso de vez en cuando me descolocaba. Allí, entonces se desvían y luego se unen las teorías de mi familia, eso junto con mi canción y la de mi padre.

¿Que se supone que sucedió para que yo quedara con cada forma? No lo saben, simplemente dicen que quizás la raíz esté en el ritual cuando me crearon, o la cantidad de sangre o el poder de todos reunidos al momento de realizar todo. Es un misterio para mi familia pero allí ha de estar, en algún lugar de eso y ser la diferencia en la familia y ahora la más fuerte, me hace sentir de alguna manera, bien.

En este preciso instante se supone que debería estar durmiendo pero no logro conciliar el sueño de ninguna manera por la incomodidad con la que siento todo; es extraño y completamente molesto pero me imagino que los humanos ya han de estar acostumbrados a esto pues, le sucede muy a menudo. Obviamente por lógica, yo no lo estoy; al dolor sí tengo un límite como es de esperarse.

Estoy temblando por el crudo frío que rodea mi cuerpo por su temperatura inequívoca, por la crudeza con la que busca llegar a mis huesos; estoy respirando de manera demasiado irregular gracia a mi nariz congestionada, no me permite respira como yo quiero hacerlo; aparte, la pereza y sueño que tengo son grandes siendo las dos últimas producto tanto de esto como porque debería estar durmiendo. Ahora también por alguna extraña razón, mi boca está demasiado seca.

— ¿Por qué usted está sintiendo esto? Berglind.

Pues, no le puedo dar motivos a quienes se hicieron un pequeño paso por aquí, tres Angelus Morten que al ver a Hunter lo observaron con toda la molestia del mundo y este no se inmutó sino más bien se mostró indiferente. No les puedo dar motivo y es obvia la razón, ellos no saben cómo es mi existencia y decir que mi base humana está desapareciendo es completamente peligroso y contradictorio aun si son mis escoltas.

Me siento en mi cama, intentando respirar mediante mi nariz pero logro asfixiarme en ese intento; suelto un suspiro de exasperación a la situación. Aarón cruza la puerta tranquilamente, trayéndome mi taza de té para ayudar a dormirme con más eficacia pues, mañana no quiero estar somnolienta y no poder recuperar energías con sentimientos en este tiempo. En estos días no podré recuperar energías sentimentalmente ni poder cerrar mis heridas a gusto.

Secreto entre lazos: ErradicaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora