Capítulo 17 - Familia

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- Eres un idiota-murmuró.
- Déjame disfrutar de esto solo un segundo...-cerré los ojos y sonreí una vez más- Bien, listo-me apoyé otra vez sobre mis codos- ahora dime, ¿qué es lo que le perturba, señorita?-pregunté pasando mi dedo índice por su boca, bajando por el cuello y por entre sus senos.

Destiny comenzó a agitarse y violentamente tomó mi mano para llevarla a su rostro.

- Me molesta el hecho de que disfrute tanto de algo que sé que esta mal...
- Sigo sin entender, ¿por qué siempre dices que está mal?-recorrí su pómulo con mi dedo pulgar.
- No puedo contarte...

Bufé.

- Entonces, por mi parte, no me arrepiento de nada... de hecho, tengo ganas de...-metí mis manos por debajo de las sábanas y la rodeé por la cintura, apretujándola contra mí.

Carcajeó.

- Ahora no, en cualquier momento llegará Mary...
- Nop...-besé su cuello- Mary me quiere tanto que no volverá hasta mañana por la mañana, eso te lo aseguro...

Ella sonrió y comenzó a besarme, para comenzar a hacer el amor otra vez.

****
- ¡Niños! -escuché un voz ahogada proviniendo del pasillo, me desperecé estirando mis brazos y miré por la ventana. Ya era de mañana.

Restregué mis ojos, y miré para mi costado izquierdo. Allí estaba ella, mi linda y perfecta Destiny abrazándome firmemente por la cintura.

- Linda...-la llamé besando su frente.
- Estoy despierta...-murmuró.
- ¿Por qué no me despertaste?-la obligué a mirarme levantando su rostro por el mentón.
- Te veías cansado, además, eres adorable cuando duermes...

Sonreí y la besé dulcemente.

- Mary ha vuelto...-comenté.
- Aja...
- Eso significa que hay que levantarnos...

Ella gimió de fastidio.

Nos quedamos abrazados un ratito más, hasta que Mary nos llamó nuevamente.

- ¡Niños, levántense, necesito ayuda con algo!... ¡Taehyung!-vaya, sí que estaba apurada.

Pegué un salto de la cama, dejando que el frío mañanero me provocara piel de gallina en todo el cuerpo. Me vestí como un rayo y a los cinco minutos me encontraba saludando a la anciana.

- Pequeño Taehyung ¡tengo una gran noticia!
- ¿Qué sucede abuela?-pregunté bostezando.
- ¡Vendrán tus hermanos y tus sobrinos! hace tanto tiempo que no los veo, hoy telefonearon a tu padre para avisarles que se quedarán un par de días... ¿no es maravilloso?
- Vaya que sí, Mary... ¿En qué necesitas ayuda?
- Hay que preparar las habitaciones, de la comida yo me encargo...
- ¿Estás segura?, ¿no quieres que le diga a Destiny que te ayude?
- No, no... que ella te ayude a ti...-me dedicó una mirada algo pícara.
Alcé una ceja.

- Será mejor que vaya a contarle a Destiny...-señalé a mis espaldas. La abuela rió.

La ancianita cada vez me sorprendía más, nunca la había visto tan... joven.

Parecía una adolescente con sus actitudes.

Caminé por el pasillo agitando la cabeza a los lados, riendo.

- ¿Por qué la risa?-preguntó Destiny al verme entrar.

Estaba sentada en la cama, tapada con la sábana, con solo una pierna fuera de ella.
Una palabra: Sexy.

- E-eh... ¿Por qué no te vistes?... tendremos visitas, linda.
- ¿Quién vendrá?-preguntó mientras se levantaba y comenzaba a vestirse.

La luz del sol que se filtraba por la ventana golpeaba su piel de una forma deliciosa y sensual.

Me abstuve de cortar la distancia que nos separaba y desarmar aun más la cama.

- ¿Taehyung?-me llamó.
- Oh, lo siento...-agité mi cabeza, volviendo a la realidad- Vendrán mis hermanos, las esposas y mis sobrinos...
- ¿Jimin y Hoseok?
- Sip... conocerás a las gemelas de Hoseok y al niño de Jimin... además de la niña que Noe lleva en su vientre y a la esposa de Hoseok...-añadí sonando mi espalda, estaba algo contracturado.
- Será extraño volverlos a ver... deben estar... pues, "grandes"-hizo la mímica de las comillas con sus manos.
- Hace bastante que no se pasaban por aquí, Leo debe estar enorme...
- ¿Leo?-alzó una ceja.
- Leandro, el niño de Jimin y Noe. Lo sé, el nombre es algo extraño, es en español. Pero por eso lo hace muy especial...
- Es raro... me agrada... ¿Cómo se llaman las niñas de Hoseok?
- Lissa y Macy...son preciosas, ambas tienen hermosos ojos color verde...
- De seguro lo son...-sonrió.
- ¿Estás lista? Debes ayudarme a preparar las habitaciones...

Destiny me ayudó a armar las camas, claro que de un momento a otro le tiré una almohada por la cabeza, solo para molestarla.

- ¡Auch!, debes tener más cuidado Tae, no tengo la misma fuerza que tú para hacerte competencia...-refunfuñó tomándose la cabeza.
- Lo siento, linda... me dejé llevar...
Me dedicó una mirada envenenada, cuando me di cuenta, había recibido un almohadazo bastante fuerte sobre mi cara.
- ¡Tramposa!-carcajeé y me lancé sobre ella, cayendo ambos sobre la cama.

Comencé a hacerle cosquillas por todo el cuerpo, ella se retorcía debajo de mí.

- ¡Ba-basta!...-rió- ¡Ta-Taehyung, ya para!
- De acuerdo...-alcé las manos, inocente.

Pasaron unos minutos en el que estuvimos en silencio, salvo por alguna risita quedada recordando lo ocurrido hacía poco tiempo antes.

- ¡Pequeño Taehyung, Destiny, vengan!-nos llamó la abuela desde el living.
- Ups, Mary se enojará, hagamos rápido la cama...-me incorporé de un salto y a los dos segundos, teníamos la última cama hecha para recibir las visitas.

Caminamos tomados de la mano hasta el living, donde la abuela se encontraba saludando a los recién llegados.

Jimin, que saludaba a la abuela, no soltó en ningún momento la cintura de su esposa embarazada.

Demonios, ¡esa panza era una bomba de tiempo!

- Vaya, vaya, vaya...Mira quién vino por estos lares...-bromeé a mi hermano, Jimin.
- Lo siento, viejo... hacía meses que no nos aparecíamos, ¿cierto?-carcajeó y me dio un gran abrazo. Solo por ese minuto, soltó a Noe.
- ¡Taehyung! -extendió sus brazos hacia mí la embarazadísima de mi cuñada.
- ¡WOW! deja de comer Noe, o dejarás de ser tan atractiva para mi hermano...-bromeé, Jimin me miró con mala cara.
- Ahora se me fue el amor, niño...-ella cruzó los brazos sobre su pecho y frunció el seño ¡adoraba hacerla enfadar!
- ¡Niño! ¿Yo soy el niño? ¡Te gano en edad por cinco meses al menos!- carcajeé tocando su hinchada barriga.
- Comprende, estoy algo sensible... la niña está muy inquieta últimamente...-miró dulcemente su panza y la acarició.
- ¿De cuánto estás, ya?-pregunté acuclillándome para apoyar mi cara sobre mi futura sobrina.
- Entraré en el octavo mes...
- Hola...-saludé, aunque dudé de que la niña pudiera oírme- ¡Wow!-me exalté.
- ¡Uf! igual que la madre...-expresó Noe- ella tiene la suerte de patearte la cara, al menos...-se burló.

Aparentemente mi bromilla sobre su apariencia no le sentó bien.

Luego comprendí que ella era así, recordé cuando nos conocimos y cuanto disfrutábamos pelearnos, solo por diversión.

- Sabes que te quiero, ¿cierto, cuñadita?
- Me lo recuerdas siempre...-contestó sarcásticamente, luego sonrió simpática- Claro que lo sé, tontito...-desordenó mi cabellera y yo besé su panza.
- Gracias por darme una sobrina.
- En eso agradécele a tu hermano...

Hice una mueca. Ella tenía que salir con esos comentarios siempre.

- Tu vida sexual no me concierne, cuñadita...-le susurré al oído ahogando la risa.

Era adorable.

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