Capítulo 20 - El Secreto

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- Taehyung...-me despertó su melodiosa voz.

Los ojos me pesaban, por lo cual no los abrí.

- ¿Hmm?-murmuré.
- Ya es de mañana, deberíamos levantarnos.
- No, no todavía. -la aferré por la cintura hasta sentir su espalda pegada a mi pecho.

Carcajeó.

- Mary se levantará en cualquier momento, al igual que toda tu familia...
- Eso no significa que nosotros tengamos que hacer lo mismo...-besé su hombro.

Suspiró y giró para enfrentarme.

- Estuve pensando...
- Oh, no...-comencé.
- Calla y escucha. Estuve pensando en...que deberíamos volver a la ciudad, hace más o menos dos semanas que estamos aquí, hay que preparar el caso, Taehyung.
- Lo siento, linda... Tienes razón, después de todo, mi objetivo está más que cumplido.

Ambos sonreímos y nos besamos antes de levantarnos y reunirnos con el resto de la familia.

Desayunamos todos juntos, deleitándonos con los hot cakes bañados en miel de la abuela.

- ¿Todavía cabe más?-pregunté al ver a Noe levantándose por otra ración de panqueques.
- ¡Claro que sí! te sorprendería saber cuánto puede comer una embarazada.
- Déjale algo al mundo, cuñada...

Ella me sacó la lengua de forma infantil, a lo que yo reí.

- Ya, Taehyung, déjala...-Destiny me codeó.
- A ella no le molesta, sabe que estoy bromeando...

Me miró con desaprobación.

El resto de la tarde se pasó entre paseos familiares entre los pastizales, risas y charla.

Aquella noche anuncié que al día siguiente nos marcharíamos a la ciudad, en cambio, mis hermanos, se quedarían por lo menos una semana más para que los niños pasaran tiempo con sus abuelos y tíos. Cuando quisimos acordar, ya era un nuevo día y Destiny y yo nos encontrábamos despidiendo a mi familia.

- Cuídala mucho, Pequeño Taehyung...
- Claro que sí, abuela...-prometí mientras la abuela besaba mis mejillas.
- Te extrañaré, vuelve pronto...
- De eso ni lo dudes...

La abuela, gracias al cielo, no tenía idea de porqué pasaba tanto tiempo en la ciudad últimamente.

Saludé a mis hermanos, cuñadas y sobrinos mientras la abuela derramaba un par de lágrimas cuando se despedía de su nieta.

- Prométeme que volverás, Destiny...-suplicó la abuela entre sollozos.
- Si, abuela, volveré en cuanto pueda...-besó sus arrugadas manos y caminó hacia mí.
- ¿Lista?-la invité a que me tomara el brazo para entrar a la camioneta de Hoseok.

Ella me sonrió y entró al automóvil.

- Será extraño volver...-comenté, ya que el viaje hasta la terminal se estaba volviendo algo aburrido.
- Aja...-dijo antes de suspirar.
- ¿Estás bien?
- Sí...

¿Sólo eso? ¿Un monosílabo?... no estará volviéndose como antes, ¿cierto? Hice una mueca, por fastidio y a la vez por miedo. No quería que Destiny perdiera la chispa otra vez.

Traté de demostrarle mi amor rodeándola por la cintura, quizás solo estaba afligida por la despedida.

Hoseok, como de costumbre, comenzó a parlotear y pronto me había olvidado del aconcojamiento de Destiny.

- Tendríamos que volver a reunirnos en navidad, hermano... no falta mucho-comentó Hoseok.
- Sería lindo juntar otra vez a toda la familia... Pero primero debo arreglar el tema del caso, no voy a permitir que le quiten el campo a Mary.
- Tienes razón. Bien, ya llegamos...-aparcó la camioneta y me ayudó a bajar las maletas.

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