SINOPSIS:
Dharani Taylor, una chica de diecisiete años, aguarda su condena como prisionera juvenil en el Arca cuando descubre que varios reclusos serán enviados a la Tierra.
Llamada la "Princesa de la Anarquía", llegará a la Tierra para convertirse...
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La noche había caído cuando el grupo de seis adolescentes había regresado al campamento.
Clarke y Dharani lideraban el inicio de la fila, cargando en sus bolsos improvisados algunos vegetales que la castaña había encontrado por el camino. Y sí, los habían estado recolectando.
Como Clarke había deducido, Dharani sería valiosa por su habilidad aprendida en la estación granja.
Detrás de ellas, Wells y Finn cargaban al inconsciente, más vivo, Jasper, quien necesitaba pronta atención.
Y, finalizando la fila, Murphy y Bellamy traían envuelto en uno de los paracaídas a la criatura cazada. En pocas palabras, la nueva cena.
―Volvieron ―avisó alguien, haciendo que rápidamente un conjunto de chicos los rodease, fisgoneando acerca de las nuevas noticias.
Rápidamente, los comentarios y murmullos de todos se hicieron llegar como coro de cotorras.
Habían conseguido regresar con vida a Jasper, y eso daba mucho que comentar.
Octavia, quien había abandonado su "Tronco del amor" con Atom, corrió hacia los chicos esperando recibir noticias.
Rápidamente, interceptó a Finn y Wells esperando saber sobre el chico.
―¿Él...? ―inquirió, señalando a Jasper.
―Está vivo ―le tranquilizó Clarke, dejando junto con Dharani los vegetales dentro de la nave―. Necesito agua hervida y trapos para vendarlo.
―Yo puedo encargarme de eso ―afirmó la castaña, cogiendo en su mano su cuchillo para cortar las telas de los paracaídas.
Caminando lejos de ellos, Dharani avanzó hacia una pequeña tienda, o más bien, el intento de una, dado que ahí era donde guardaban las pocas provisiones que poseían.
Los cinturones de la nave, agua y los paracaídas en general. Los últimos, siendo el interés de la castaña.
Con algo de ingenio, y un paracaídas podría volverse en las vendas que Jasper necesitaría.
Entonces, antes de llegar a su destino, una voz la detuvo.
―Hey, espera ―le detuvo Octavia, sujetándola del brazo antes de que desapareciera de su vista―. ¿Todos están bien?, ¿Mi hermano...?
―Está con vida también ―le afirmó ella, señalándolo.
Octavia se giró hacia donde Dharani le indicaba con su dedo, y pudo ver a su hermano mayor situarse entre varios adolescentes.
Junto con Murphy, descendían de su hombro la criatura para enseñárselas a todos. Octavia rápidamente caminó en dirección a él sin soltar a Dharani del brazo y, por ende, arrastrándola consigo.
