Pesadillas del pasado parte/2

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Han pasado dos año desde ese suceso. Tras que se marchara Sucellus de Mag Mell en busca de respuestas sobre el poder de estos chicos, Dea Dama dirigido el castillo siendo la mejor de las anfitrionas.Por el momento.
Durante las siguientes semanas de su viaje se habían provocado unos asesinatos entre los celtas que habían viajado al más haya. Algo extraño ocurría y la gente comenzaba a sentirse aterrorizada.
Nos centrarnos en uno de los enormes pasillos del castillo al suroeste del gran salón En donde Morrigan junto a Arturo y Nial paseaba entre los callejones en señal de un residente cadáver.

-Dioses... -observo el cadáver Arturo-¿Desde cuando una cuchara se ha convertido en un arma?.

-Eres un poco incrédulo hermano -sonrió Nial y miró a Morrigan- ¿Tu qué opinas?

-Ya llevamos quince muertes este mes -hizo desaparecer el cadáver- El que este haciendo esto, sabe lo que está haciendo. ¿Han descubierto algo?.

-Por ahora nada -respondió el hermano mayor mientras bostezaba por el sueño- Creo que deberíamos dejarlo por hoy y poner alguna trampa o algo.

-Si, vayanse los dos a vuestras habitaciones y descansen hasta mañana.

Ambos hermanos se marcharon a sus habitaciones mientras la diosa miraba aún los hechos encajando pruebas en busca del asesinó mientras regreseba a su habitación personal a pie pensativa.

-«Algo se me escapa. ¿Pero el que?»-siguió sumida en sus pensamientos-«Hubo indicios de pelea pero nada que delatará al agresor. El asesinado era ese tal ¿Finn? ¡Agh! Cómo odio q tengamos tanta gente aquí. Sobretodo era un glotón si no recuerdo mal, seguramente en el forcejeo el asesino se le callo el arma y luego....»

Abrió su habitación y luego la seyo a modo de seguridad con una runa, de un chasquido iluminó la habitación desde su propia chimenea, su armadura se fue quitando por si sola, se colocó en un altillo cerca del ventanal con dirección a su mirador personal del castillo dejando a la diosa bueno sin ropaje.
Luego se aseo tranquilamente mientras la fuerte tormenta golpeaba furtivamente a la ventana con las gotas de agua y los potentes relámpagos resonando por todo el castillo en la inmensa oscuridad.
(Seguramente Taranis cabreado por qué no conseguía arreglar su carro de combate)
Hasta quedarse con un vestido negro cubriendo sus pies y brazos observando una bola de cristal lo que ocurría por el mundo de forma que fuera un televisor de la edad Moderna.
Con un toque de su dedo índice dejo desaparecer la imagen de la bola de cristal. Y se acostó en su cama.
La noche fue tranquila para el sueño de la diosa de la guerra. Oportunidad perfecta para que una sombra detrás de su puerta decidiera destruir la runa de la diosa de un toque con un cristal negro emitiendo un pequeño destello morado sin despertar a Morrigan.
Con paso cauteloso y con mucho sigilo este extraño sujeto empuñaba una guadaña de un filo oscuro como la misma oscuridad, se acercó la cama de la diosa y levantó su pesada he letal guadaña para asesinar a Morrigan de un impacto en pleno corazón...
La suerte no estaba de su parte. La parte trasera al filo del arma chocó contra una de las esquinas de madera de la cama despertando a la diosa esquivando el ataque de este sujeto contra la cama destruyéndola.
Morrigan con gesto de ambas manos atrajo dos de sus miles de espadas y bloqueó el filo de la guadaña con sus propias espadas.
De una patada envío contra el armario a aquel desconocido asesino lo que este aún estaba vivo, se levantó y lanzó una especie de arina a la Morrigan dejándola ciega hasta escapar de ella por poco tiempo, luego lo persiguió por el castillo.

-¡Regresa aquí! -grito Morrigan tras este sujeto lanzando más armas arrojadizas siendo lanzas .

Aquel sujeto bestia totalmente de negro hasta su rostro estaba tapado por una máscara blanca seguramente echa de arcilla solo enseñando unos labios perfectamente moldeados y con dos agujeros. El aura que producía su arma al desviar los ataques de Morrigan dejaba muchos misterios sin resolver como si ya prediciera los ataques de la diosa sin pestañear. ¿Quien estaba debajo de dicha máscara?.

Un haz de luz se abrió en medio de su pasillo tras una puerta apareció Epona sin saber que pasaba con un vestido blanco a modo de pijama. Lo que distrajo a Morrigan y que el asesino pasará por delante de la diosa desapareciendo en un mar de oscuridad como si no hubiera pasado nada.

-Epona ¿estás bien? -pregunto.

-Si -miro a donde se dirigió el misterioso sujeto- Ese era....

-El es....
Un grito resonó por el castillo era procedente del gran comedor, un punto del Mag Mell en que el sonido se intensifica, como las ondas sonoras que producía un altavoz de guitarra electrica, despertando a todos los habitantes de la isla.
Ambas diosas se teletransportaron junto a los otros dioses en el gran comedor. Dea Dama ,Tatamis,Dagda,Lugh,Bigrid, observaban una escena la cual los horrorizaron. Angus el dios del amor había sido crucificado por encima del trono donde la sangre del dios recorrida el trono de Sucellus manchando lo con un mensaje de advertencia a los dioses.

«Cuando la luna se tiña de sangre y regrese el rey. Ninguno de vosotros estará vivos».

La muchacha del suelo estaba agonizada llorando por la perdida de su amante (seguramente) siguió llorando hasta que luego algo le ocurrió.Se quedó sin aire y luego en su cuello se llenó de sangre con un brillo negro matando la al instante dejando a los presentes aún más confusos.

- Ese desgraciado-cerro su puño con toda su fuerza Dagda tras la perdida de su hijo.

-Que pongan la alarma -ordeno Dea Dama a sus sirvientes- Hay que celebrar un digno funeral para este noble dios.

Linaje. El renacimiento del rey © [Finalizado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora