Linaje. El renacimiento del rey © [Finalizado]

Una visita inesperada que acaba en la persecución mas peligrosa del mundo.

Con sinceridad creia que la casa de una diosa de la guerra iba a estar llena de armas o armaduras pero todo lo contrario. Solo habían armaduras de tamaño de figuritas estilo playmobil, un reloj suizo de cuco de gran tamaño, un sofá que parecía que estaba sentado en arenas movedizas y una mesa de cristal con una escultura de cristal de un cuervo con una base que formaba el trisquel. Tampoco me imagine que fuera tan hospitalaria Morrigan, era como darte un una patada en la boca de forma moral y que ella había cambiado radicalmente  tras estos milenios. Regreso de la cocina con una tetera y un par de vasos para los cuatros que lo dejo en la mesa. Por si no saben en donde situarse ahora mismo

-Tengan cuidado aun quema -me miró Morrigan curiosa tras servirnos los cuatro el te- Bien, de que se trata.

-Veras, no me gusta dar malas noticias y tampoco morir.

-No te pienso matar, Simón -subió la ceja al escuchar esos- Seria muy feo por mi parte.

-Okay...

-Mejor que continúes -me recomendo Ruby luego de soplar de su taza- A las dos no gusta las demoras. Ya lo deberías de saber.

- Claro. Ya sabrán la noticia de L.I.B.R.A ¿verdad? -suspire un poco incómodo- Fue por nuestra culpa, en tal caso mía.

-Oye no fue culpa tuya -me miro seria Lucy incluso molesta- Desde un principio fue culpa de Nuada y Aine. No tuya.

Morrigan escupió el té de golpe mas comenzó a toser, rápidamente se dio unos golpes flojos sobre el pecho. Eso si que era ser un poco bruta con tomarse el té a lo golpe.

-Nuada esta muerto, vi como Balor lo mataba junto Nemain.

-Que va, ahora esta en mi cabeza y no para de molestar cada tres por cuarto.

-A veces me entran unas ganas de golpearte chico -dijo este adoptando mi cara aun en el de la mesa cristal luego saludo con la mano- Ah, hola Morrigan.

-Como diablos puedes estar vivo...

-No vivo, ligado a su alma si -explico de forma corta- Pero ahora nuestros problemas son mayores.

-Nial, osea Salazar ha despertado. Davis es uno de sus acólitos y aun tengo la muestra de como hicieron para romper el sello -levante la mano donde me había cortado la palma vilmente con aquel cuchillo- Una gota de sangre y toda la sala del trono de Mag Mell exploto. Solo sobrevivieron cuatro.

-Nero, Weiss y nosotros dos somos los únicos que salimos de Avalon...Aine se quedo para protegernos -miro el suelo mi hermana- Tambien nuestros padres...

Morrigan miro a su hija con una mirada sería, lo cual Ruby  capto la situación tan comprometida que estaba por ocurrir. Extendí la mano y toque una taza de te comprobando su temperatura, que descendía poco a poco hasta quedarse en un todo de calentura decente para tomar. En esos pocos segundos probé el té de la diosa, era de hojas de menta y lo bueno de todo es que era antioxidante.

-Los Cazadores de Media noche tienen información que puedan decir que aun nuestros padres esten vivos -continúe sin muchas ganas de hablar- Pero a cambio tenemos que reunir a varios dioses.

-¿Piensan los dos en que los encontraran al resto de Tuatha Dé Danna fácilmente? -discrepo ella- Es un trabajo muy arriesgado y nada facil.

-Pero por una causa mayor, el pueblo se une incluso para la guerra -hablo Nuada tomando igual que yo el té de Morrigan desde su prisión- ¿Son hojas naturales?

-Lo son -respondió Ruby- Pero...¿Vas a hacerlo?. Es arriesgado.

-Ruby, tanto mi hermana y yo estamos "entre la pared y la espada". Además que quieres que haga, huir no es la mejor opción.