Linaje. El renacimiento del rey © [Finalizado]

Problemas en los sueños y el dios mecánico

Nunca, pero digo nunca me habla sentido tan bien la ducha que me había dado. El baño de la casa rural tenía una tina la cual puede usar, luego de quitarme toda la sangre sucia mientras que pena de mi, Ruby decidiera poner a lavar mi ropa junto a un potingue que había echo Axl mezclado con suavizante de ropa. Mientras ellos estaban así medio ocupados ya con la casa fortificada por sus hechizos totalmente locos, yo me quede un rato dentro de la tina repleta de agua caliente, todo el mundo necesita un descanso justo despues de ver el mismo caos ante sus ojos. Y, aunque hable de forma tan tranquila, en realidad me culminaban las palabras de Axl, era una verdad tan templada como el acero. Por esos segundos de pelea con los Sluagh me había echo el héroe frente a esos desconocidos anteponiendo otras once vidas por delante. Aun con remordientos introduje mi cabeza en la tina aun sin sumergirla de todo para poder respirar, tan solo hasta tener mis orejas sumergidas, levante mi mamo derecha aun con la cicatriz que me hizo la daga de Gula en Avalon y la observe detenidamente.

«Veo que le estas dando vueltas a lo ocurrido -tosió el dios dentro de mi mente- No le des tantas o el cerebro te explotara».

-Axl tiene razón, Nuada. No soy un súper héroe -cerré mi mano con fuerza- Estoy empezando a dudar si deba continuar esto.

«Los problemas no se solucionarán si no te impones ante ellos. Y siempre tarde o temprano los problemas te encontrarán».

-Si...Cierto.

Levante la cabeza dejando que las gotas de que dejaban caer mi corto cabello chapoteara a mi alrededor y me empape un poco la cara para luego salir de la tina. Luego  de secarme la piel y el pelo me puse una bata de spa que habían dejado los propietarios de la casa para el disfrute de los hospitalarios. Con total tranquilidad marche del baño hasta mi dormitorio pasando por la cocina y el salon donde ya estaba durmiendo Tempestad en el sofá. Los suspiros que daba dormida emitían una pequeña llama inofensiva contra el suelo de piedra, que tan solo ella se arropaba con una simple manta, sonreí un poco a la imagen pero habían cosas de que terminar. Como mi buen nuevo amigo dijo ya tenia todo preparado en mi habitación, de su bandolera extrajo un par de minerales, dos amatistas, dos azulitas y una piedra de luna. A simple vista me a
parecieron piedras normales sacadas de una tienda de suvenirs pero luego me percate de que tenían runas escritas, ¿acaso era el secreto de Axl?. Pocos segundos metió las piedras dentro de una bolsa de pequeño tamaño.

- Ya le puse a tu ventana y a la terraza el pequeño sistema de seguridad. ¿Estas mejor?.

-Un poco, aun las heridas me  escuecen.

-Mañana estarás como nuevo, como tu ropa por supuesto -me dejo la bolsa encima de la cama- Bien he de explicarte un par de cositas sobre el mundo de los sueños.

-Si será lo mejor, no quiero acabar en coma otra vez.

-Vale, ten en cuenta que el mundo de los sueños es totalmente diferente al nuestro. Las piedras que están en la bolsa anulara todo contacto con el mundo terrenal, lo cual tendrás total acceso a tus memorias, pero no despertarás a propia voluntad -me explicó.

-Osea, que de esa manera tendré que ir de recuerdo en recuerdo hasta un núcleo -intente deducir las palabras de Axl.

-Majo menos, tienes que llegar a los recuerdos del alma de tu Linaje por las que has visto. Debes encontrar unas puertas con un aura blanca y solo te digo, por lo que mas quieras no hagas nada de cambie el recuerdo.

Asistí la cabeza comprendiendo su explicación, soltó una pequeña sonrisa y luego se marcho de mi habitación dejándome totalmente libertad. En esos pocos segundos de libertad me tome el detalle de escribir estos sucesos en mi diario, el cual aun seguía teniendo después de todas las increíbles y sobrenaturales peleas. De verdad a veces pienso que este fajo de hojas aun en blanco es igual de duro que un Nokia. Cuando termine me acosté en mi cama y reconcilie el sueño. Al principio estuve un buen rápido despierto, pasaron mas los minutos y yo aun seguía despierto. Impaciente por saber porque no me dormía, me levante molesto y incluso con mucho nerviosismo.