Megan 1.0

28- Cosas nuevas y mejoradas

No los aburrire en contarle todo lo que pasó los siguientes días que mi familia y amigos estuvieron en Malibú. Solo les diré que fueron unos días hermosos, no solo por qué comparto los pocos días juntos a ellos, si no también por qué me sentí tranquila y feliz, sin nada interfiriendo, salvó ese periodista que golpee y si, ese vídeo se hizo viral pero no le di importancia, siempre lo diré: desventajas de ser una Stark. En fin, todo salió bien, salvó por la parte que cada uno tenía que volver y seguir con su rutina.

-Piensan que estas loco, que te dio una depresión post secuestro o como mierda quieran llamarlo - hice un ademán con la mano como menospreciando el tema - Tu y yo sabemos lo que sucedió allí, nadie mas Tony - tire el periódico sobre la mesa con brusquedad - Me molesta que digan esas cosas, y lo que mas me molesta es que a ti te importante - me cruce de brazos.
-No me importan.
-Si.
-No- rodee los ojos.
-Como digas - saque de el refrigerador una botella de agua - ¿Seguirás trabajando con eso en el taller?- pregunte cambiando de tema.
-Claro que si.
Luego de mi fiesta de cumpleaños, Tony y yo, habíamos estado haciendo una especie de armadura de hierro, o como el lo llama, un traje, en fin, era algo parecido a lo que el y Yinsen habían echo, solamente que ahora mi padre le hizo muchas mejoras, como por ejemplo, botas y guantes repulsoras que le permitían volar, era algo increíble y gracioso ver a Tony haciendo pruebas de eso, por que la mayoría de las veces la prueba fallaba y terminaba estrellándose contra algo y rompiéndolo.
Pero como era de esperar, los inventos de el, terminaban funcionando. Nos pasamos en el taller muchas horas al día, para ser exacta, 15 dias, 15 días en los que solo salíamos de ahí para ir al baño, o comer algo, pero al final todo salio mas que perfecto.

-Iré a decirle que viniste - le sonrió Pep, la pelirroja giro sobre sus talones y fue al taller en busca de mi padre.
Yo estaba en el sofá de la sala, le dedique una sonrisa falsa a Odie como sinónimo de saludo.
-¿Como has estado?- me preguntó con una sonrisa, diu, odiaba su presencia.
-Bien, ya sabes, lo normal - no despegaba mis ojos de la pantalla de mi teléfono.
-Me alegro por ti, oye, ¿Te gusto el obsequio? - entrecerre los ojos recordando los miles de regalos que recibí el día de ayer.
-¿La chaqueta de cuero de AC/DC? -el asintió mientras que se sentaba delante del piano de cola- Si, me encanto - y aunque me cueste admitirlo, me hizo un buen regalo - Gracias - y antes de que el pudiera decir algo, sentimos que en el taller algo exploto, seguido de un grito de Pep.
El casi calvo y yo nos miramos algo sorprendidos ante el sonido, sentí unos tacones y era Pep que venía con el ceño fruncido.
-¿Que sucedió allá abajo?- pregunté curiosa
-Tu padre está perdiendo la cabeza - se sentó a mi lado con su computadora portátil- No me extrañaría que explotará la casa.
Segundos más tarde Tony estaba en la sala, miéntras que yo seguía con mi celular en la mano y Odie tocaba algo en el piano.
-¿Cómo nos fue? - pregunto, Odie seguía tocando las teclas - ¿Así de mal?
-Solo por qué traje pizza desde New York no quiere decir que nos fue mal- acotó Odie
-Claro que no - mi padre se sentó al lado de Pep para luego atacar la caja de Pizza, la cual previamente yo había tomado una porción.
-Me hubiera ido mejor si hubieses ido conmigo - mi padre negó con la cabeza mientras que se atragantaba con la porción de pizza.
-Me dijiste que no hiciera ruido, que me mantuviera al margen, es lo que eh echo - tomo una servilleta y se limpio la boca.
-No inventes Tony - soltó frustrado mientras que dejaba el piano e iba hasta donde estabamos - En público, con la prensa. Sabias que era una junta de la mesa directiva.
-¿De verdad? - pregunto mientras que su colega se sentaba a su lado. - Meg y Pep podrían haber ido en mi lugar - la pelirroja y yo nos miramos confundidas
-Que chistoso Tony, mandar a tu asistente y a tu pequeña hija - ambas lo miramos mal - Sin ofender chicas - carraspeó - Tony, dicen que tienes estrés postraumático, pidieron un mandato judicial.
-¿Un que? - pregunto sin entender mi progenitor.
-Significa que te quieren destituir papá - dije bloqueado mi teléfono, para meterlo en mi bolsillo.
-¿Por qué? ¿Por que bajamos 40 puntos? Sabríamos que eso pasaría.
-56 y medio para ser exactos - acotó Pepper.
-Eso no importa - mierda, ya se va a enojar - Tenemos la mayoría de las acciones.
-Tony, la directiva también tiene derechos - soltó algo frustrado Odie - Están discutiendo que tú y el nuevo rumbro que quieres para la compañía no los benefician.
-¡Estoy siendo responsable ese es el nuevo rubro! - soltó mi padre - Hablo de mi, como cabeza de la compañía - comenzó a mirarnos a todos los ahí presente como fundantando su elección.
Pep solo resopló, yo solo lo miraba, no iba a decir nada al respecto, yo y el pensabamos iguales. Algo fastidiado, se puso de pie y tomo la caja de pizza.
-¿Adónde vas? - pregunto Odie.
-En el taller.
-Espera - se puso de pie y fue hasta el - Tony, estoy tratando de arreglar esto, pero tú tienes que ayudarme, dame algo que los convensa, deja que mis ingenieros analicen eso - señalo su pecho, oh genial, ahora quería copiar la idea del rector- Que dibujen planos...
-No - lo interrumpio mi padre - Esto se queda conmigo - se refería al reactor - Olvídalo.
-Oh de acuerdo, entonces esto se queda conmigo- tomo la caja de pizza que antes tenía Tony - Ya Tony, toma un pedazo, no, mejor toma dos - mi padre hizo caso - ¿Puedo ir a ver lo que estás haciendo?
-Buenas noches Odie - se fue por las escaleras, pero se frenó - Meg, ¿Vienes? - me puse de pie y lo seguí.

-¡Megan! - chillo entrando a mi habitación
-5 minutos mas - me cubrí con la manta hasta la cabeza.
-Lo termine - me sacó la manta de encima.
- ¿De verdad? - pregunte abriendo mis ojos pesadamente.
- Si, ven a verlo.
-¿Que hora es?- pregunte aun adormilada.
-9 de la noche, vamos arriba, se te juntara el día con la noche si sigues durmiendo así.
- Podría dormir como una persona normal, si alguien no se quedara hasta las 5 de la mañana en el taller - me incorpore de la cama.
-Nadie te obligo a que te quedaras hasta esa hora conmigo.
-¿Esa es tu manera de decir "Megan agradezco tu ayuda por mas que no la quería"? - comenzamos a salir de mi habitación.
-Creería que si - rodee los ojos mientras que nos dirigimos hasta el taller escaleras abajo. Luego de abrir la puerta de vidrio, vi un traje de hierro todo de color plateado, parecía algo así como un robot, pero se que no lo era, era la armadura de Tony por así decirlo, estaba conectada a una plataforma, que al parecer le proporcionaba energía.
-Tiene un ambiente autónomo, una variedad de sistemas de armas a bordo, una mayor fuerza, vuelo, y varias matrices de comunicaciones y sensores.
-¿Radio y radar?
-Exactamente - me confirmó - También tiene múltiples fuentes de alimentación, incluyendo una función secundaria de captación de energía solar en el caso de que los métodos convencionales de recarga no están disponibles - me acerque hasta ducha armadura y comencé a inspeccionar con los ojos - Los repulsores son una forma de propulsión y jet de dirección, a pesar de que pueden ser usados para atacar.
-Es asombroso - deslizaba mis dedos por el hierro frío - ¿Y que esperas para probarlo? - lo mire ansiosa.
-¿Ahora?
-Si.
-No lo se.
-Si quieres lo pruebo yo.
-Que chistosa.
En menos de un minuto, el traje se abrió para que Tony se metiera en el.
-Oh, antes de que lo olvide, ve al escritorio, ahí hay un comunicador inalámbrico que te conectara conmigo - señalo - Todo el software esta conectado manualmente o con Jarvis - el traje se cerro dejándolo dentro.
-Genial - musite.
Me daba algo de miedo ver al traje cobrando vida, pero me tranquilizaba al saber que se trataba de mi padre. Levantó el pulgar en sinónimo de que estaba todo bien, sus propulsores se prendieron y salio volando de ahí.
Fui corriendo hasta el escritorio que dijo antes mi padre, tome el comunicador que era ultra pequeño, lo puse en mi oído mientras que me sentaba en la silla que daba frente a la pantalla.
-¿Tony? ¿Me escuchas?
-Si, aquí estoy - la pantalla se prendió y tenía la vista de lo que Tony veía, podía ver como volaba y se alejaba de todo, las luces de la ciudad iluminaban todo a su camino - Esto es increíble - gritaba eufórico.
-Definitivamente me tienes que prestar ese traje - solté emocionada.
-Sueña pequeña - dijo - Jarvis ¿Cuánto es el record de altitud?
-Es de más de 25.500 metros señor
-¿Que vas a hacer Tony? - pregunté.
-¡Los récords están para romperse! - grito.
-¿Acaso te quieres matar? - resople mientras que seguía poniendo atención a la pantalla, solo veía el cielo estrellado
-Señor se está formando una capa de hielo peligrosa - advirtió Jarvis
-No pares Jarvis, sigue
-Tu si que eres testarudo - solté - Papá, no sigas, si el traje se congela, se desactivará todo y el traje será obsoleto - dije esperando que recapacitara, pero, por favor, estamos hablando de Tony, a él le gusta correr riesgos.
-No me importa - dijo algo agitado.
-Jarvis, más arriba - comencé a ver qué la pantalla perdía señal y la voz de Tony se entrecortaba.
-¿Tony? ¿Tony me escuchas? - y si, efectivamente había perdido el contacto, esto me comenzó a alarmar. Sentí el grito de Tony y que nuevamente la conección se estableció, al parecer no le había sucedido nada, gracias a los dioses.
-¿Estás bien?
-Mejor que nunca - se escuchaba emociónado - Ya estoy volviendo a casa.
-Genial - sonreí.
-Muy bien Jarvis, apágalo - todo se desconecto, y lo que pasó segundo después fue muy trágico pero gracioso. Sentí un ruido en el piso de arriba, seguido de eso vi como el techo del taller se rompía dejando entrar a Tony con su traje y que esté al final cayera arriba de su auto de colección, el cual quedó destrozado, gracias a Dios no fue el mío, que se encontraba al lado, ¿Ven? Se los dije, gracioso y trágico.