La Apuesta - Kookmin

13

Narra Jimin

Me había tomado dos semanas volver a clase, fue una tortura perder tantos días, pero estaba feliz por que Jungkook me había acompañado cada uno de ellos. Aunque mi padre no estaba super feliz de que saliera con un chico todo tatuado, tampoco se oponía a ello. Era gracioso ver como Kook se ponía incómodo cuando mi padre venía a la habitación, es adorable.

Hoy no lo había visto aún, me encontraba en el pasillo hablando con un compañero de matemáticas, me preocupaba un poco el como me tratara frente a los demás, ya que nadie sabe que salimos. Hablando de lo que habían estado dando en clase, note que mi compañero se puso bastante nervioso, de pronto se despidió y salío corriendo.

- Podrías dejar de asustar a mis amigos? - dije sin voltear a ver al hombre detrás de mi.

- No es mi culpa que sea un miedoso - susurro en mi oído.

- Jungkook no seas así - lo mire y sus ojos brillaban y su sonrisa de conejo era visible desde miles de kilómetros.

- Como te recibió la aburrida escuela? - preguntó con su cara de malote.

- Muy bien - le sonreí como nena, parecía un estúpido - al parecer todos me extrañaron, ¿me estas escuchando? - miraba para otro lado.

- Odio a esos tipos, otra vez están molestando a Amanda - apretó el puño.

- La conoces? - pregunte incrédulo.

Amanda caminaba por el pasillo como si nada le importara, unos chicos le gritaban cosas y otros se reían, pero a ella realmente no le importaba, ¿será que no les entendía?.

- Como es que no te molesta? - le dijo kook mientras ella pasaba por nuestro lado.

- Hola Jimin, como estas? - me sonrió y yo le respondí con otra sonrisa - no es tan importante lo que ellos piensen campeón - golpeó el pecho de Jungkook con la palma de su mano y él sonrió - chimi te veo esta noche, iremos a cenar -

- Esta bien, nos vemos - y así se fue.

Todo se fue dando con normalidad, kook se a portado muy amable conmigo, también supe que MoonBin empezó a salir con otro chico y eso me alegro mucho.

Ya a pasado un mes desde que salimos oficialmente, Jungkook me presento a su hermana, la cosa si que iba enserio , ella fue muy amable también, últimamente charlamos mucho sobre él, ella me cuenta cosas de cuando eran pequeños y es muy graciosa.

Logré que mi padre me diera permiso de quedarme en casa de Jungkook, estaba tan emocionado, podríamos dormir juntos toda la noche, juro que me aferrare a su abdomen y no lo soltare jamás. Quedé en que mi padre me llevaría a las ocho, lo obligue a que se fuera, ¿acaso me acompañaría hasta la cama y me sacaría la ropa también? que le pasa. Subi por el ascensor y corrí hasta su puerta, me llamó la atención encontrarla entreabierta, Jungkook siempre es muy cuidadoso con eso.

- Kooki estas aquí? ¿Estás bien? -

Entre encontrándome con un departamento revuelto, todo estaba tirado, roto y dado vuelta, parecía que había pasado un huracan por ahí. Cerré la puerta y comencé a buscarlo, me imagine lo peor, fui directo a su habitación y allí lo encontré, habían hojas por todos lados con dibujos hermosos, él estaba sentado a lo indio en la cama con una carpeta dibujando, al parecer había llorado.

- Kook? - entre muy lento a la habitación, no quería asustarlo.

- Sabes por qué lo chicos se drogan, toman alcohol y hacen cosas estúpidas? - me dijo mientras dibujaba, parecía muy frustrado - por qué a sus padres les importa una mierda lo que le pasa a sus hijos, por qué lo único que les importa son ellos mismo, por qué quieren controlar tu vida a su antojo siendo que en su puta vida se ocuparon de ti - lanzó la carpeta golpeando un armario que había enfrente.

Me asuste un poco al verlo así, nunca lo había visto llorar, estaba realmente dolido pero yo tenía miedo de preguntar que había pasado. Me acerque y senté a su lado, intenté abrazarlo pero él me rechazo. Se levantó de la cama y se dirigió a la sala, yo comencé a juntar los dibujos, eran realmente hermosos, paisajes, retratos, unos eran de Seung Hee y otros de una mujer más mayor, supongo que era su madre, logre juntar los todos excepto por uno. Levante la carpeta que había lanzado lejos, había un dibujo sin terminar, era un hermoso Jimin sonriente, tomé la hoja con mis manos y me emocione por que se veía tan hermoso, él tenía tanto talento, ¿pero por qué no lo aprovechaba? ¿sería una pasatiempo o algo más?.

- No quiero que veas eso - me arrebato el dibujo molesto.

- Es hermoso, ¿por qué no me contaste que dibujabas tan bien? -

Él se puso a ordenar la habitación, ignoro mi pregunta, simplemente me ignoro.

- Tal vez deberia irme - camine a la puerta para tomar mi mochila y así llamar a mi padre.

Él me tomó del brazo y me abrazo fuerte pero ya no lloraba, solo estabamos ahí abrazados sin decir nada. Todo el ambiente había quedado helado, pidió comida, miramos una película, pero él no le presto atención, estaba concentrado en sus pensamientos, yo tampoco sabía que decir, no sabía como ayudarlo, no sabía nada de él.

- Te amo - le dije de una forma inaudible.

- También yo - no me miro, solo lo dijo.

Se levantó y junto las cosas de comer que teníamos en la cama, me ordenó que no me moviera de ahí, que él volvería pronto. Me dejó solo como media hora más o menos, no entendía nada, me quedé dormido de esperar. Cuando desperté, estaba todo oscuro, pude sentir su perfume a mi lado y eso me tranquilizo un poco, pero mi noche ya se había arruinado, se que suena egoísta, pero yo quería amarlo hasta el cansancio, era la primera noche que pasaríamos juntos como novios.
Me levante y me quite la ropa quedando solo en bóxer - piensas violarme mientras duermo? - me dijo, yo me subí encima de él y lo bese dulcemente - en realidad pensaba despertarte - le dije entre besos.
Acaricio y beso mi cuerpo como si fuera luego único que le quedaba en la vida - nunca voy a dejarte ir - me dijo entre suspiros, gemi de placer al escuchar esas palabras, me sentí amado, por primera vez conocía el amor de verdad y él sabía muy bien que yo sentía lo mismo. Nos quedamos dormidos, él sobre mi pecho y yo acariciando su cabello. No existía nada en el mundo que pudiera arruinar este momento.

- ME IMPORTA UNA MIERDA LO QUE TU QUIERAS, YO NO VOY A IR A NINGÚN LADO - los gritos de Jungkook desde la sala me hicieron despertar dando un salto en la cama.