La Apuesta - Kookmin

21

Narra Jimin

Suspire intentando no llorar - Jimin dime algo por favor - dijo Jungkook desde el otro lado del teléfono.

- Ya lo se - respondí, un silencio inundó mi mente y los recuerdos volvieron a mi.

FLASH BACK.

Luego de la operación de Jungkook, muchas personas venia a verlo, gente que yo no conocía, familiares, amigos lejanos, etc. Entre ellos llego una chica muy linda, más o menos de nuestra edad, estatura promedio, cabello castaño y grandes ojos.

- Mi nombre es NaYeon - me dijo ella aquel día que nos conocimos.

Amablemente me presente ante ella y le pregunte quien era, sentí curiosidad ante su tristeza al ver Jungkook dormido en la camilla.

- Soy un error - dijo ella - él esta así por mi culpa - sollozo.

No llegue a comprender sus palabras hasta que comenzó a contarme lo que había ocurrido entre ellos mientras yo estaba lejos.

- Hace un par de noche nos conocimos en un bar, nos llevamos bastante bien aunque él estaba algo tomado - sonrió - me llevó a su casa y tuvimos sexo, comencé a sentirme mal y descubrí que ahora estoy embarazada, estoy asustada, creo que él tiene pareja y lo meteré en problemas - guarde silencio y baje la mirada - yo no quiero nada de él, pero tampoco quiero que mi niño crezca sin padre - lloro - espero se recupere pronto -

La contuve un momento aguantando las lágrimas, la abrace y mientras ella lloraba en mi hombro pensé, ¿Jungkook me a engañado?, ¿lo habrá echo otras veces? ¿como voy a confiar en él ahora? y encima tendrá un hijo, me puse aún más triste por que sabía que era algo que yo jamás podría darle por que obviamente soy hombre. ¿Y si él se enamoraba de ella y formaba una hermosa familia junto a su hijo?, todo era terriblemente frustrante y triste.

- Tu que eres de él? - me pregunto separándose de mi.

- Soy su novio - le dije mirando al suelo - o eso era antes de que tu llegaras - lo mire a él y una lagrima corrió por mi mejilla.

- Realmente lo siento, yo no sabía... -

- No te preocupes - susurre - no tenias por que saber - seguí mirándolo - tal vez yo no era tan importante para él -

- No digas eso - me abrazo - él estaba borracho y... -

- No es escusa - me fui de la habitación.

Salí afuera del sanatorio y grite como nunca antes lo había echo, esto era todo para mi, era mi final.

FIN FLASH BACK.

- Ella me lo ha dicho Jungkook, me lo a contando todo, yo.... solo te deseo que seas muy feliz, se que será un hermoso bebe - le dije aun conteniendo las lágrimas, no quería que me escuchara llorar.

- Feliz una miarda Jimin - grito - no voy a ser feliz una miarda si tu no estas conmigo - lloro.

- Jungkook... - no aguante más y llore - ya no tiene sentido que sigamos con esto, ¿cuantas veces hemos pasado por esto? Dime -

- No lo se y no me importa, yo te amo - sonó melancólico y desesperado.

- Kooki, debes hacer lo correcto y criar a ese niño junto con su madre -

De pronto la llamada se corto, me quedé viendo el celular intentando entender la situación. ¿Por qué se empeñaba en resolver las situaciones si después todo volvía a salir mal? Ya no sabía como manejar todo esto, quería volver a aquel día en que hize esa maldita apuesta para poder decir que no, que no quería hablarle, que no quería verle, que no quería besarle, que no quería amarle.

Narra Jungkook

Jimin insistía en alejarse de mi, aveces he llegado a pensar que él no me ama y tal vez deba dejarlo ir, pero no puedo, lo amo demasiado y no se de que manera arreglar mis errores.
Como pude me levante de la silla y camine hasta la entrada de la gran casa.

- A donde vas? - me pregunto mi padre.

- Iré a buscar al amor de mi vida y nada podrá determe - me sostuve de la pared por que casi no podía caminar, los nervios me debilitaron.

- Y como harás? Dime - dije mi padre cruzado de brazos.

- Me llevarías a casa de Jimin? Por favor - supliqué y el sonrió.

Llegamos unos minutos después, mi padre me ayudó a bajarme y como pude subí las escaleras, de pronto me sentía tan débil, golpee la puerta al menos cincuenta veces hasta que me abrió.

- Con que golpearas una vez era suficiente - dijo Jimin bastante serio.

- Lo lamento - sonreí - pensé que no me abrirías -

- Te lo encargo Jimin - grito mi padre desde el auto.

- No se preocupe señor yo lo cuido - dijo Jimin sonriente.

- No soy un bebe - susurre.

- Anda vamos adentro - me tomo del brazo y me ayudo a entrar.

Nos sentamos en el sillón de la sala, no sabía si arrancar de una con el tema o roper el hielo con otra cosa asi que decidí sacar conversación.

- Por qué no estas en la universidad? - pregunté, él jugaba con sus dedos a mi lado.

- Mi horario ya termino, dejé la residencia y estoy viajando, me compré un auto y todo - sonrió.

- Enserió? - sonreí entusiasmado - felicidades, pero debes tener cuidado no quieres terminar como yo - él dejo de sonreír.

- Yo... - removió su cabello - no hablemos de eso por favor - volvió a mirar sus dedos.

- Debemos Jimin, debemos hablar, aclarar todo de una buena vez - me acerque a él.

- Que se supone que debemos hacer? Yo ya no puedo con esto... Necesito que empieces a respetarme - me miro molesto.

- Tienes toda la razón - asentí - Yo te prometo que esta será la última vez, que te voy a cuidar y respetar y amar y y y - me detuve a ver su expresión, sonreía como un niño - Que dije gracioso? -

- Es que - río - siempre dices lo mismo Kooki y siempre pasa lo mismo, nada cambia - negó con la cabeza.

Me aparte de él y me recosté en sillón mirando al techo, tenía razón, ya había perdido la cuenta de cuantas veces le he pedido perdón a Jimin y cuantas veces le he fallado.
Él se recostó a mí lado y apoyo su cabeza en mi hombro - de todas formas te amo y volvería contigo millones de veces más - me dijo sonriendo y abrazándome. Lo mire incrédulo y sonreí - realmente somos un caso -