-¡Cómo! -dice Zoe perpleja, con la boca abierta.
-Como te lo digo.
-Mira, no me tomes el pelo. ¿Cómo va a seguirte Niall Horan? Osea, es NIALL HORAN.
-No te tomo el pelo, todo lo contrario. Yo tampoco me lo creo, es que... Dios no sé.
-¿No te lo habrás imaginado? -dijo ella preocupada. Entonces, sonó mi móvil. Lo cogí de la parte trasera de mi bolsillo. Era un número no registrado.
-¿Si? -respondí bajo la mirada de Zoe.
-Em, hola. -Dijo una voz peculiar, que reconocí al instante. Tragué saliva nerviosa, miré a Zoe y ella me devolvió la mirada.
-Ni-n-Niall -saludé torpe. -¿Qué ocurre?
-Quería llamarte para que ya tuvieras mi número. Por cierto, ¿mañana harás algo después de clase? -pregunta entusiasmado. Mientras, Zoe me mira boquiabierta.
-N-no -tartamudeo nerviosa.
-Pues si no te parece mal puedo recogerte a la salida y comemos en algún lugar. Solo si tu quieres, claro.
-Claro que si -respondí enseguida-¿dónde será?
-Sorpresa -dice pícaro -ahora marcho, que tengo que ensayar con los chicos.
Asiento y me despido de él. Cuelgo y miro el móvil perpleja. Si, Niall me había llamado al móvil y no era un sueño. No me lo podía creer, y Zoe menos. Que empezó a dar vueltas como loca por el salón, gritando. Como una fan en un concierto para llamar la atención de los cantantes, pero sin el concierto.
Narra Niall.
Colgué y sonreí involuntariamente. Que nerviosa la ponía, seguramente ahora tendría las mejillas sonrojadas. Era guapa en casi todos los sentidos, excepto en el cuerpo. Creo que le vendría bien engordar un poco. Pero la verdad, tenía ganas de saber bien como era en cuanto a personalidad.
-Niall, venga que tenemos trabajo -me saca de mi nube Louis, lo miro sin quitar la sonrisa -eh bro, ¿qué te ocurre? -dijo también sonriendo.
-Nada Lou -respondí.
-Eso no se lo cree nadie -se incorpora Liam. Ambos me miran pícaros -¿A quién fuiste a buscar hoy al medio día?
-¿Me espiáis? -reí- a nadie bobos.
-¿Seguro? Esa sonrisa no la crea el viento -insistió Louis. Yo negué con la cabeza aún feliz y me fui a trabajar y ellos me siguieron.
Me esperaba una tarde prometedora mañana, que ganas tenía.
Continuará...