Han pasado un par de días desde la ultima vez que vi a Chloe, tengo la cabeza tan hecha mierda que no he querido verla, me llama todos los días y me ha dejado como veinte mensajes que no he respondido.
Ahora mismo estoy en la sala de un hospital, esperando a conocer a ALLIE, estoy tan perdido que no sé qué estoy haciendo solo que necesita de mi ayuda. Lauren me hace una seña para que pase al fin, el corazón me acelera a mil por horas ¿es una trampa?¿será realmente mía?, le dí el beneficio de la duda.
Entro en la habitación y me quedo inmóvil cerca de la puerta, Lauren la tiene en sus brazos, la luz del sol las ilumina, la pequeña me mira sin saber quien demonios soy yo.
- Dile hola amor - Le dice su mamá como si la niña entendiera o pudiera hablar.
Me acerco despacio para sentarme a su lado, ahora sí tengo sentimientos encontrados, tal como lo dijo; es hermosa, y tiene los bellos ojos de su madre que alguna vez me enamoraron.
- ¿Quieres sostenerla? - me pregunta Lauren tomándome por sorpresa.
- Ahm no quiero lastimarla - trato de evadir la invitación
- De ninguna manera - me la entrega, realmente no sé ni cómo agarrar una bebé y mucho menos una que está enferma, nunca en mi puta vida sostuve un cuerpo tan pequeño, excepto aquella vez que tuve sexo con una bailarina de ballet pero eso es otro cuento.
La nena inmediatamente se incomoda retorciéndose porque la tengo levantada en el aire alejada de mi pecho, tengo miedo de romperla, es tan frágil.
- Es increíble que no sepas hacerlo, ya sé tu punto débil, ¡BEBES!- se burla de mí.
- No es igual que agarrar una chica
- Definitivamente no - continúa riendo.
- Es igual a ti - le digo.
- ¡Gracias a Dios!, aunque a veces me recuerda a ti especialmente cuando sonríe.
- ¿Quien la cuida cuando trabajas? - la interrogo temiendo desde ahora por el cuidado de la niña.
- Las enfermeras cuidan de ella en las noches, y yo la veo de día. Es complicado pero lo estamos logrando, ella está luchando, te juro que es la bebé más valiente del mundo.
En ese momento suena mi celular, es Chloe por milésima vez, cuelgo y vuelvo a lo que estaba.
- ¿Quien es?, Puedes contestar, no hay problema - me dice curiosa.
- No es nadie, luego devuelvo la llamada - le resto importancia.
- Alex estoy segura que tu vida a continuado perfectamente, pero ahora ya conociste a Allie, no sé si eso cambia en algo, solo piénsalo, no te pido que dejes nada, ya sabes lo que quiero y te darás cuenta que esto es más fuerte que cualquier otra cosa.
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Y así transcurre la tarde, estuvimos hablando en aquella habitación de hospital, cada hora entraba una enfermera para verificar que todo anduviera bien. Para cuando anocheció tuve que despedirme, Lauren se quedaría con ella.
