Capítulo 5:

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Regina

Al bajar nos encontramos con el padre de Emma, y a la cual parecía ser su madre y aún desconocía el nombre.

-Hola pequeña.- sonrió la mujer besando la mejilla de Emma.

-Hola mamá.- le devolvió la sonrisa mientras la saludaba. Me tomó de la cintura para acercarme a ella y a sus padres.- Ella es Regina Mills, mi novia.- me observó a mí y luego a su madre.

-Oh, es un placer conocerte Regina.- me sonrió besando mi mejilla.

-El placer es mío.

-Hola regina.- me saludo David, el padre de Emma antes de besar mi mano.- Hola hija.

-Hola papá.

La cena no estaba lista aún así que nos sentamos en el comedor con los padres de Emma. Estábamos sentados en los sillones, Emma y yo en uno y frente a nosotras sus padres.

-¿Así que tienes 20 años?.- dijo la madre de Emma. Asentí.

-¿Y qué piensas estudiar?.- agregó el padre de Emma. Bien ahora no sabía que responder.

Le he dicho que por ahora no se preocupe en que va a estudiar. ¿Verdad cariño?

-Si.- sonreí ¿Cómo se las arreglaba para inventar cosas tan rápido?

-Y aún que insiste en ser abogada... - continuó. Las miradas de admiración hacia mi iban en aumento.- yo no la he dejado, pienso que no es necesario si yo puedo trabajar. Además cuando nos casemos y vengan los niños quiero que Gina esté con ellos mientras yo trabajo.

-Bueno forma de pensar hija.- la apoyó su madre.

-La cena está servida.- nos interrumpió una chica. la cual también desconocía. Seguro que era una de las nuevas a las que Emma había contratado esta tarde.

Los cuatro nos levantamos de los sillones y comenzamos a caminar hacia el comedor.

-Emma...- le susurré antes de entrar al comedor.-¿Cómo se llama tu madre?

-Se llama Mary Margaret.- me dió un pequeño empujón para que caminara.

La cena transcurrió con tranquilidad. Emma y David hablaban de negocios, Mary y yo nos limitabamos a escuchar ya que ninguna de las dos entendíamos a que se referían.

-Y bueno...- dijo la morena de cabello corto cambiando de tema.-¿Que tienen pensado para la boda?

¿La boda?-pensé en mi interior.- Yo no pienso casarme y menos con Emma.

-Aun nada, pero lo vamos a hablar con más tranquilidad.- respondió Emma- Lo que pasa es que últimamente tengo mucho trabajo y casi no estamos juntas, pero ya vamos a comenzar a planear la.- me dió una pequeña patada por debajo de la mesa. Yo solo sonreía fingidamente.

-Oh... pero tienen que conseguir un lugar bonito para la ceremonia.- me sonrió.-¿No crees Regina? Yo estaba pensando en que podemos adornar con flores blancas.

-Sí, es una muy buena idea.- me limité a decir antes de que les arruinara la fantasía a estos dos.

-Con Gina habíamos hablado de hacer una celebración aquí en el jardín de la casa, es bastante grande y si se decora bien puede quedar muy bonito.- Agrego Emma.

-Me gusta la idea.- Contestó David.

Y el resto de la cena y el postre se pusieron a hablar de nuestro casamiento y ja ja yo no me casaré con esa psicópata que solo sabe hablarme mal

Los padres de Emma se fueron cerca de la media noche dejándonos solas con las nuevas empleadas.

-Bien, todo salió perfecto.- dijo luego de cerrar la puerta con pestillo.

-Ahora me explicas todo esto.- me paré frente a ella colocando mis manos en mis caderas.- Yo no me casaré contigo así que no planees mucho Swan.

-Te hago una pregunta- dijo ignorando mis palabras.-¿Yo te dije sobre alguna boda?

-¿Qué?- dije sin entender.- Responde a lo que te he dicho.- dije casi gritando.

-Mira Regina es así de simple, quieras o no te casarás conmigo.

-Pues, no quiero y no lo haré porque no eres nadie para decirme que debo hacer y que no.- le grité. Dos empleadas se asomaron desde la cocina para observar.

-¿Cariño?- dijo dándose cuenta de que nos miraban.- ¿Podemos seguir la conversación en la habitación?- me agarró de la cintura.

-Emma, es en serio.- susurré mientras subíamos.- No me casaré contigo y...- me interrumpió.

-Ya cállate.- dijo de mala gana pero sin levantar el tono de voz.- Sube hasta mi habitación

Entramos a su habitación y cerró la puerta con llave.

-Sientate ahí.- me señaló su cama. Obedecí.- Mira es simple, nos casamos en un mes.

-¿Qué?- dije en un intento de grito pero pareció más una queja. -No.

-Sí- se sentó a mi lado.- Es que en serio tengo que casarme ¿Para que crees que te compre si no? Es por trabajo y aunque seas menor puedes hacerlo, yo soy tu tutora y yo firmo el permiso.

-No puedes casarme en contra de mi voluntad.

-¿Qué te hace pensar eso?- pregunto con malicia.- Regina, soy Emma Swan.

-Oh por favor, eres toda una creída.- dije agachando la mirada.- En serio no quiero casarme contigo. ¿Es que acaso no importa lo que yo piense?

-¿Sinceramente? No, no  mucho- dijo con burla.

-Ahhh dios, no quiero casarme contigo ya demasiado tengo
con la muerte de mi padre, que me subasten y que justo me toque vivir contigo. No seas así de mala emma.- las lágrimas querían salir.- ¿Acaso no tienes sentimientos?

-Regina.- dijo fríamente- todo el mundo tiene sentimientos y no creas que yo no los tengo porque soy una de las personas que más sufre en el mundo.

-¿Y por eso me haces sufrir a mí también?- dije acercándome a ella.- No me casaré contigo- articule las palabras para que entendiera mejor.

-Si lo harás.- se levantó de la cama.

-Puedo ser tu hija si quieres, puedo ser tu criada si prefieres pero no me obligues a casarme contigo.

-Perdona pero ya lo estoy haciendo. Estás cordialmente invitada a nuestra boda cariño- dijo con burla.

La Bella & la Bestia [SQ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora