Capítulo 19

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Regina abrió sus ojos lo más que pudo y volteó a ver la puerta. Emma estaba ahí parada, se había quedado asombrada al verla. Regina no iba a dejar de mirarla y al perecer ella tampoco dejaría de mirarla. El rostro de Emma no portaba gesto alguno y el de Regina de seguro era un espanto. La morena entrelazo sus dedos intentando darse seguridad para hablar.

-¿Dónde estabas?-dijo temblorosa. Emma entró del todo a la habitación y cerró la puerta detrás de ella.

-No tengo porque darte explicaciones.

-Si tienes porque.-le reprochó. Emma pasó por su lado dirigiéndose a la cama. Tenía olor a alcohol.- Emma.-la llamó haciendo que volteara a verla.

-No tengo que darte explicaciones a ti.-le dijo la rubia seriamente.

-Si que tienes, y las quiero ya.  

-Mira...-Emma la tomó por las muñecas.- primero que nada, tú tienes que darme explicaciones a mí y segundo, NO TE METAS EN MI VIDA.-gritó la ultima frase y la soltó bruscamente. Regina respiró hondo intentando calmar su miedo.

-Emma...-dijo cuando ya no la miraba.

-No quiero que me digas cosas que ya se.

-¿Cosas como que?

-Y tampoco quiero que me confundas.-le dijo. Regresó su mirada al rostro de Regina.- Quiero que me expliques.  

-¿Estuviste tomando?-preguntó Regina ignorando lo anterior.

-¡Eso no viene al caso!-dijo exaltada.- ¿Y que si estuve?-dijo enojada.

-A ver Emma...-dijo sentándose en el sillón. Se había mareado.- Hablemos como se debe, sin gritos, sin golpes, como dos personas normales.-Emma se sentó a su lado pero mas alejado del cuerpo de Regina.- ¿Dónde estabas?

-Eso no importa.

-Si importa.-contestó secamente. La sentió reír con ironía.

-Entonces te importa. ¿Cierto? Pero no te importa calentarme y luego dejarme sola en la cama. ¿Verdad?- Emma estaba completamente furiosa y se notaba en su mirada y voz.  

-No fue así.

-Espera... déjame continuar, aun no acabo.- Emma apoyó sus codos sobre sus rodillas y se pasó las manos por el cabello alborotándolo. Volvió a sentarse derecha y miró a Regina.- ¿Por qué lo hiciste?-le dijo.- Pensé que habíamos terminado con las venganzas.

-Y no era una venganza.-se defendió Regina.

-¿Entonces por que lo hiciste?-le dijo.

-Tú empezaste.-volvió a defenderse.

-Pero tú no me detuviste.-agregó. Posó su mirada sobre los ojos oscuros.- ¿Por qué llorabas?

-Yo te pregunté algo antes.-dijo Regina intentando no responderle.

-¿Qué quieres que te responda?-le dijo histéricamente.- ¿Quieres saber si tome?-le gritó. Regina asintió temerosamente.- Si, si tomé, y puede que en este momento este algo mareada pero soy consciente de lo que me hiciste, o mejor dicho con lo que me dejaste con ganas de hacer.

-Emma no hace falta que me grites.  

-¿Qué no?-dijo Emma elevando la voz.

-Estamos en un hotel.-le gritó.- No vuelvas a elevar la voz o nos sacaran a patadas de aquí.-agregó en un tono más calmo.

-No me interesa. Es más, nos vamos de aquí.-se levantó del sillón. Volteó a ver a Regina.- Levántate del maldito sillón y arma tus maletas.

-Emma...

-Regina, tu y tus repetidos "Emma" todo el tiempo me están hartando. Levántate dije.-gritó. Regina se levantó del sillón y quedó frente a frente con Emma.- Ve y arma tus maletas ya.-gritó.

-Pídelo bien.-le dijo Regina sabiendo que en cualquier momento iba a golpearla.

-Okey, ¿Sabes que te la estas buscando?

-¿Qué cosa?-preguntó mientras tragaba saliva ruidosamente.

-No me hagas perder tiempo y arma tus valijas.-volvió a gritarle.

-No Emma.

-¿Qué dijiste?

-Dije...-respiró hondo y habló.- No Emma.

-Tu te la buscaste.-dijo Emma levantando la mano. Pero antes de que pudiera accionar fue Regina quien le dio una cachetada en la mejilla. Se movió de su lado y cuando el volteó a verla, Regina corrió y se encerró en el baño.- Ya me abres.-dijo golpeando la puerta con fuerza.

La Bella & la Bestia [SQ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora