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Mientras tanto, más allá de los confines del espacio y del tiempo, en el reino de Asgard, se encontraba cierto príncipe reinsertado se hallaba en el balcón más alto del palacio reflexionando sobre sus sentimientos a cerca de cierta muchacha "midgardiana" que le traía por la calle de la amargura por no saber si estaba bien o qué había sido de ella, hasta que cierto dios del trueno irrumpió en el lugar intentando sorprenderlo por la retaguardia.

- ¿Qué te trae aquí, hermano?- preguntó un tanto molesto

- Venga hermanito , no te pongas así conmigo ya ha pasado mucho tiempo desde que te traje de vuelta de la Tierra- dijo Thor intentando raspar las duras palabras de su hermano

- Te he hecho una pregunta- dijo un poco más tranquilo

- Es nuestro padre- contestó el rubio

-Tu padre, querrás decir- reprochó el menor

-Vamos Loki, no me digas que aún sigues con eso...- dijo Thor

-¿Qué quiere esta vez?- preguntó un tanto intrigado

-Te reclama en la sala del trono- contestó el primogénito

- Pues no hagamos esperar al Padre de Todos , vamos- contestó guasón mientras salía al encuentro

Instantes después, una vez dentro de aquella sala, en presencia del padre de todos y de su madre, el dios del engaño se vió capaz de formular su pregunta para dar comienzo a la cita.

- ¿Para qué me habéis hecho llamar, oh padre de todos?- interrogó el dios del engaño

- Hijo mío, no sé a qué viene ese tono cuando hasta tú sabes la respuesta- dijo el padre de todos observando a su protegido desde el trono con gran sabiduría

- Pues entonces de gran gozo tiene que ser dicha cuestión porque yo no sé de qué me estás hablando- dijo Loki un tanto confundido

- Te hemos hecho llamar para concretar tu compromiso- irrumpió Frigga la madre de nuestros dos asgardianos

-¿Compromiso?- cuestionó el moreno aún más sorprendido

- Así es, desde que te trajimos aquí, concertamos una unión entre los Griegos y nuestro pueblo, te casarás con la hija del dios Zeus- afirmó firmemente Odín

-Me parece que no va a ser así - dijo el dios del engaño declinando la orden del padre de todos

-¿Seguro?- interrogó Frigga , a lo que Loki asintió con gran pesar- Me parece que la reconocerás nada más verla...- insinuó la reina

- Está bien, haremos un trato....- dijo el moreno tras pensar las palabras de su madre

- Te escucho- contestó el padre de todos, centrando toda su atención sobre su hijo

- Es cierto que antes de la boda y de confirmar los festejos hay unos días de margen para ara que los prometidos se conozcan ¿no?- ambos progenitores asintieron al unísono- Bueno, si es cierto que reconozco a mi prometidas en ese baile, aceptaré de buena gana esta unión pero si no, por nada del mundo- dijo el dios del engaño- ¿Qué? ¿Hay trato?

- Este pacto queda sellado- contestó Odín cerrando el pacto con su lanza- ya te haré llegar más noticias sobre tu prometida. Puedes retirarte

Y tras esas palabras Loki salió con paso firme de vuelta a su balcón, reflexionando con grandes esperanzas en su misteriosa prometida, esperando que esa muchacha fuese aquella joven nadie más que él, la Luna y el Sol sabían de quien se trataba, o eso creía...

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