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Una vez en mi cuarto, me dejé vencer por las primeras lágrimas que consiguieron traspasar mis mejillas, derrumbándome por completo, a la vez que me dejaba caer sobre mi cama; en ese momento no quería ver a nadie a menos que fuera mi tío Hades para irme con él antes de irme con mis padres y mi hermana.

Pero cómo  de costumbre, mis tías; las Parcas; al igual que el destino nunca cambiarán de ser, pues ambos son igual de caprichosos, ya que quiso que, momentos después, llamasen a la puerta.
Y por la cortesía de no hacer esperar, me apresuré a abrir la puerta al mismo tiempo que me recomponía lo mejor que pude, descubriendo que quien llamaba a mi puerta era mi tía más joven, Afrodita, quien me dió un primo que me otorgó la peor de las maldiciones.

-¿Estás bien?- preguntó mi tía consideradamente

- No- contesté volviendo a romper en llanto

-Sé lo que ha hecho mi hijo y lo siento mucho...- dijo intentando disculparse-Si hay algo que pueda hacer por ti...

-A menos que tengas un veneno que vuelva mi rostro pálido, mi sangre de hielo y mi corazón de piedra, lo dudo- contesté entre sollozos

-Eso no puedo hacerlo, ya sabes que eres hija de los dioses y por tanto eres inmortal- dijo apenada

-Entonces llévame con Medusa y haz que me petrifique el corazón, para que así tu hijo Eros no juegue en más conmigo- dije suplicando mi imposible muerte

- La verdad es que no fue mi hijo quien fue voluntariamente a jugar con tu corazón- dijo apartando la mirada

-¿Cómo?- interrogé exaltada

-Cuando Loki y tú convivisteis en la misma celda, yo le ordené a mi hijo que de forma "natural", cayeseis uno en los brazos del otro- confesó finalmente dejándome perpleja ante tales hechos- Fue por eso por lo que caístes enferma

-Pero...¿Cómo sabes lo de mis días en cama? Si mis padres no han sabido nada de mi hasta que llegé- dije entrando en un profundo desconcierto

-Acompáñame- dijo saliendo de mi habitación

Y yo como siempre, sin perder ni un minuto, fui tras ella hasta llegar a un pequeño estanque situado a la vera de un olivo.

-¿Qué es esto?- pregunté

-Es mi lugar secreto- contestó-Aquí es donde yo vigilo a los enamorados y a las parejas potencialmente funciónales, y es desde aquí donde envié a mi hijo a que os uniese a Loki y a ti- relató

-¿Y? ¿Qué tiene eso que ver con nosotros? Eso solo explica cómo tú supiste con antelación de mi existencia- dije un tanto extrañada

-Pues que normalmente, cuando mi pequeño hace bien su trabajo, salta una pequeña e imperceptible chispa entre los enamorados, pero cuando os disparó a ti y a Loki, no surgió nada- continuó relatando

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