19

54 9 0
                                    

- ( T / N ) has vuelto! - exclamó ahora una voz femenina, procedente de la nube, la cual se materializó al instante en forma de mujer- Pero mirate, como has crecido...- dijo con cierta melancolía

- ¿ Hera? - pregunté - ¿ Tú eres..?- pregunté perpleja

- ¿ Tu madre?Por supuesto - contestó

- Entonces es verdad que Zeus es mi...- dije intentando asimilar la información

-Pues claro, ¿ a caso no nos recuerdas? - negué con la cabeza - No me extraña, la última vez que te vimos, eras tan sólo un bebé

-¡Oh, madre! - exclamé propinandole un gran abrazo

- ¡Hija mía! - exclamó correspondiendo al abrazo

- ¿ Dónde está mi amada hija? - preguntó mi padre apareciendo por detrás de una de las columnas uniéndose al tierno momento familiar,iniciando así una gran  ovación- Ven, tenemos mucho que contarte - dijo acompañandonos a mí y a mi madre hacia otro paraje un poco más alejado y más bonito que el anterior

-¿Cómo es eso de que la última vez que nos vimos era cuando yo solamente era un bebé? - pregunté una vez alejados de la multitud, recordando lo que mi madre había dicho anteriormente

-De eso era de lo te queríamos hablar...- dijo Hera con gran pesar-  Verás, cuando te tuvimos a ti, fue como la llegada de una bendición, como una señal de que todavía nos quedaba esperanzas

- ¿ Por? - pregunté intrigada

- Porque, a pesar de que tú nacimiento fuera un regalo- dijo mi padre acariciando mi mejilla - no fue en el mejor momento- me quedé extrañada

- No te lo tomes a mal cariño- intervino madre- Pero es que para entonces, tanto tus tíos como nosotros, nos encontrábamos sumergidos en una guerra contra los titanes

- Y por miedo a que alguno de esos mal nacidos se atreviera a atentar contra tu vida, decidimos abandonarte en la Tierra- continuó padre-, y les pedimos a las Parcas que te llevasen más allá de los confines de nuestro tiempo

-Ahora entiendo lo que hicisteis y con qué propósito,  pero...¿Nunca se os ocurrió hacerme alguna señal, mandarme a Hermes con un mensaje,  o algo? -dije un tanto exacerbada

-Teníamos miedo, después de la guerra, todavía había algunos titanes sueltos, escondidos por el mundo, no podíamos arriesgarnos- contestó madre

- Pero ahora estás aquí y eso es lo que importa- dijo padre levantándo el ánimo- Ven tenemos que presentarte a todo el mundo, aunque viendo que la guerra contra los titanes no te ha sorprendido mucho, creo que vas ha poder reconocer a todos tus parientes.

Y así fue como me dieron la bienvenida a mi hogar, con la ayuda de Baco, conseguimos hacer una gran fiesta familiar en la que por si las moscas, me fueron presentando a todos y a cada uno de mis tíos, hermanos y primos.

ContracorrienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora