Él no necesita presentación, cuando lo veas, sabrás cómo llamarlo.
Harry Styles, conocido como, Daddy.
Advertencia: Contenido explícito, lees bajo tu propia responsabilidad. Está prohibido crear su copia total o parcial y/o archivar la historia en c...
Cuando mis labios abandonan los suyos, la confusión comienza a teñir sus facciones, pero a la vez se le ve ansiosa, de tenerme de esta manera tan prohibida.
"No creo...yo no..." Niego con la cabeza, y ella guarda silencio al instante.
"¿Que sea correcto?" Completo a lo que iba a decir y ella agacha su mirada. Una corta risa se escapa de mis labios, mi mano viaja hasta su mentón y la obligo a mirarme. "¿A caso no se siente correcto?" Su cuerpo reacciona al instante en que mi mano se posa en su cintura. "No trates de ocultar la realidad, ángel. Tú me deseas".
Su respiración comienza a mezclarse con la mía, es ahí cuando la siento estremecerse. Su pecho sube y baja, casi como si estuviese...excitada.
"No tienes idea de cuánto he deseado tocarte con frenesí, sentir tu cuerpo colapsar sobre el mío, escucharte, rogando por más". Sus labios se entreabren cuando mis caderas chocan contra las de ella, es entonces que la escucho soltar un gemido frustrado.
Mierda.
Ambas de mis manos toman de su culo y la alzo en el aire hasta tenerla en mis caderas, con sus piernas alrededor de mí.
Sus brazos se enredan en mi cuello y sin esperar más, la beso con fuerza, empujando nuestros cuerpos contra el grueso material de la pared.
Doy vuelta en mi propio eje, con ella en mis brazos, y camino hacia la cama de la habitación. La recuesto sobre la seda que cubre el gran colchón, observando la inocencia pura yaciendo frente a mí, con los labios hinchados y su respiración ridículamente alterada.
Mi mentón se levanta y una sonrisa lobuna se dibuja en la curva de mis labios. Dejo caer el saco que traía puesto y comienzo a deshacerme de los botones de mi camisa, sus ojos caen sobre mi piel ahora desnuda, y no evito soltar una risa.
"¿Te gusta lo que ves, nena?" Camino hacia ella, colocándome encima, al instante sus piernas me dan paso a su cercanía, y sin esperar a que me conteste comienzo a besarla. Comienzo a acariciar su cuerpo por encima de la delgada tela de su vestido. Jadea sobre mis labios y aquello comienza a ponerme.
"H-Harry" Dice en un gemido entre cortado. "Por favor...". Sus ojos finalmente se abren y me mira.
"Siente esto, pequeña". Comienzo a mover mis caderas sobre ella. "Siente lo que has causado". Sus dientes atrapan su labio inferior, intentando reprimir un sonido gutural.
Sin cesar el vaivén de mis caderas sobre las de ella, dirijo mi mano hasta mis labios, y humedezco la punta de mis dedos, ella, por otra parte, mira mis movimientos con suma atención, es entonces que mi tacto llega a su sexo y un gemido lleno de excitación y frustración llega a mí.
"Dime, ¿cómo se siente eso, babydoll?"
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
