MIA Y YO (TERMINADA)¡ PRONTO EN LIBRERÍAS!

8 DIAS SIN NOTICIAS DE GABRIEL

Ocho días sin noticias de Gabriel

Una semana y un día sin saber de él, era toda una agonía. No podía sacarlo de mi cabeza, quería estar con él. Quería hablar todo el tiempo con él, pero hacía exactamente 8 días no respondía mi último mail, así que le mande otro.

De: Agustina Enviado: 3/10/2017 5:01 p.m. Para: Gabriel Asunto: Re: la chica con oxígeno de Omegle.

Querido Gabriel: No pude evitar notar que hace 8 días te envié mi último mensaje, y aún no contestas. Si te estoy moles

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tando, tan solo decímelo y dejo de escribirte, sé que muchas veces estas ocupado, pero sé también identificar cuando quieren ignorarme. Si quieres solo dime y dejo de escribirte, mi intención no es molestarte. PD: ESPERO TE ENCUENTRES BIEN. ———————————————

No podía evitar sentirme impotente y frustrada con todo esto. Mis amigos me hacían a un lado y la única persona con la que hablaba comenzaba a ignorarme, mis refugios eran Mía, mis libros, escribir y la música. Ellos no traicionan, no se van. Son de fierro, te acompañan toda la vida. Tal vez había espantado a Gabriel con mi confesión de amor. Digo, ¿por qué un chico como él querría fijarse en mí? Seguro tenía novia, o estaba saliendo con alguien, o no le interesaba lo que yo le decía, pero era demasiado amable para decírmelo, se habrá dado cuenta que soy tan frágil y no quería terminar de derrumbarme. –Tranquila Agus, –me decía Mía para consolarme–, ya va a responder, a lo mejor esta ocupado. – ¿Y si no quiere saber nada? – ¿Por qué siempre tan negativa? – No sé, creo que ya perdí la esperanza. –La esperanza es lo último que se pierde nena. –No sé Mía. Ya no sé qué pensar, creo que ya me derrumbé. –No seás tan dramática. –Dejame decirte que vos también lo sos. –Lo reconozco, pero vos amiga, no lo reconocés. –¿Mía? –¿Sí? –Hoy vamos al festival Guitarras del Mundo, ¿vas a ir?

Agustina Pringles Pardini | Mía y yo

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–No me gustan las orquestas. –¿Cómo sabés qué es un orquesta? –Porque tu prima Nerea toca en una orquesta, ¿es ella la que toca hoy, verdad? –Sí, es ella. ¿Venís o no? –No, yo paso. Te espero acá. –Ok, vuelvo tarde. – ¡Suerte! Mía no fue conmigo, se quedó en casa. El festival comenzó a las nueve y media de la noche en el auditorio Juan Victoria y Nerea fue la segunda en tocar con la orquesta. Era, de la primera fila, la segunda de izquierda a derecha. Interpretaron tres canciones y bajaron. Después tocaron dos viejos de los que no recuerdo su nombre. Pero descosían las guitarras, eran unos genios. Todo termino a las 23.56 de la noche. Llegué a mi casa a las 00:26. Cenamos, mamá y mi Guada se fueron a dormir. Yo me quedé viendo videos en YouTube y chateando con una amiga venezolana. Entré a Hotmail para ver si tenía respuesta alguna de Gabriel, nada. La bandeja de entrada seguía vacía, como mi corazón. Me fui a dormir con el oxígeno puesto y llorando como una idiota.