You're just a memory (2 temporada de I fell for you)

Never let you go

You’re just a memory 

Capítulo 15

‘Never let you go’

-Las princesas no lloran, Miley - me dijo él enderezándose y mirándome preocupado.

-No soy una princesa – negó con la cabeza.

-Para mí sí – sentenció y con una sonrisa, quité mis lagrimas y dejaron de caer, por suerte.

-Justin… quiero viajar – me tomó del rostro, posando sus dos manos a los costados de mi cara.

-¡Entonces viajaremos! – me robó un beso y lo miré aparentando enfado. Ay… es un rubio tonto; tendría que darse cuenta, que lo sigo amando por más de que diga que no.

Se separó de mí y se acordó de la pava que estaba hirviendo en la cocina… hizo dos té y fuimos a sentarnos en el sofá. No me había dado cuenta que la guitarra estaba arriba de una silla, casi escondida. Sonrió y se paró para tomarla; volvió a mi lado y se acomodó mejor.

-Kidrauhl – lo llamé. Frunció el ceño y podía leer sus pensamientos confundidos – Never say never la película – sonreí y lancé una carcajada. Él lo hizo también, y posicionó sus dedos en las cuerdas finas, gruesas y largas de la guitarra.

-They say that hate has been sent, so let loose the talk of love, before they outlaw the kiss, baby give me one last hug – oh… su voz es como… un ángel que se dedicaba a llamarme, o como una sirena; hechizante, clara, tranquila, hermosa, dulce y bella me envolvía y transportaba a un hermoso lugar… junto con la guitarra, que acompañaba a la perfección.

-Theres a dream, that i've been chasing, want so badly for it to be reality, and when you hold my hand. then i understand, that its meant to be – lo interrumpí y abrió sus ojos grandes. Nunca me oyó cantar… ni yo tampoco me escuché cantar a mi misma; sin embargo… mi voz, era la réplica perfecta de la de mi madre. Ya no era él solamente el que estaba sorprendido… yo también; esta no es mi voz, yo no soy así.

-¡Sigue! – gritó emocionado él. Sonreí y seguí cantando su hermosa canción: ‘Never let you go’

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Había pasado una semana… fue una gran y corta semana. Mi primo se había ido ayer y tan solo faltan tres días para noche buena, ya que hoy es veintiuno de Diciembre. Aunque duela, estas serán las navidades más solitarias de mi vida, ya que solo la pasaré sola, sin contar a Julew y Shena, por supuesto.

Mi panza cada día crecía más… ya casi tengo siete meses y no puedo creer, que en cualquier momento, lo tendré en mis brazos. Justin estuvo cada día conmigo y me prometió que iba a ser el padre del bebé, todavía sin saber que él es en realidad. No sé qué sucederá cuando lo vea… imaginarme a un niño, con el pelo dorado, ojos pardos como los míos y el fiel y hermoso retrato de él en miniatura, llevará muchas incógnitas de su parte que no sé si estoy conforme a responder. No quiero decirle… si le digo, estoy segura que se enojará y ya llevamos un lazo de amistad que no lo quiero desperdiciar por nada; además, tiene una carrera, ¿qué persona quisiera arruinarle ese esfuerzo gigante? Yo, como su “amiga” no lo quiero hacer ni está en mis planes.

Me encontraba mirando el televisor en mi habitación, acostada en mi cama gigante que me hacía sentir solitaria… recién eran las 1.35 pm y yo seguía en la cama, en pijamas y dormitada. La puerta se abrió lentamente y mis ojos no podían creer lo que veían.

Mi madre… era ella, ella entraba con una sonrisa a la habitación, hacia donde yo estaba. Inmediatamente, me senté en la cama y mis ojos se vieron obligados a derramar lágrimas. Dios. Esto no puede ser cierto. <<¿Estoy soñando?>> pero no… era ella, ella se sentó cerca de mí y tomó mi mano.

-No llores – mi sistema nervioso saltaba de mi cuerpo…esto es real, de verdad… no puede ser cierto – te amo hija – susurró mirando mis ojos cubiertos de lagrimas – Estoy orgullosa de ti – la imagen de Justin vino a mí, recordando cuando él me dijo que ella sí está feliz por mí. Negué con la cabeza.

-¿Mamá? – estaba shockeada. Mi mente daba vueltas y vueltas buscando la mínima respuesta de esto… no puede ser cierto. Estoy viendo un fantasma o ¿es un prototipo de mi mente? ¿Me estoy volviendo loca? Ella lanzó una carcajada.

-Princesa… soy real – aclaró y fue como que no dijo nada para mí, porque seguía con la idea que solo estoy soñando.

-Mamá no – mis palabras temblaban y aseguro que tenía mi vida pendiente de un diminuto hilo - ¿Quién eres? ¿Estoy loca? – por fin podía hablar. Esto era tan sobre natural que me asustaba .

-Miley... soy tu madre y no, no estás loca – respondió en orden con su típica voz tranquila, sonriendo con felicidad – serás una gran madre cariño – acarició mi mano con las suyas y despegó una de ellas, para posarla en mi estómago – tendrás una hermosa bebé… como el padre y como tú – sonreí inconscientemente mientras más lagrimas caían de mis ojos. Su mirada triste me envolvió – haces bien en no decirle que Justin es el papá – aclaró. No me salían las palabras justas para hablar.

-Oh mami – casi grité y me incliné para abrazarla, acariciando su espalda cubierta por un hermoso y largo vestido blanco – te amo también – apretujé en mis brazos mientras sentía dos lagrimas que caían en mi hombro… ella también lloraba.

-Hagas lo que hagas, nunca te rindas… se buena chica… dale una oportunidad a Justin, que de verdad te ama bebé. Él no se fue porque quería, se fue por su enfermedad – Mas lagrimas caían. ¿Justin enfermo? ¿Qué? No… no puede ser cierto. No Justin, mi amor, no… no por favor… no, que no sea cierto… que esto sea un sueño. Sin embargo, su voz era triste y suspiraba consternada por sus palabras… no puede pasarme esto… no.

-No, mamá, no… él no está enfermo, él me ama y no está enfermo – sollocé en gritos. No podía… esto es demasiado, él no merece esto, no. Acariciaba mi brazo con delicadeza, mientras yo seguía llorando. El amor de mi vida tiene una enfermedad y mi madre difunta está aquí… esto no puede ser real, tan solo es un sueño, ¡Que sea solo un simple e inútil sueño! ¡Él no puede tener una enfermedad!

Aclaración: la mamá de Miley, no vive, está muerta :B y Justin tiene una enfermedad {tumor en los pulmones} ¡No me maten! hudhsuih