❤Shinsou Hitoshi x lectora❤ ONE-SHOTS

{El celular}

Escenario: El celular de Shinsou.

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Estaba claro para la mayoría que Shinsou Hitoshi no era alguien que se abriera y expresara sus sentimientos ante otras personas, al menos no tan fácilmente. Pero ese no era el caso contigo.

Llevaban mucho tiempo de conocerse, y con el tiempo ambos empezaron a desarrollar sentimientos de algo que iba más allá de la amistad. No se hicieron rodeos, por lo que al descubrir lo que sentía el otro decidieron dar inicio a su relación. La cual hasta el día de hoy iba viento en popa. Ambos se tenían mucha confianza el uno al otro, y pensabas que él no te ocultaba ningún secreto. Pero había cierta cosa que te daba mucha curiosidad.

Su celular.

No importaba la circunstancia, Shinsou en ningún momento dejaba solo su celular. Y tampoco dejaba que nadie; ni siquiera tú, lo viera.

No era que quisieras invadir su espacio. Respetabas su privacidad, pero querías reafirmar tu autoridad como su novia de curiosear su teléfono de todos modos. Sólo debías encontrar el momento exacto en el que él bajara la guardia para tomarlo.

El día en que Shinsou te invitó a su casa decidiste que esa sería tu oportunidad para descubrir lo que ocultaba.

— ¡Hola amor! — saludaste con alegría en cuanto te abrió la puerta.

— ____, hola. — respondió a tu saludo mientras se hacía a un lado para dejarte pasar.

— ¿Pasa algo Shinsou? — lo miraste curiosa mientras te quitabas los zapatos en la entrada.

El chico acarició su cuello algo nervioso.

— No encuentro mi celular. — dijo. — No recuerdo dónde lo dejé. —

<<¡Este es el momento!>> pensaste.

— Entonces déjame que te ayude a buscarlo. — sonreíste para tratar de ocultar tus verdaderas intenciones.

Él pareció pensárselo un momento. En tu interior estabas rogando para que no se diera cuenta de tu plan, para tu fortuna él aceptó tu ayuda.

Empezaron a buscar cada uno en una sala diferente. Tú buscabas en la sala mientras que él lo hacía en su habitación. Llevabas un largo rato buscándolo sin éxito, estabas a punto de rendirte cuando se te prendió el foco y tuviste una brillante idea: llamar a su teléfono con el tuyo.

<<¿Cómo no lo pensé antes?>> pensabas con una sonrisa de vergüenza por ser algo despistada. Sacaste tu celular y marcaste el número de tu novio. Esperaste unos segundos hasta que empezaste a escuchar el tono de llama de su celular, el cual provenía del sofá.

Te acercaste al mueble luego de cortar la llamada y moviste los cojines para encontrarte con el dichoso aparato debajo de uno de ellos.

Lo tomaste y le sacudiste algo de polvo y migajas que tenía encima a la vez que sentías tu corazón latir un poco más rápido, como si fueras a cometer un crimen. Ibas a encenderlo justo en ese momento cuando Shinsou entró a la sala.

— ¿Lo encontraste? — fue lo primero que dijo al ver que tenías algo en las manos con forma de su celular, pero en cuanto vio que lo encendías su rostro cambió a uno de horror. — ¡No, espera no lo enciendas! — muy tarde.