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Para cuando llegó la hora de la cena Baekhyun había empeorado, su temperatura se había elevado a más de cuarenta grados mientras pequeños temblores sacudían su cuerpo y el aroma a caramelo se hacía más fuerte impregnandose en todo lo que estuviera a su alcance.

Los gemidos lastimeros que Baekhyun emitía provocaban que el omega de la señora Byun se alterará al escuchar sufrir a su cría.

Esto último era imperceptible para Kyungsoo pues su lobo aun no se había presentado haciéndolo fantasear con que no poseía uno pues tener la posibilidad de ser un alfa o un omega no le entusiasmaba en nada.

Baekhyun pasaba por los síntomas normales de un celo en su etapa mayor, la fiebre inundaba su cuerpo haciéndolo sentir sofocado y los temblores entumecían sus músculos haciendo doloroso el moverse sin mencionar que su lobo comenzaba a inquietarse, exigiendo la presencia de su alfa.

—¡Ve por nuestro alfa! ¡Necesitamos a nuestro alfa!—  Exigía el lobo mientras daba vueltas de un lado a otro y olisqueaba de vez en cuando.

—No h-hay ningún alfa— Murmuro Baekhyun hacia su lobo.

—Traeré un té para que ayude a relajarte— Hablo Kyungsoo quien se había encontrado todo este tiempo recostado junto a Baekhyun dando leves caricias a su espalda.

Al quedar completamente solo en la habitación el omega tomo la camisa azul entre sus manos y aún tambaleándose se las arregló para llegar al escritorio y acurrucarse sobre el sintiendo alivio en sus músculos al tocar la fría madera.

—¡Es nuestro alfa! Nuestro alfa viene por nosotros— Canturreo el lobo mientras movía la cola rápidamente de un lado a otro y movía sus patas inquieto.

—¡No hay ningún maldito alfa!— Baekhyun siseo molesto hacia su lobo mientras sentía el miedo invadirlo.

¿Que tal si algún alfa desconocido había sentido su olor y sabía que estaba en su celo y ahora se dirigía hacia el para marcarlo sin su consentimiento?

Baekhyun apretó fuerte sus ojos ante sus pensamientos y estrujó más la camisa contra su pecho sintiendo alivio automático. Segundos más tarde Kyungsoo entró con un sonoro suspiro y una taza con té de hierbas en las manos.

—De nuevo Baekhyun— Hablo mientras dejaba la taza sobre la mesita de noche colocada a un lado de la cama.

—Es cómodo...— Murmuro mientras gruñía y se apegaba más al mueble reusándose a bajar está vez.

—Esta bien. No voy a bajarte pero al menos bebe el té— Dijo Kyungsoo tomando de nuevo la taza y extendiéndola a Baekhyun quien se incorporó para tomarla, dejando ver con claridad su rostro.

Mientras Baek bebía el té, Kyungsoo, pudo ver cómo sus ojos eran ahora inundados de un amarillo brillante y pequeñas garras sobresalían de sus manos al igual que pequeños colmillos de sus encías. El lobo de Baekhyun estaba manifestándose pero sin tomar aún la conciencia de este.
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Al llegar la madrugada el celo de Baekhyun iba desapareciendo luego de cuatro días de malestares de los cuales su mejor amigo solo vio uno. Pudo sentir al fin como su cuerpo volvía a la normalidad llenándolo de alivio mientras yacía aún acurrucado sobre el escritorio viendo dormir profundamente a Kyungsoo.

Fue incapaz de bajar del escritorio y soltar la camisa azul aún cuando los primeros rayos del sol se colaron por la ventana y ningún malestar agobio su cuerpo, así que simplemente se quedó ahí escuchando los primeros ruidos de la mañana.













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Adivinen quien es el
alfa de Baekhyun. 🍃

Estúpido Alfa 🍃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora