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Kyungsoo despertó a la mañana siguiente sintiendo su cuerpo pesado y adolorido mientras el molesto sonido de la alarma invadía por completo la calma de la habitación. Se incorporó en la cama y lanzó una de sus almohadas al aparato provocando que cayera al suelo y cesará el ruido, sus ojos se enfocaron por unos largos minutos en el universo hecho zapato y su mente voló recordando leves fragmentos de su sueño. Acaso él....

—Soo, el despertador sonó hace cinco minutos...— La voz de su padre se escuchó desde el pasillo y Kyungsoo frunció el ceño pues, ¿Su padre estaba en casa?

Confundido a más no poder salió de la cama mientras se sacaba torpemente la ropa, sus pies se encaminaron al baño y veinte minutos después salió totalmente despierto y duchado sintiendo como su mente se llenaba de tantos pensamientos que un ligero dolor comenzaba molestarle cada que intentaba analizar el sueño que había tenido. Las primeras horas de la mañana prácticamente se le fueron en eso, se encontraba tan sumido en su razonamiento que no le fue capaz saber el momento exacto en que había llegado a la escuela.

—... básicamente eso es lo que me tiene dudando un poco.— Baekhyun terminó, lo que sea que había iniciado, dejando que la tristeza se apoderará por completo de su rostro.

—¿Que?— Inspeccionando su alrededor Kyungsoo noto que las paredes de su habitación habían cambiado por las de su aula de clase.

—Juro por mi... ¿Do Kyungsoo que ocurre contigo? Estoy aquí como estúpido contándote mi frustración amorosa mientras tú divagas por el espacio...— Baekhyun dijo más que molesto al tiempo que sus manos apretaban con fuerza el lápiz que sostenía.

—¿Frustración a-amorosa...? ¿De nuevo Sehun? ¿Estás molesto porque no te puse atención mientras te quejabas de que Sehun no te da ni la hora? Baek ya date cuenta por favor...— Kyungsoo se dejó caer cansado sobre la paleta de su pupitre, esperando que se desatará la tercera guerra mundial.

—Si pusieras atención, maldito enano, te darías cuenta de que el estúpido de Min YoonGi volvió de su aún más estúpido viaje a América provocando que mi muy, muy estúpido corazón casi estirará la pata por él ¡Jesús! Tu tienes que ver cómo volvió ese hombre.— Baekhyun se dejó caer también sobre la paleta de su pupitre conectando miradas con su mejor amigo, quien tenía el ceño completamente fruncido.

—¿Min YoonGi? ¿El gruñón que siempre se queda dormido en clase? ¿Min rabias YoonGi?

—Aja.. Min rabias YoonGi.

—Imposible...

Ambos amigos sonrieron burlonamente mientras sus manos se entrelazaban conectando el pequeño espacio que les separaba.

—¿Su cara cuando se enteró de que eres omega?— Kyungsoo rompió el silencio cómodo que se había formado.

—Era todo un poema digno de admirar...— Una leve risa abandono los labios del omega al recordar lo sucedido la noche anterior. —Llego a casa con sus padres a saludar y mi mamá los dejo pasar, entre una charla y otra se quedaron a cenar y cuando llegue del hospital ellos estaban ahí. Al inicio todo bien, todo perfecto ganando como siempre, me senté a la mesa inicie a comer...y de repente aparece él recién duchado, su piel se puso más pálida durante el viaje y hasta está más delgado pero le sienta bien, se ve muy bien y huele como el demonio, Kyungsoo mis rodillas se doblaron cuando lo vi....

—Estabas sentado, ¿Cómo supiste que se doblaron tus rodillas?— Kyungsoo interrumpió a Baekhyun cuando esté comenzó a babear, literalmente, sobre la paleta del pupitre.

—Lo se y punto, cuando él apareció mi mundo se puso patas arriba Kyungsoo, YoonGi todavía tiene ese poder sobre mi. Él aún me controla y me asusta un poco aunque también me enfurece pero... Sehun, Sehun llegó a mi mente cuando estaba a punto de besarlo, yo...

Estúpido Alfa 🍃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora