Julian me apretó más hacia él e introdujo su lengua en mi boca, empezamos una desenfrenada guerrilla de pasión combinada con las dulces caricias que él le hacía a mi espalda .Sin dudar ni un segundo más enterré mis dedos en su rubio cabello, sentí que Julian sonrió sobre mis labios y luego continuó con el beso .No iba a negarlo, me gusta Julian Serrano, pero no estaba enamorada como para vivir pensando en él, y más ahora de que sabe sobre mis cortes, porque eso era algo muy privado, única y exclusivamente de Jenny, Grace y yo.
- Chicos, aquí no –Escuchamos una voz.
Nos separamos inmediatamente al darnos cuenta de que era Juno, tanto mis mejillas como las de Julian tomaron color.
- Lo siento... –Dijimos al unísono con Julian.
- Tranquilos chicos, los entiendo –Nos regaló una sonrisa –Yo me encerraba con mi novio en el cuarto de limpieza a su edad –Nos guiñó un ojo.
- Pero nosotros no somos novios, no lo malentienda –Le dije desesperada.
- Tranquila Ori, no diré nada –Me guiñó nuevamente el ojo y se marchó.
- Estuvo cerca –Suspiró Julian.
- ¿Cerca? –Fruncí el ceño –Basta Julian, tenemos que parar esto –Me acomodé la remera.
- ¿Estás hablando enserio? –Preguntó sorprendido.
- De lo más serio Serrano –Lo miré –No soy una pu.ta –Empecé a caminar hacia la salida.
- Hey, hey –Me detuvo –Nunca dije que lo fueras Ori, eres increíble… y creo que me gustas –Sonrió.
- Julian –Acaricié su mejilla –Eres estupendo, y también me gustas…pero somos completamente diferentes –Miré mis zapatillas.
- Claro que no, tenemos muchas cosas en común –Me tomó de ambas manos.
- No me refiero a eso, me refiero a que soy muy problemática para ti .Somos total y completamente diferentes, y otra de las tantas razones es porque no me siento bien al besarte a espaldas de Sabrina –Le confesé.
- De acuerdo, pero que conste que terminarás siendo mi novia –Me besó cortamente en los labios.
- Imbécil –Le sonreí y me marché del lugar.
Caminé hasta el estacionamiento y desactivé la alarma inalámbrica del auto para ver en que lugar estaba, lo encontré y me subí .Minutos después me encontraba en el auto hablando con Jenny, acababa de aterrizar en Nueva Guinea, para luego hacer escalas en Korea del Sur y Japón, y así poder seguir hasta llegar a Estados Unidos y luego ir hasta New York.
- De acuerdo, me avisas cuando llegues –Le dije hablando por teléfono.
- Si, ya estamos por ir hacia Korea –Me dijo algo agitada.
- ¿Qué sucede? –Pregunté.
- Los aviones –Me confesó –Siempre vomito al volar –Me asusté al oír eso.
- ¿Enserio? –Pregunté.
- No te diría si no fuera en serio tonta –Me retó.
Escuche por allá un ‘Pasajeros del vuelo tanto por favor, vayan hasta la puerta tanto para su despegue’.
- Soy yo –Dijo y escuchaba como empezaba a caminar.
- ¿Cuántas maletas traes? –Pregunté.
- Cinco –Soltó una carcajada.
- ¿Vienes de visitas o vienes a vivir? –Me uní a su risa.
- Digamos que me quedo por un tiempo –Se me aceleró el corazón al escuchar eso.
- ¡¿Enserio?! –Mi emoción era obvia.
- Si, tengo que ver algunas cosas para la universidad –Pegué un grito al oír eso.
- ¡Me muero! –Dije contenta –Vendrás a la universidad aquí –Exclamé emocionada.
- Si es que entro –Jenny se oía algo preocupada.
- Hey, tranquila –Le dije –Ahora concentrémonos en el vuelo, cuando vengas hablaremos sobre el resto –Intenté sonar lo más tranquila posible para calmarla un poco.
- Tienes razón –Suspiró –Tengo que cortar, te quiero Ori -Sonreí.
- Y yo a ti colo, buen viaje –Corté.
Llegue a casa y abrí la puerta, casi me desmayo a ver a esa persona en el living charlando animadamente con Grace.