~Narrador protagonista.
Besé el pecho de Julian una última vez más antes de levantarme de la cama.
Eran las once en punto de la mañana, él estaba completamente dormido y yo sentía la urgencia de tomar una ducha .Me costó despegarme de él, ya que era realmente una preciosidad cuando estaba dormido, pero sentía que debía hacerlo.
Cerré la puerta del baño detrás de mí y luego me encontré con otra persona en el espejo.
¿Quién era esa chica?
Traía el pelo corto a la altura de los hombros, estaba desnuda, tenía marcas en toda la zona del cuello de chupones y mordidas, y su rostro estaba ligeramente teñido de un color carmesí.
¿Esa era yo? Demonios, me sentía diferente… No, lucía diferente .Me sentía linda, me veía linda…y por primera vez en mi vida no escuchaba voces. Se los juro, no había voces, era algo tan hermoso.
Me sentía como si hubiera crecido un par de años, me sentía grande, un poco más alta quizá… No lo sé, realmente no lo sé.
Lo único que tengo en claro es que me sentía diferente.
Abrí la llave del agua caliente y un poco de la fría para que el agua se templara, cerré la cortina una vez que entré y me metí bajo la lluvia artificial para comenzar a mojar mi cabello.
Me pasé las manos por el pelo y luego las deslicé por mi cuello hasta llegar a mis pechos .Podía recordar todo con detalle, podía sentir los besos de Julian en mi piel, podía oír sus gemidos. Dios… la mejor mañana de mi vida.
Y en ese momento caí en cuenta que ya no era más virgen .Había perdido mi virginidad con Julian.
Oh por Dios.
Era uno de esos momentos de reflexión conmigo misma en donde no sé qué mierda me pasa, en donde no sé cómo lidiar con la situación o siquiera intentar poner en calma las cosas.
Yo… no era más virgen. ¿Lo pueden creer? Había hecho el amor con Julian, me había entregado completamente a él.
Imposible de creer.
Sonreí de lado a lado, me sentía bien.
Tomé un poco de shampoo y me lo coloqué en el pelo para comenzar a hacer espuma; luego de unos minutos me enjuagué y me coloqué acondicionador.
Estaba por terminar de enjuagarme cuando sentí unos labios en mi nuca y unos brazos en mi cintura.
Reconocería ese tacto en donde sea.
- ¿Te despertaste? –Me giré para verlo.
Su cabello se comenzaba a aplastar por el agua mientras tenía una sonrisa en el rostro.
- Te amo –Me besó la punta de la nariz.
- Yo también –Rodeé su cuello con mis brazos.
- Soy el hombre más feliz del mundo .En serio, te amo –Me tomó del trasero y me levantó para arriba, entonces enrollé mis piernas a su cintura mientras sentía la presión de su miembro contra mi zona más íntima.
- También estoy feliz, te amo –Lo tomé de la nuca y uní nuestros labios en un beso.
No hicimos el amor, pero si nos besamos mucho .No diré algo que no hicimos, no les voy a mentir. Fue hermoso, todo era hermoso .Era todo muy nuevo para nosotros, bueno…más para mí que para Julian, yo era la primeriza aquí .Lo que amaba era que él se comporte normalmente cuando tenemos momentos íntimos, que sigamos siendo cariñosos y románticos, pero a la vez un par de idiotas que se ríen de sus idioteces. No lo sé. Amaba esto, amaba tener esa conexión tan especial con Julian, amaba verlo sonreír y odiaba verlo llorar, amaba todo de él porque sus imperfecciones lo hacían perfecto para mí .Era un sueño.