- Ori, él es Luciano –Luciano me sonríe amablemente .Sé que está nervioso y algo incómodo por la situación.
No sé si estoy impresionada por la increíble belleza de Luciano, o porque Nico besó a un chico en frente mío.
- Luciano, hola de nuevo –Asiento sonriéndole .Es una de las pocas veces que intento ser amable con una persona de entrada.
- Es un placer, Ori –Se ríe y luego mira a Nico.
Me es imposible no observarlos embelesada, son tan jodidamente hermosos.
- Debe de ser una sorpresa para ti, perdón por no decirte nada de esto –Dice Nico .En una sola mirada puedo notar algo, se están tomando de las manos sobre la mesa.
¿Así o más encantador?
- Te la tenías bien guardado, Francella, me sorprende que haya salido así de la nada .Pero hacen una bonita pareja –Tanto, que me los quiero guardar en una caja de muñecas y observarlos embobada todo el santo día.
- Me ha hablado muy bien de ti y de un tal…Julian, ¿Puede ser? –Mira a Nico como para confirmarlo y yo no puedo retener la carcajada.
- ¿Qué te he dicho, Nicolas? Lejos de mi novio –Y me siento victoriosa, logro hacer que ambos se rían.
- Oh dios… deberías verlo, es hermoso –Canturrea Nico y recibe mi patada por debajo de la mesa.
- Sí, y es mío –Advierto intentando sonar lo más intimidante posible, uhm… pensándolo bien, tengo tanto de intimidante como Primrose Everdeen, la hermana de Katniss en los juegos del hambre.
En ese momento llega una muchacha con nuestros frappuccinos y mi muffin, sonrío ampliamente a la comida, y caigo en cuenta de que por primera vez no me siento incómoda de comer libremente frente a otras personas, exceptuando a Julian, claro, frente a Julian hago libremente un montón de cosas, frente a Julian me trago mis inhibiciones por completo.
- ¿Quieres algo? –Le pregunta Nico a Luciano, aún siguen tomándose de las manos. Lloraré de amor, dios mío.
- No cielo, gracias –Le contesta Luciano con una sonrisa, en serio, lloraré.
Nunca en mi depresiva vida he visto a una pareja de gays tan hermosa como la que Nicolas y Luciano hacen.
- Bueno… –Rompo el silencio – ¿Cómo se conocieron?
Se miran y se sonríen incómodamente, por un momento siento que su recuerdo es triste y que prefieren no hablar de eso, y estoy a punto de decir algo cuando Luciano comienza a hablar.
- Yo…yo le hacía bullying a Nico en la escuela.
¿Mil demonios atravesando por mi cabeza en una fracción de segundo? ¿Incontrolables ganas de matar a la persona que tengo en frente mío? ¿Deseos de convertirme en asesina serial? No lo sé. Realmente no sé qué sentí en ese momento, lo único que realmente estaba definido era mi nuevo odio hacia Luciano.
- ¿Tu qué?
Es imposible, no me lo creo.
- Ori, ahora está todo más que bien y… -Salta Nico, porque seguramente sabe sobre mi siguiente reacción.
- No, déjala .Si quiere enfadarse lo acepto, era tan mierda en ese tiempo, merezco su odio –Murmura Luciano.
¡Y por todos los santos! ¿Cómo pudo haberle hecho eso a una persona tan buena como Nico? ¿Cómo? ¿Qué clase de jodido enfermo es éste? Claro, me vale madre que ahora adopte la postura de ‘Reconozco mi error y merezco ser castigado’, ¡No!, lo echo hecho está.
- Te golpearía, pero sé que eso no le hará bien a Nico –Digo al fin.
- Ori... –Dice Nico.
- ¿Te ha pedido perdón por todas las cosas que te hizo? –Pregunto de repente.
Respuesta equivocada y mi puño caerá sobre el perfecto rostro de Luciano.
- Millones de veces –Nico lo abraza a Luciano, como si quisiera protegerlo .Maldito, lo hace a propósito.
- Y sigo haciéndolo, él sabe que es algo que me atormenta.
- Ay sí, como n…
- Oriana... –Me reprende Nico.
- Quiero escuchar la historia –Exijo.
- ¿Quieres que te la cuente él o yo? –Pregunta Luciano.
- Tú cállate, quiero oírla de la boca de Nico.
Tyler suspira, sé que no le agrada hablar del tema, sé que no le hace bien, pero ni modo…soy una bola de curiosidad.
- Luciano me vio llorando en el baño del colegio, me prometí a mí mismo que nadie jamás me vería llorar así como así, pero no lo pude evitar, fue tan fuerte que en cuestión de minutos me encontraba llorando en su pecho; nadie dijo nada y entonces nos besamos, la química fue innegable, Lucho me confesó que le gustaban los chicos, y créeme que le costó admitir que era gay, pero al final lo hizo, y me alegro de que lo haya hecho –Se mantienen abrazados, puedo ver la culpa en los ojos de Luciano.
- Lo siento… -Murmura tan bajito que me cuesta creer lo escuché.
Nico asiente y luego besa su frente .Se lo ve condenadamente feliz a pesar de todo.
Lloraré, lo haré en serio.
- Perdón por tratarte mal –Murmuro con fastidio hacia Luciano, no lo miro, no hago nada.
Sí, Luciano ahora es gay, pero antes fue un tremendo hijo de puta con mi mejor amigo, quizá Nico lo perdone, pero eso es una marca, no soporto ver sufrir a Nico, no me lo permito.
- Si tu comienzas a adquirirme odio por escuchar un breve resumen de toda la historia, imagínate el odio que me tengo a mí mismo por todo lo que hice –Dice Luciano.
Eh escuchado esa frase millones de veces, una persona cercana la vivía repitiendo.
Yo.
