Parte 18: Tu olor

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-Jiminie... -Dijo jadeando sobre mis labios, rodeando mi espalda con su brazos para hacer que me acostara encima de él, y yo, sin poder salir aun del éxtasis del orgasmo me relajé sobre su pecho, escuchando los latidos impacientes de su corazon.

Lo quería... demasiado

Estar de esa forma sobre su pecho me reconfortaba, me hacía sentir seguro y protegido, y dentro de ese refugio que era su cuerpo me dejé llevar durante varios minutos, sin decir palabra alguna, sólo escuchando el latido de su corazón, que me indicaba que era cierto, que él también me quería, y fue por esa misma razón que a pesar de la apacible atmósfera no pude evitar sentirme culpable; no tenía idea de que Tae me viera de esa forma, y eso me hacia sentir dichoso y al mismo tiempo preocupado, triste...por que Si... me encontraba ahí después a haberlo hecho con él, después de habernos dicho que nos queríamos, pero parte de ello había sido no solo por amor, estaba conciente de ello. Quería a Tae, lo quería demasiado, pero a pesar de todo mi amor jamás me hubiese acostado con él, si es que mi cuerpo no lo hubiese exigido de esa forma tan desesperada. A pesar de eso después de esto sabia que podía recibir su amor y sin embargo temía, mi corazón temía, considerando la idea de que si Tae se enteraba de la razón de mi tristeza... se sentiría usado... Tae no podía enterarse de lo mío con Min Yoongi... no podía saber que estaba triste porque si se enteraba ¿que es lo que pensaría de mi? Pensaría que me aproveché de su buena voluntad, pensaría que soy una persona sin escrupulos que se acuesta con el primero solo para desquitarse con saña, pensaría que mis besos y mis caricias no valían nada, que eran algo casi genérico y yo... no quería que pensara eso de mi, no Tae...

Narrado por Taehyung

Su suave respiración, sus pequeños y apacibles latidos que reumbaban sobre mi pecho discretamente, y la fragancia de su cabello impregnándome los sentidos, impregnando los colores de aquella habitación de apacibles colores que se derretían...

Sus suaves manos, pequeñas, frágiles, que tomé para entrelazar con las mias, viéndolo sonreírme momentáneamente para volver a acostarse sobre mi pecho y tras ello su afilado mentón subiendo por mi cuello, llegando hasta mis labios para hacerme perder la respiración con un beso más.

Hubo un momento en que lo sentí pensativo, haciendo círculos sobre la piel de mis clavículas, pero no me atreví a preguntar, quería que se quedara así, imperturbable, casi inmaculado, fundiéndose con el calor que nos transmitíamos el uno a otro.

Por fin y después de tanto él estaba así, como lo había visto tantas veces en mis sueños, como lo había imaginado desde el momento en que me confesé enamorado de él, desde esa época, de mejillas regordetas y sonrisa preciosa, desde esas playeras sin mangas, las gorras de rapero, los collares de dollar y el doloroso delineado en negro, desde sus sexys y rudos bailes, desde su esperanza y su entusiasmo por todo, desde su dulce cariño, su apacible consuelo... por fin... por fin y después de tanto... estaba pasando.

-Te quiero... -Dije sonriendo, dándole repetidos besitos en la frente, revolviendo su cabello con ternura, mientras él, tal como el cachorro que siempre le decía que era cerraba los ojos, recibiendo mi cariño. Definitivamente le pediría que me permitiera estar a su lado, aunque no de inmediato, hubiese sido demasiado para el mismo dia si yo le hubiese dicho algo en ese momento, por eso aguardé a pesar de que mi corazon ardía por porponerle que saliera conmigo oficialmente, que fuera mi novio, pero guardaría decoro, porque era demasiado precipitado, más aun a sabiendas de lo que había pasado con Yoongi Hyung... y conciente de los problemas que habría con Jungkook por la misma razon.

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Narrado por Jimin

El tiempo se fue demasiado rápido, porque cuando el encargado del establecimiento tocó la puerta diciéndonos que cerrarían pronto saltamos de aquel amplio sillón como ratones, desnudos, sorprendidos y después volviéndonos socarronas hienas empezamos a reírnos por la penosa esena, para empezar a vestirnos después, rompiendo la fantasía dentro de la cual nos encontrábamos, no sin antes despedir la habitación con un beso rápido, y una mano que me estrechó con cariño, sin prisa y cálidamente.

Everybody Loves Jimin- BTS X JiminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora