Extra: Entonces, juguemos.

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Lauren P.D.V:

5 años después.

-Lauren, amor, ¿has visto los... -Y se quedó muda al entrar a la habitación, y verme.

Yo le sonreí, sentada de rodillas en la cama. Ya me había dado una ducha, y a propósito me quedé en ropa interior y sólo me puse la chaqueta que le quité anoche cuando desesperada por hacerle el amor, la desnudé.

-¿Decías algo, bebé? -Me incliné hacia adelante a propósito, buscando seducirla. Su boca estaba levemente abierta mientras me veía de arriba a abajo. Yo sonreí, traviesa.

-Mierda, Lauren. -Cerró los ojos y se apoyó del marco de la puerta.

-¿Hice algo malo? -Pregunté "inocentemente". Ella abrió los ojos y suspiró. Comenzó a caminar, mordiéndose el labio inferior, y se detuvo justo frente a mí. La cintura de su pantalón deportivo quedó justo al nivel de mi boca. Me lamí los labios porque sabía que ella me estaba observando, y luego levanté la mirada para verla provocativamente. Su mano derecha de repente me tomó por el cabello con fuerza, haciéndome gemir, y levantar el rostro más hacia ella. Lo admito, me gusta rudo, y a ella le encanta satisfacerme.

Se fue inclinando, aún sosteniendo mi cabello, y dejando nuestros rostros muy cerca. Nuestros alientos a menta se mezclaban.

-Esa ropa interior es demasiado provocativa. -Susurró sensualmente. -Demasiado peligrosa... Tentadora.

-¿Vas a castigarme por ponérmela? -Su mirada pasó de mis labios a mis ojos. Era intensa y desafiante. Pero luego, sonrió, y me soltó.

-Buen intento, señorita, pero no. -Tocó la punta de mi nariz con su dedo índice.

Yo suspiré frustrada y me lancé hacia atrás, para quedar acostada.

-Eres demasiado cruel. -Me quejé cerrando los ojos, y sentí cómo se fue acostando sobre mí, con cuidado.

-¿Yo soy la cruel? Tu eres quien siempre me seduce y me provoca de esa manera. -Sentí sus manos acariciar mis mejillas con dulzura. Yo abrí los ojos y ella me observaba con una sonrisa, detallando mi rostro. -Eres demasiado hermosa, Lauren. A veces me cuesta creer que seas real.

-Oh, vamos, ¿es en serio? -Ella sonrió de lado viendo mis labios, luego mis ojos. -Por supuesto que soy real. Tampoco soy perfecta, en ningún aspecto, y tú lo sabes. Y pues mi belleza es... -Me encogí de hombros. -Normal.

Ella sacudió la cabeza y siguió observándome con detalle, mientras acariciaba mis cejas, mis pómulos, y mis labios.

-Hueles delicioso. -Murmuró.

Yo sonreí y ella se mantuvo haciendo lo mismo. Yo fruncí el ceño, porque parecía muy distante.

-¿Pasa algo? -Acaricié su mejilla izquierda. Ella sonrió amplio.

-Decir que soy afortunada es poco comparado con lo que de verdad siento ahora. No sabes lo mucho que estoy enamorada de ti. -Susurró pasando sus dedos por mis cejas.

-¿Entonces tu estrategia de este aniversario será ser muy romántica? -Comencé a acariciar su espalda, por debajo de su camisa.

-Y la tuya es ser seductora. -Acarició mis labios con los suyos. -Sabes lo mucho que me prende que me acaricies de esa forma.

-Tal vez lo haga a propósito. -Subí siguiendo la línea de su columna y se arqueó un poco. Yo sonreí.

-Debería castigarte. -Dijo con voz ronca.

-¿Quieres hacerlo? -Provoqué volviendo a bajar por su espalda.

-Sí, pero no de la forma en que tú quieres. -Sonrió traviesa.

Imagina... Con Lauren Jauregui.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora