Amor Ciego Y Cruel - Chensung NCT

ChenSung 8

Fuimos andando hacia mi casa y justo me llamó mi madre.

—Chenle, ¿dónde estás?—

—Volviendo a casa—

—No creo que esta noche podamos volver a tiempo a casa, habíamos salido a comprar unas cosas muy lejos y se nos ha pasado la hora, he llamado a Renjun para ver si te deja quedarte en su casa ya que Taeyong también se va a casa de un amigo.—

—Vale, mama.—

—Adiós, Chenle.—

—Adiós.—

Colgué el teléfono y miré a Jisung.

—Mis padres no van a volver a casa y han llamado a casa de Renjun para saber si podía quedarme allí. Tengo que llamarle ahora vuelvo.—

dije.

Jisung se quedó apoyado en la pared de la calle mirando su móvil.

—Renjun, mi madre te ha llamado ¿no?— le pregunté.

—Sip, oye una cosa... bueno ya hablaremos en persona de ello. Lo que quería decirte era que a ver si estás con Jisung.—

—Sí, estoy con él.—le dije.

—¿Te puedes quedar en su casa?—preguntó Renjun.

—Tu madre me dijo que podía ir siempre que quisiera, lo haces para que estemos juntos ¿no?— Dije con una ceja alzada.

—Sí—

—¿Y encima lo admites?— pregunté.

—Sip. Quiero que me cuentes las cosas que habéis hecho pero prefiero que sigais juntos y ya me contarás más cantidad de cosas.— dijo.

—Yo te mato.— dije riendo.—me ha pedido salir...— dije sonriendo como tonto.

Oí un grito enorme al otro lado del teléfono. Tuve que separar el móvil de mi oreja para no escucharlo.

—Bueno Renjun, me voy a preguntarle a ver sin me puedo quedar en su casa.— dije colgando el teléfono.

Volví con Jisung.

—Renjun no me deja quedarme en su casa....— dije rodando los ojos y riendo.

—¿Por qué no te deja? — preguntó.

—Porque quiere que estemos juntos— dije riendo.

—Ah— dijo riendo— Entonces vamos a mi casa.—

Le di la mano otra vez y fuimos juntos andando por la calle. Hasta que llegamos a su casa.

—Por cierto, mañana vendrás conmigo al insti de artes ,eeh.—me dijo con una ceja alzada.

—No, no es buena idea.— dije yo al acordarme de la amenaza de los chicos.

—¿Por qué no?—preguntó él.

—Porque quiero pensarlo bien, además tengo que decirselo a mi madre.—dije de excusa.

—Bueno... pero cuando le digas si te deja me avisas y vamos juntos.— dijo él.

—Sí, sí.— obviamente no iba a ir, el bullying había parado y lo último que quería era que volviera a empezar.

—¿Qué quieres hoy para cenar?— preguntó él.

—MMmmm....— me quedé pensando pero no tenía ni idea.—¿Sabes cocinar algo? —pregunté.

—Pues....—

—No ¿Verdad?— dije sonriendo.

—No— dijo riendo nervioso.

—Te voy a preparar yo comida.—dije feliz.