Amor Ciego Y Cruel - Chensung NCT

ChenSung 13

Cuando llegamos a Barcelona, donde estaba el estudio de baile, empezamos a conocer algunos compañeros de baile con los que hablábamos Inglés. Todos se presentaron de uno en uno y todos parecieron llevarse bien. En esos momentos ellos estaban hablando y conociéndose, yo me senté en el suelo contra el gran espejo. Me dolía la cabeza de tanto pensar en el tema pero no podía parar de hacerlo. Yo no estaba bien, era obvio que Chenle tampoco estaba bien, pero yo debía estar feliz ya que hice lo mejor para él...

—Hola!— dijo una chica delante de mí con una gran sonrisa.

—Hola...—dije desganado.

—¿por qué no vienes con nosotros?—dijo ella.

—Quiero estar solo, tengo que pensar...—dije.

—Se te ve triste, deberías de olvidar los problemas de vez en cuando...— dijo la chica con la sonrisa en su cara.

—No me apetece—dije.

—Como quieras—dijo la chica encogiendo sus hombros y alejándose dando pequeños saltitos.

Al final todos se marcharon del estudio para ver cuál eran sus habitaciones. Yo seguí sentado en el suelo pensando y pensando en lo que hice, en mi forma de ser, y sobre todo en Chenle. No pude evitar llorar, todo aquello dolía demasiado ¿que me hizo decidir eso? Ah, sí, lo que le hice antes... Abracé mis piernas y hundí la cabeza entre ellas. Vi cómo mis lágrimas caían por mi cara hasta mis vaqueros.

—¿Sigues aquí..? ¿Estás bien?—preguntó la chica de antes.

—No, no estoy bien—dije yo llorando, me sentía muy solo, como cuando me hacían bullying.

De repente noté que unos brazos me rodeaban. Me soltó y le miré.

—No sé lo que te ha pasado pero espero que lo soluciones... Si quieres me lo puedes contar a mí—dijo ella sonriendo. —Tal vez pueda ayudarte...—insistió.

—No, da igual, ya me siento mejor—dije limpiando las lágrimas—¿puedes enseñarme mi habitación? No he seguido a los demás y no sé cual es...—dije triste.

—Claro, ¿cómo te llamas?—preguntó la chica.

—Jisung Park—

—Ah, sí, tu habitación es esta—dijo casi corriendo hacia el pasillo—Vengaa rápido—dijo volviendo a donde me encontraba e intentando levantarme rápido del suelo.

Me llevó por el pasillo muy feliz.

—Esta es tu habitación— dijo ella. Me dió la llave y abrí la puerta.

—Gracias... ¿Cómo te llamas?—pregunté.

—Me llamo Anna—dijo—y... de nada—dijo en coreano.

—Buenas noches—dije en castellano.

Entré en mi habitación y me lancé a la cama muy triste. Quería tanto hablar con Chenle... Entré al Whats App y puse algunos audios que me había mandado Chenle. Muchos eran suyos indignado o haciendo que estaba enfadado. No pude evitar sonreír pero llorar a la vez. Después de esto Chenle nunca me iba a perdonar, por desgracia...

Pasaron unos cuantos días intentando enseñarnos una coreografía bastante difícil. Yo no estaba en lo que tenía que estar, y a menudo olvidaba los pasos o bailaba sin fuerza. Me choqué unas cuantas veces con la gente. Me sentí realmente inútil...

—Vamos a dejarlo por hoy...—dijo el coreógrafo con cara de que todo había sido un desastre.

Me volví a sentar solo y vi como el coreógrafo fue a hablar con nuestro profesor. Nuestro profesor estaba pasando bastante vergüenza, así que asumí que estaban hablando de mí. Ignoré todo un rato hasta que vino Anna a hablarme.