Amor Ciego Y Cruel - Chensung NCT

ChenSung 27

Me desperté abrazado por Jisung. Le miré a la cara, aún estaba dormido, así que decidí no moverme, estaba muy cómodo. Al de unos minutos, Jisung empezó a moverse y a hacer ruidos de molestia. Le miré y vi que cerraba los ojos con fuerza y estaba sudando. Estaba teniendo una pesadilla.

—No, no, dejadme. Yo no soy un pollito—dijo Jisung. Me habría hecho gracia si Jisung no lo estaría pasando tan mal por aquella pesadilla.

—Jisung, Jisung, tranquilo, estoy aquí—dije despertándolo suavemente.

Jisung abrió sus ojos cubiertos por lágrimas.

—¿Estás bien?—pregunté muy preocupado.

—Sí, solo ha sido una pesadilla—dijo él tranquilizandose y limpiando sus lágrimas—Siento haberte preocupado—dijo.

—No sientas que yo esté preocupado—dije abrazándolo—¿Quieres hablar de tu pesadilla?—pregunté.

—No—dijo.

Me dio pena ver a Jisung así pero si no quería hablar de ello, no iba a forzarlo.

—¿Qué hora es?—preguntó.

—Son las 10 de la mañana—dije.

—Mierda, llego tarde a la academia—dijo cogiendo el móvil—estúpido móvil— se levantó casi corriendo para vestirse—Lo siento Chenle tengo que irme. ¿Quieres que le diga yo a Michael que vuelves a las clases de canto? ¿O quieres decirselo tú?—preguntó mientras se ponía sus zapatos.

Lo había olvidado. La academia.

—¿Estás seguro seguro de que quieres ir? No lo hagas por nadie que no seas tú—dijo.

Era obvio que no quería, después de aquella humillación que me hicieron pasar con el líquido pegajoso y las plumas en el escenario, no quería volver a salir a cantar o a hacer presentaciones. No quería que volvieran a molestarme. Esta vez me mantendré más alejado de esos chicos.

—Sí, sí quiero, estoy muy feliz de que esté libre el puesto—dije cambiando totalmente la expresión.

Jisung pareció estar convencido de mi respuesta, y es que... he aprendido a mentir y a fingir la felicidad. Eso no quería decir que no sintiera felicidad con otras cosas, pero estaba seguro de que volver allí sería un sufrimiento.

—Podría ir hoy contigo—dije para convencerlo más de que no quería atrasarlo.

—Como quieras, pero vístete rápido—dijo él.

—Puedo llamar a mi hermano para que nos lleve—dije.

—Igual no tenemos que molestar a tu hermano, igual nos da tiempo a coger el bus—dijo Jisung.

—Más de una vez me ha dicho que si quiero que me lleve allí le pregunte, así que no pasa nada—dije fingiendo una sonrisa.

—Vale...—dijo finalmente.

Llamé a mi hermano para que nos pudiera llevar en coche hasta la academia de artes. La verdad es que estaba algo aterrado por lo que podría pasar.

Mi hermano que ya estaba preparado vino a recogernos con el coche desde la casa de Ten para llevarnos a la academia. Cuando llegamos intenté aparentar lo menos nervioso que pude.

—¿Seguro que quieres hacerlo?—preguntó Jisung mirándome a los ojos.

—Sí, Jisung deja de preguntarlo—dije algo borde por nervios.

—Vale... lo siento—dijo Jisung.

—Perdona es que estoy un poco nervioso...—dije.

—Tranquilo, lo harás muy bien—dijo él dándome un beso en los labios.