CAPITULO 34: "¿Novios a medio tiempo?"

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Lillest se encontrada en una de las fraternidades ocultas del concejo , a las afueras de la capital en la zona neutral. Había sido llevado a esta en especifico porque se encontraba en la superficie donde eran casi imposibles de detectar, él único que podría hacerlo por reinar desde la superficie seria el rey Velquirryuss pero el se encontraba demasiado lejos, para sentir su asquerosa presencia.

El periodo de transicion de Lillest había sido algo duro para él, su cabello había tomado un tono cobrizo, sus ojos se habían vuelto castaños miel, había perdido las membranas de sus manos y pies, sus garras ya no tenían firmeza y sus colmillos habían desaparecido por completo, era muy suceptible a los cambios de temperatura, y las fragrancias muchas veces lo abrumaban, más cuando tuvo que acostumbrarse a comer carne, eso fue sumamente asqueroso, pero soporto eso y todos los problemas que le causo a su cuerpo con solo un idea en mente. Ir al mundo de los humanos y por fin había llegado el día en el cumpliría su meta. Se sentía sumamente ansioso.

- Acompañeme mi señor.

El sirviente lo llevo hacia un sótano cavado en piedra debajo de la residencia donde se había adaptado, las paredes estaban iluminadas por cristales de luz que daban un brillo azulado al lugar, Lillest no se detuvo a admirar el paisaje siguió con paso firme al vasallo, que sigilosamente avanzaba cada vez más profundo, hasta llegar a un gran espacio con múltiples lagunas que brillaban intesamente, en colores, turquezas , azulados, blancos o dorados. En el centro del lugar, se encontraba el actual líder del consejo con una mirada oscura clavada en Lillest.

- Tal parece que su largo sacrificio valdrá la pena, majestad. Su tortura durará poco... un tiempo más en ese cuerpo y podrá traer a su "Princesa".

- Debo suponer, que todos estos son los antiguos portales de abduccion ... - Paso la mirada por los manantiales y volvió la mirada al anciano. - ¿Cuál es el que debo tomar...?

- Mi señor, estos no son portales comunes... son únicamente para cruzar al mundo humano, para volver tendrá que usar otro. – Noto la impaciencia en el rostro de Lillest. - Pero eso podrá ser explicado en el otro mundo. – Rio bajo.

- ...... - Lillest solo fruncio el entrecejo.

- Vera, cada uno de estos portales lo llevaran a distintas partes del mundo humano, y a diferentes tiempos... para su "mala suerte" – Dijo riendo con irionia. – Hay una que coincide en el lugar en el que debe vivir la humana, según el formato escrito que nos entrego , pero el tiempo en el que usted llegará será el futuro al que se encuentra ahora. - ¿Esta de acuerdo en tomar esa elección o preferiría tomar un portal que lo lleve al mismo tiempo en que ella esta, pero al otro lado del planeta?

- Tomaré la primera opción.. – Lillest sabía que estaba siendo arriesgado, pero prefería llegar , encontrarla y traerla de regreso a tener que aventurarse por un mundo desconocido sin saber si realmente llegaría a verla alguna vez, como hizo su hermano mayor. Conservaba un morral listo para cubrir sus necesidades .

- Sus deseos son ordenes, por aquí mi señor... - Le indico el camino. - Pero antes , comprenderá que la razón por las cuales no han sido usados nuevamente , es por que perdimos al ultimo emperador y es necesario su .... sangre sin ella es imposible ....

- Lo se .... Rukh , entrégalo. - El subordinado con una emoción latente entego la redoma que Lilest había llenado aun siendo triton .

- Solo será para un viaje , si funciona vere que hacer ... indico Lillest guardando una pequeña bolsa para si .

Retorno - Libro II - Humanos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora