PROTEGEME [Hot] (Justin Bieber y tu) - TERMINADA

Que pasa mi amor?

Naiara abrió la puerta con puro sigilo. Intentó aguantar el llanto, pero no podía.

Sollozó y fue a buscar a su padre. Le movió un poco el brazo. Un puchero automatico se plasmó en su expresión.

- Papá… - dijo con voz temblorosa.

Justin dormía profundamente. Le dio la espalda, sin querer. Naiara suspiró y cambió de lado. Se dirigió a la izquierda y repitió la acción.

- Mamá… - la garganta le escocía, y los ojitos se le llenaron de lágrimas.

__________ se sobresaltó. Encendió la lamparita de luz y tuvo compasión hacia

Naiara. Le acarició la mejilla.

- ¿Qué te pasa mi amor? – dijo apenada. – estás ardiendo…

- Me duele la cabeza… - dijo la pequeña.

___________ se levantó de la cama y cogió a Naiara en brazos. La paseó un poco, para que parara de llorar.

- ¿Qué te duele? – dijo ____________ mirándola.

- La cabeza… me encuentro mal… - sollozó Nai.

- Vamos a ver… - ____________ sacó el termómetro de uno de los cajones del tocador. Se lo coloco a Naiara y le aguanto el brazo. – no lo muevas ¿eh? – le sonrió y le besó la frente.

- ¿mmhh? - __________ se giró hacia a Justin, que se estaba despertando.

- Duerme, cariño. – le dijo ___________. – que no te lo digo a ti.

Justin se incorporó más y observó el panorama.

- ¿Qué pasa? – dijo aún somnoliento.

- Naiara tiene fiebre. – dijo mirando el termómetro. – justo rozando los trenta y ocho coma cinco grados.

- Dios… - Justin se levantó y se acercó a ambas. - ¿La llevamos a urgencias? – preguntó, mirando a __________.

- No, tengo Dalsy, hará que le baje la fiebre y que pueda dormir. Pero mañana mejor no voy a la clínica y me quedo en casa con ella.

Justin asintió.

- ¿Necesitas algo? – le pregunto a ________, ladeando la cabeza.

- No, tranquilo. – desapareció con Naiara hacia al piso de abajo, a buscar el jarabe.

Justin, de nuevo medio dormido, sintió como la cama se hundía por el lado izquierdo. Se incorporó. Naiara quedaba entre él y __________.

- ¿Dormirá aquí?

- ¿Qué pasa? – dijo ___________ acariciándole el pelo a su pequeña, mientras ella cerraba los ojitos y cogía un trozo de camisón de su madre. Le gustaba tener algo fino entre las manos cuando se trataba del sueño, de dormir…– No la voy a dejar en su cuarto, si se siente mejor junto a sus padres.

- Bueno, de acuerdo… - Justin se tiró un poco hacia la derecha, para que hubiera más espacio. – Vaya nochecita nos espera…

__________ sonrió. Justin se inclinó para besarla y ella se retiró.

- Que rápido olvidaste nuestra apuesta, cielo.

- Oh jó.dete. – se dijo a sí mismo. – Encima la apuesta. ¿Sin besarte durante toda la semana? ¿En que estaba pensando cuando te dije que si?

- Mmh… puedes darme el beso y terminamos ahora, pero espero que tengas un buen tanga de hombre… porque me deberás un striptease de los buenos y laaargos.

- ¿Perdón? – se rió él. - ¿Ya volvemos? Yo no pienso ponerme un tanga, bonita. Ve preparándote tú para pasarte por la tienda de Lencería Lucy y doparte bien de prendas sexys…

- ¿A mi? En todo caso no me haría falta comprarme nada nuevo. Me basta y me sobra con mis estupendas prendas ¿o me dirás que no?

- Bueno, si. – sonrió Justin. – el caso es que ya las tengo todas vistas.

__________ negó con la cabeza y apagó la lámpara.

- Ten en cuenta que tu hija está entre nosotros.

- Lo sé.

Las palabras resonaban en la oscuridad.

- Como la chafes… - suspiró __________.

- No soy tan idio.ta.

__________ rió.

- A veces tengo mis dudas.

Justin refunfuñó algo, pero ___________, haciéndose la dormida, no le contestó. A veces, parecían ellos los críos. Y no Naiara.