"El Abrazo de la Luna" - Historias de Lobos

JASON FOSTER -2° Parte -

—¡Hey! ¡Foster! ¡Se te cayó algo!

Me di vuelta y miré al piso, y en eso un chico me golpeó la cabeza.

—¡Tu cerebro, idiota!

Cuando levante la cabeza vi a un grupo de chicos que se burlaban de mí, los mismos de siempre... Eran un grupito de cuatro imbéciles que se creían "los reyes del instituto", y por tanto molestaban a todo aquel que les diera la gana.

Yo respiré profundo, los ignoré y apresuré el paso para alejarme de ellos cuanto antes. La verdad, podría darles la lección de su vida, los haría llorar como niñitas suplicándome piedad... Quizás hasta me comería alguno de ellos o simplemente lo despedazaría delante de los demás. ¡Es una imagen tan satisfactoria en mi mente! Pero la realidad para mí era una "mierda": Tengo que hacerme el idiota, soportar que me humillen y retirarme con el rabo entre las piernas.

Ser un Licano, o como le conoce la mayoría "popularmente" un hombre lobo, no es tan divertido ni menos tan emocionante de lo que narran las series de TV o las películas de Hollywood, por el contrario es una especie de maldición...no, si es una maldición, una que nos limita a vivir ocultos en las sombras como bestias miserables.

Posiblemente sueno muy patético, comienzo a creer que lo soy. Pero es que cuando tienes que tragar mierda todos los días y fingir lo que no eres, comienzas a ver tu vida como un gran hoyo negro a donde cualquiera viene a cagar. ¡Si mi tío me escuchara hablando así seguro me golpea!

Pero no todo es tan malo últimamente: ¡Mi pequeño y jodido mundo se ha expandido un poquito! Está este lobito tonto en mi territorio.

Siempre pensé que era el único de por aquí, bueno, tampoco no es que no conozca a otros lobos: A la chatarrera de mi tío llegan algunos, vienen a "negociar" o a "saludar", todo depende de la luna. Pero ellos son lobos veteranos, este lobito tonto es diferente, y eso me intriga.

Lo he seguido un par de días: Parece un chico completamente común, como cualquiera de este lugar. Tiene amigos y hasta una novia. ¿En serio? ¿Una novia? Pues sí, era demasiado normal, demasiado; tanto que comenzaba a dudar de que él mismo supiera lo que es...

Hasta que un día: ¡Zaz! ¡Me percibió! ¿Acaso el lobito empieza a descubrir lo que es? ¿Acaso nuestra madre luna comienza a despertar sus instintos? ¡Esto se pone interesante!

Hoy lo he seguido de lejos, intentó que no me note. Es un fastidio porque nunca parece estar solo: O están un par de bobalicones con él que al parecer son sus mejores amigos, o está con su desabrida novia. Pero en cuanto lo vea "solo" será mi oportunidad de acercarme a él. El problema, es que a mí también se me pega la gente aunque no quiera...

—¡Oye! ¿Andas ocupado?

Me di vuelta y había dos chicas detrás de mí sonriéndome. Las conozco: una de ellas es hermana de uno de los imbéciles que me molesta, la otra estudia conmigo.

—¿Qué quieren? —Le respondí sin animo.

—Tenemos una amiga a la que le llamas la atención y te quiere conocer.

Las chicas señalaron a una chica de cabello castaño que estaba junto a otras en una esquina del pasillo. Esta de pronto me miró y se sonrió con timidez. Yo no podía tomarme en serio esa situación, y aunque lo fuera no me interesaba la propuesta.

—¿Y entonces...? ¿Qué dices? —Me dijo la segunda chica que estudiaba conmigo que era una morena algo provocadora— Se llama Alisa y es muy divertida.