28

690 69 9
                                    


Miraste cómo pudiste por encima de todas las personas que transitaban la calle en la que te encontrabas. Ya te encontrabas en Francia y habías retomado tu estancia dentro delo departamento; aunque solo te quedarías por unos dos días antes de dar rumbo a Japón. Aprovecharías estos dos días para relajarte un poco como habían recomendado McCree y Winston antes de salir de México. Así que aquí estabas, caminando por alguna calle en Francia y siendo rodeada por personas mientras llovía. Ni siquiera habías tomado la posibilidad de que lloviera este día por lo que no llevaste paraguas encima; así que estabas empapada, ah, y también estaba anocheciendo. Definitivamente volverías al departamento.

Comenzaste a caminar evitando lo mayor posible el contacto con alguien, estabas de mal humor por todo lo que había pasado este día y apretabas la mandíbula tan solo por saber que ningún taxi o bus te dejaría subir por estar mojada. Pronto una sensación de estar siendo vigilada llego a tu cuerpo, miraste a los alrededores y bufaste al notar que solo se trataba de un niño que te observaba curioso por tu terrible aspecto. Lo ignoraste y seguiste caminando distrayendo tu mente con cualquier pensamiento para que el camino se hiciera más corto.

Tiraste toda la ropa en la lavadora apenas cruzaste por la puerta luego de haberle puesto seguro. Te diste un corto baño, secaste tu cabello y tu cuerpo terminando por echarte sobre la cama, miraste por la ventana y solo viste las pequeñas gotas en el vidrio. Decidiste que luego de cenar seguirías leyendo los informes u las noticias que Winston te enviara con respecto al estado de otros agentes hasta que terminaste dormida con un montón de papeles y uno que otro holograma abierto sobre ti. Más no duraste mucho en ese estado ya que te levantaste de golpe ante un ruido; desde que despertaste habías desarrollado un sueño sumamente ligero. Por reflejo apretaste el dispositivo de Winston contra tu pecho e intentaste calmarte, desde que habías llegado te encontrabas algo nerviosa y ni sabias el porqué. Giraste tu cabeza hacia el pasillo cuando volviste a escuchar un ruido, proveniente de alguna parte de tu apartamento. Te levantaste de la cama tomando tu arma del cajón y caminaste en silencio por el pasillo, revisando primero el baño y luego dando rumbo a la cocina.

– Ha de haber sido mi imaginación. – susurraste restregando la palma de tu mano entre tu cabello desordenándolo. Te apoyaste de frente al mesón intentando calmar nuevamente tu alterada mente. – Solo estas alterada (Tn). – estabas por darte por vencida y volver a dormir cuando algo rompió la ventana en la cocina detrás de ti y choco contra tu espalda sacándote un quejido. Te giraste solo para ver que se trataba de una granada cegadora. – Me lleva a la madre que lo pario.

Cubriste tu rostro con los brazos pero no fue suficiente ya que de igual manera tus ojos quedaron incapacitados y por otro lado un molesto ruido se alojó en tus oídos. Intentaste tomar nuevamente tu arma pero debido a la torpeza esta termino rodando por el mesón hacia algún lado, maldijiste por lo alto por eso. Notaste como la sombra de una persona se asomaba por el pasillo, te pusiste en guardia de inmediato puesto que no esperabas que nadie más que Talon se atreviera a irrumpir en tu propia casa. Pero toda tu concentración cayó al suelo al ver que el sujeto que había irrumpido se trataba del mismo agente que había intentado llevarte cuando despertarte. Llevaste tu mano hacia atrás de tu espalda ocultando el dispositivo, ahora activado solo para audio, que te permitía comunicarte con Winston.

– Es muy osado de tu parte interrumpir en mi lecho, Reaper. – susurraste ahora moviéndote lentamente unos pasos al costado, rumbo hacia donde se había deslizado el arma. Ahora que lo mirabas mejor notabas como partes de su cuerpo parecían desprenderse en una niebla y volvían a unirse a sus prendas oscuras. – ¿No dirás nada?

No obtuviste mucha respuesta además de un ligero y casi imposible de notar movimiento de su cabeza en dirección a la ventana; miraste en dirección hacia ella solo por reflejo y viste como por el borde del tejado del edificio vecino unos pequeños puntos luminosos de color rojo se hacían notar por entre la lluvia. Inmediatamente 'te moviste rápidamente a cortar el tramo que quedaba entre tú y el arma y te alejaste de la ventana pasando por encima de la isla que quedaba por el pasillo; reconocías la imagen de ese tejado y sabias que se trataba de la francotiradora que había mencionado Winston gracias a las pocas imágenes que te había enviado por medio de los informes. Llevaste el dispositivo hasta la altura de tu rostro mientras te movías por el pasillo, vigilando como la imagen de Reaper se acercaba lentamente.

– ¡Winston! – gritaste hacia el comunicador, pero la estática fue lo único que dio respuesta. Dándote por vencida metiste el comunicador en uno de los bolsillos de tu pantalón suelto y terminaste de apresurar el paso hasta llegar a la puerta, quitar el seguro, y saltar por la baranda de las escaleras. Caíste al suelo de cuclillas pero aun así lastimaste un poco tus piernas, puesto que habías caído de un segundo piso. – ¿Winston? – volviste a intentar dar aviso pero la estática persistía mientras observabas por los tejados notando la figura de la francotiradora corriendo sobre tu cabeza.

– ¡Te tengo! – de una esquiva apenas a unos pasos de ti la imagen espectral de Reaper pareció dándote una patada que te arrojo lejos, te levantaste del suelo mojado apoyando el peso de tus brazos e impulsándote hacia atrás.

Rebuscaste entre tu ropa el comunicador y levantaste la mirada fijándote en que él lo tenía ahora entre su mano libre, completamente destrozado. Seguiste vigilando los tejados resignada ante la idea de un enfrentamiento corporal o siquiera intentar dispararle. Estabas más que consistente de las habilidades de ese sujeto y aceptabas la desventaja, pero no la derrota, aun cuando la opción más segura fue huir. Lo viste hacer nuevamente ese movimiento con su cabeza, lo observaste confundida, ¿Por qué hacer el mismo gesto dos veces? La primera fue hacia la ventana donde estaba la francotiradora... Abriste los ojos y te moviste para no quedar expuesta pero no fuiste lo suficientemente rápida cuando la detonación de un disparo se oyó por encima de la lluvia apenas.

Corriste lejos entre callejones sosteniendo la reciente herida ahora alojada a un costado de tu abdomen. Escuchaste una risa profunda y macabra que te helo, luego tu cuerpo fue nuevamente enviado centímetros por los aires hacia distintos contenedores que con el golpe solo agravaron tu dolor. Con el cabello pegado al rostro por la lluvia viste a Reaper posarse frente a ti con una de las escopetas a distancia con dirección a tu pecho; esperaste que te disparase y acabara contigo de una vez pero cuando escuchaste una detonación opacada solo sentiste un frío sumamente insufrible subir por tu cuerpo haciéndote temblar de inmediato. Lo miraste una vez más y distinguiste un arma corta con silenciador entre su mano, hizo otro gesto con su cabeza y luego su forma se disipo frente a tus ojos; quedaste anonadada mirando al vacío y con un frío infernal en el cuerpo. Mismo frío que te obligo a cerrar los ojos a cabo de unos momentos, dejándote con el cuerpo herido tendido sobre contenedores esparcidos.

Sujeto 2 8 9| Overwatch Y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora