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-Ire por un vaso de agua -Dijo Maxine saliendo de la habitación- quieres uno?

-No, estoy bien gracias -Dijo Enoch colocando el corazón a los muñecos-.

Maxine bajo hacia la cocina para beber agua y mientras bebía pudo sentir una mirada pesada encima de ella, camino hacia una de las ventanas y comenzó a observar hacia fuera, de pronto ve que uno de los arbustos se mueve. Iba a salir para ver de qué se trataba pero se sobresaltó un poco al ver al ave que Emma había encontrado, ella estaba en la mesada de la cocina, la señorita Peregrine les había dicho que era la señorita Avocet y que no se podía convertir en humana por qué estaba herida. Maxine volvió a ver por la ventana pero ya no sintió a nadie afuera.

-Max? -Escucho a Enoch-.

-Ya voy -Dijo ella confusa y algo intranquila por lo ocurrido-.

Miro a la señorita Avocet por un segundo y ella se movía de una manera extraña, como si quisiese decir algo. Al oír otro llamado de Enoch dejo al ave en la cocina y subió, aún extrañada por eso.

-Sucedio algo que tardaste? -Pregunto Enoch ordenando sus cosas-.

-Solo estaba bebiendo agua en la cocina -Dijo ella con intranquilidad-.

No quiso mencionarle nada a Enoch para que no se preocupara, camino hacia la ventana y no vio a nadie allí, tal vez eran alguno de los niños o la señorita Peregrine quien vino a corroborar que todo estuviese bien.

•Narra Maxine•

Iba a ir por unas cosas a mi habitación y de la nada siento la necesidad de volver a ver a Víctor, la última vez que puse un pie en su habitación fue el día de su funeral luego no me atrevía a entrar. Enoch estaba creando muñecos de arcilla así que estaba segura de que no se enteraría que iría a ver a Víctor. Al entrar mi cuerpo se erizo al sentir ese ambiente frío y silencioso otra vez, lleve mi mano hacia el collar que me había obsequiado aquel día en la playa y sonreí con nostalgia al recordarlo.

-Hola Víctor -Susurre cuando me acerque a su cama-.

Tome su mano con cuidado y lo mire, una lágrima bajo por mi mejilla, daría todo por volver a sentir sus abrazos o su risa contagiosa, ni me puedo imaginar el dolor que debe sentir Bronwyn día a día sin su hermano mayor.

-Max? -Escuche una voz a mis espaldas-.

-Enoch -Dije confusa y lo mire-.

-Que haces aquí? -Se coloco a mi lado y me abrazó por los hombros-.

-Solo quería ver a Víctor -Dije con una mueca-.

Ambos nos quedamos en silencio mientras veíamos a Víctor, aún que no dijeramos nada nuestras miradas lo decían todo. Lo extrañabamos y mucho pero debíamos aceptar la realidad.

-Vamos? -Pregunto Enoch casi como susurro-.

-Sí -Solté con cuidado la mano de Víctor y me acerque a besar su mejilla para luego tomar la mano de Enoch, y salir de la habitación-.

Siento que Enoch me tira del brazo y me acerca más hacia él. Ambos nos miramos y él me sonríe para luego comenzar a besarme, lleve mis manos a sus hombres y las suyas a mi cintura.

-Me cambiaste por completo -Dijo él con una sonrisa y me llevo hacia la habitación-.

•Narrador Omnisciente•

Enoch se sentía muy seguro de si mismo, y quería demostrarle a Maxine cuánto la amaba realmente.

-Enoch -Dijo ella entremedio del beso-.

Él la recosto con cuidado en su cama y la miro con sus ojos iluminados.

-Prometo que no olvidaremos este día -Dijo él y ella asintió sonrojada-.

Ambos se trataban con delicadeza pero con mucho amor, cada prenda de ropa que tenían puesto ya se encontraba en suelo, ninguno de los dos podía creer aún lo que estaban haciendo pero de todas maneras no iba a detenerse, parecía un sueño pero su felicidad aumentaba al saber que era la realidad.

-Te amo Maxine -Susurro él en su oído-.

La piel de Maxine se erizo al oír esas palabras parecía que sus ojos se empaparian de lágrimas al sentirse tan viva ante aquellas acciones y palabras.

-Te amo Enoch -Dijo con una sonrisa-.

Ambos respiraron con profundidad, Max cerró sus ojos al igual que Enoch, disfrutaban cada segundo, era la mejor manera de demostrarse el amor que se tenían el uno al otro. Y estaban seguros de que ese día nunca se lo olvidarían.

𝐅𝐔𝐓𝐔𝐑𝐄 |𝐄𝐧𝐨𝐜𝐡 𝐎'𝐂𝐨𝐧𝐧𝐨𝐫|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora