Capítulo 36

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James vuelve a juntar nuestros labios, juego un poco con mis dedos recorriendo sus hombros, su espalda y por último juego un poco con su cabello.
James se dedica a acariciar mi pierna con una mano y con la otra mano me toma de la cintura.

- ¿Estás dormida? - Escucho del otro lado de la puerta y ambos nos separamos rápidamente.

Me coloco una bata y abro la puerta para ver  de quien se trata.

- ¿Qué sucede? - Pregunto aún con la respiración agitada.

- ¡Oh por Dios! Interrumpi una escena de setzo - Dice Leila riendo.

- Se dice sexo Leila y no interrumpiste eso.  - Digo sintiendo calor en todo el cuerpo.

- ¿Y porqué estás tan roja? - Pregunta burlona.

- Mejor ve a dormir, mañana tenemos cosas que hacer.

- Usen protección - Dice y sale corriendo a su habitación.

Entro a la habitación y veo a James sentado en la cama, tiene una sonrisa burlona y me observa curioso.

- Tu rostro te delató - Dice con burla.

- No sé de qué hablas, en mi rostro sólo se refleja el cansancio que tengo. - Respondo colocandome ropa para dormir.

- No me pareció ver eso antes de que llegará Leila.

- Duérmete ya. - Digo metiendome a la cama con la poca vergüenza que me queda.

■■■■

Despierto por el sonido de la alarma en mí celular, busco a mí lado y James ya no está.
Me levanto y entró al baño junto con la ropa que traje en una bolsa para hoy.

Salgo lista y bajo para encontrarme con la familia de James desayunando, todos me saludan con una linda sonrisa en el rostro y yo también

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Salgo lista y bajo para encontrarme con la familia de James desayunando, todos me saludan con una linda sonrisa en el rostro y yo también.

- Mí hermano hablaba con Samantha mientras salía para ir a trabajar. ¿Sabes algo? - Pregunta Carol a mí lado.

- ¿Con Samantha? Pensé que ya no tenían comunicación - Digo tomando mí cartera de mano.

- Escuche que hablaba con ella, James no me vio y por lo que escuche irían a desayunar juntos.

- Nos vemos al rato y gracias cuñada, te quiero. - Digo y subo a el carro de James.

La verdad voy a ir directamente a su trabajo, espero no encontrarme con Samantha, me pone los pelos de punta el verla.
Un día puede ser una buena mujer, actúa de manera buena, te hace creer que realmente es una buena persona e incluso puedes confiar en ella. Pero otro día te demuestra que es una mujer que en cualquier momento se puede aprovechar de la situación y eso es ser una persona hipócrita. 

Llego a el edificio y dejo el carro afuera, seguramente no voy a tardar mucho en salir.
Subo al elevador y recibo un mensaje de texto de Leila.

Leila: Samantha está aquí, ven pronto. :/

Sonrió ante el mensaje de Leila, eso quiere decir que no tiene mucho que llegaron a la oficina.
Salgo del elevador y camino directo hasta la oficina de Leila, obvio es más importante mí amiga que James.

- Volaste - Dice al verme.

- Carol me dijo en la casa que los escucho hablando por teléfono, tu mensaje llegó cuando ya estaba en el elevador. - Respondo riendo.

- Entonces ve y pelea lo tuyo.

- Estás loca Leila - Digo riendo y salgo de su oficina.

Entro a la oficina de James sin tocar, veo a Samantha sentada en las piernas de James, por lo menos no se están besando aunque estoy segura de que eso ya sucedió.

- ¿Interrumpo? - Samantha se pone de pie inmediatamente.

- Sólo conversabamos. - Dice Samantha.

- Seguramente la silla no es muy cómoda para ti nena. - Digo tomando asiento.

- ¿Qué sucede? - Pregunta James.

- Adiós he, sí quisiera hablar contigo iría a tu casa. - Digo viendo a Samantha e inmediatamente sale de la oficina de James.

- Vine a pedirte que vayamos a desayunar juntos - Digo tratando de verme lo más tranquila posible.

- ¿Desayunar? Preferiría que mejor fuéramos a comer juntos, la verdad no desperté con mucho apetito.

- ¿De verdad? Que raro, normalmente en las mañanas es cuando más hambre tienes.

- Desayune un poco en casa. - Responde nervioso.

- Como digas, no fue exactamente lo que me dijeron pero bueno.

El sonido de mí celular interrumpe nuestra conversación, al sacarlo veo que es una llamada de el empresario Stephen, el chico que me pidió la sesión de fotos para su empresa de lencería.

- Buenos días. - Respondo de inmediato.

- Buenos días señorita Jenny, me pregunto que tan ocupada se encontrará está mañana. - Su voz es realmente sensual.

- No estoy nada ocupada. - Respondo sonriendo.

- ¿Está bien sí paso por usted para ir a desayunar? Me gustaría tratar un tema trabajo.

- Yo llego al lugar, dígame en donde y con gusto estaré ahí.

- Le enviaré la ubicación - Dice y cuelga.

- Bueno James, me avisas sí se va tu familia para irme a mí casa o sí debo regresar a la tuya - Digo mientras me pongo de pie.

- ¿A donde vas? - Pregunta poniéndose de pie.

- Iré a desayunar, me han invitado y ya debo irme.

Salgo de su oficina, al salir veo a Samantha en la oficina que James le presto, no lo dudo ni un poco y decido entrar a su oficina.

- Que sea la última vez que te veo en la oficina de mí esposo. - Digo frente a ella.

- El me invito a pasar.

- No te pregunté, simplemente te estoy diciendo que no quiero volver a verte ahí dentro.

- No es mí culpa que no puedas tenerlo al cien en la cama Jenny, por eso busca a alguien más.

- Mínimo cobra por tu trabajo Samantha. - Digo y salgo de su oficina.

De un día a otro. (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora