Salgo rápidamente de la ducha para arreglarme lo más rápido posible, quedé de verme con Stephen y Paulina en su oficina. Me dijeron que tenían algo realmente importante para proponerme, realmente me emociona, no creo que venga una mala propuesta por parte de ellos.
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Llego al trabajo de Paulina y subo directamente a la oficina de estas dos grandes personas.
- Buenos días. - Digo al entrar sonriendo.
- Buenos días preciosa, mira que me da gusto ver que estás mejorando. - Dice Paulina dándome un beso en la mejilla.
- Buenos días, te ves hermosa. - Dice Stephen saludandome con una sonrisa en los labios.
- Me alegra mucho verlos, me hace sentir de cierta manera tranquila. - Digo y los tres tomamos asiento.
- Te adoramos. - Dice Paulina.
- Mucho amor pero realmente necesitamos hablar de la propuesta, es muy importante Jenny. - Interrumpe Stephen.
- Claro, lo escucho.
- Bueno ¿Recuerdas lo de nuestro negocio en Argentina? - Pregunta Paulina y yo asiento.
- Ha crecido demasiado, no pensamos que tendríamos un éxito tan grande en ese país.
- ¿De verdad? Me da mucho gusto por ustedes. - Respondo emocionada.
- A lo que queremos llegar, es que no tenemos quien maneje la empresa en Argentina.
- Nos gustaría que tomaras el mando en la empresa de Argentina. - Dice Stephen.
Los observó a ambos buscando que esto sea una broma, pero sus rostros se mantienen con demasiada seriedad. Ambos me miran esperando una respuesta de mí parte y los nervios llegan a mí al darme cuenta de que esto es real.
- Pero chicos, yo no tengo los estudios para dirigir esto.
- Lo sabemos, es por eso que te mandaremos a hacer la carrera allá y al mismo tiempo lleves las riendas de la empresa. - Responde Paulina.
- ¿Por qué yo? Ustedes saben que aveces no tomo muy buenas desiciones.
- Tus desiciones personales no tienen nada que ver con lo laboral Jenny, te hemos visto trabajar y entregas lo mejor de ti.
- Esto es sólo si tu quieres Jenny, aquí nadie te va a obligar y tampoco nos vamos a molestar contigo si te niegas. - Habla Stephen.
- ¿Cuando tendría que irme? - Pregunto curiosa.
- Esta semana, te necesitamos ahí lo antes posible.
Cierro los ojos unos segundos para respirar tranquilamente, ¿Qué puedo perder? Nada. ¿Qué puedo ganar? Muchísimo como persona.
- Vámonos entonces. - Me pongo de pie y ambos me observan curiosos.
- Tengo que hacer mis maletas. - Digo y ambos sonríen.
- ¡Lo sabía! - Grita Paulina emocionada y me abraza.
- No sabes cuanto te agradezco esto. - Dice Stephen uniéndose a nuestro abrazo.
- Yo les agradezco a ustedes por confiar en mi de esta manera. Sé que la empresa es demasiado importante para ustedes.
Realmente me impresiona que ellos confíen en mi de esta manera, jamás imaginé una propuesta así. Yo pensé que me hablarían para modelar algo nuevo que fueran a sacar o yo que se. Jamás pensé que me fuesen a ofrecer un excelente trabajo y un gran cambio de vida. Este cambio de vida realmente me va a ayudar demasiado, voy a poder olvidarme de James, voy a hacer mi vida muy tranquilamente y esto me deja mucha tranquilidad.
