Esto se llama amor

Capitulo 8

Y ahí estábamos los dos solos en el patio,  se levantó de su reposera y se acerco

  -¿ estas bien? - me preguntó con una voz dulce

   - Si , gracias por cambiar de tema- le dije dibujándo una sonrisa en mi rostro

    - Sentí que estabas un poco incomoda por eso preferí cambiar de tema, tu mirada es triste Ori, y no me gusta verte así- al terminar de decir eso hizo que me sintiera bien conmigo misma, por primera vez después de mucho tiempo.

  - Gracias Juli- le dije mientras no dejábamos de mirarnos ni por un segundo.

   - ¡aca esta el heladooo! - exclamo Peter interrumpiendo nuestra mirada que valía mas que mil palabras.

    - Al fin facha- dice Julian mientras se dirigía  hacia su reposera. - veni Ori acercate al fogón- me dice y se corre dejándo un lugar en la reposera donde estaba acomodado.

Estabamos los 4 charlando y comiendo helado hasta que aparece Nicolás con la manguera en la mano

   - Declaró guerra - grita y lo moja sin piedad a Peter. Inmediatamente agarró dos baldes, le da uno a Julian, y deciden cargarlo de agua jurando venganza mientras que Nicolás no paraba de mojarlos, los tres no paraban de correr ni de pegarse, típico entre hombres. Nicolás decide ir por Jenny, así que se acerca, de atrás, y la sorprende mojándole la espalda, Jenny se para puteandolo y corre tras él pegándole patadas, no pude evitar reir, y ahí fue cuando, de sorpresa, aparece Peter con la manguera enfrente mio

  - Ni se te ocurra- le grito, levantándome de la reposera e intentado entrar a la casa.

- ¡agarrala! - le grita Peter a Julian, me sorprende y con mucha timidez me agarra de atrás enrollando sus brazos en cintura. Mi corazón se aceleró, y también pude sentir el de él sobre mi espalda.

  - No Julian, porfavor - le suplique , pero no me soltó, Peter venia directo a mi apuntándome con la manguera, lo único que pude hacer es darme vuelta y refugiarme en el pecho de Julian, mientras Peter me mojaba la espalda completa.

Apenas Peter dejó de apuntarme y se fue corriendo a mojar a otra "víctima", Julian dejó de abrazarme y puso sus manos en mi cintura

  - ¿estas viva? ¿Oriana Sabatini estas viva?- bromeó e inmediatamente hizo que se dibuje una sonrisa en mi cara.

   - muchas gracias por tu ayuda- le dije irónicamente y esta vez los dos sonreimos.

Luego de la batalla, entramos los 5 empapados a secarnos, Peter nos dio una toalla a cada uno, ninguno de los tres dudo en sacarse la remera y tenderla en un tendedero que había en el quincho. Los tres tenían un abdomen marcado pero lo que me llamo la atención fue la espalda de Julian, era perfecta.

Me acerque a Peter y le pregunte donde estaba el baño ya que había traído una muda de ropa, me enseñó el baño y entré, me puse un short de jeans, una remera que dejaba al descubierto mi ombligo y unas ojotas hawaiannas high, que son las que tienen una plataforma, mi pelo mojado llegaba casi hasta mi cintura, lo deje suelto ya que estaba bastante aplastado. Sali del baño.

En la cocina se encontraba solo Julian

- ¿donde están los demás?- le pregunte mirando hacia fuera, pero no vi a nadie.

  - Peter y Jenny fueron al kiosco y Nicolás te dejo un beso, se fue porque tenia cosas que hacer dijo sin dar explicaciones- suspiró ya que había hablado todo seguido sin respirar.

No dije nada, me sente en una de las sillas de la barra, y me quede observándolo.

  - ¿tomas mate? - me preguntó sin dejar de hacer lo que estaba haciendo.

  - Si, tomo- le dije mirando su espalda desnuda.

  - Te vas a chupar los dedos cuando pruebes mi mate, los chicos fueron a comprar azúcar, ¿tomas dulce no?- me pregunto mirándome fijamente a los ojos.

Sin pensar lo que iba a responder le dije

   - si, dulce, ya tengo suficiente amargura en mi vida- mierda, pensé por dentro, como pude decirle eso. Inmediatamente se acercó y me dijo con voz curiosa

   - ¿ que escondes Oriana? ¿ que no te deja ser feliz? Me doy cuenta en tu mirada.

Yo solo lo mire, sentía mis ojos brillosos, más de lo normal. 

   - nada- le dije bajando la mirada. Por suerte Jenny y Peter aparecieron

   - ahora si a tomar unos ricos mates- dijo Peter mientras le pasaba el azúcar a Julian.

   - ¿ estas bien? - susurro Jenny mirándome con esos ojos verdes que tenia.

   Yo solo le sonreí, y note como Jenny dejo de preocuparse. Nos fuimos los cuatro al jardín, Peter se sentó en una de las reposeras junto a Jenny, y esta vez fui yo la que le hice un gesto a Julian para que se sentara al lado mio, la cual asintió y dibujo una sonrisa, perfecta, en su rostro. Nos quedamos hablando y tomando mate, cuando comenzó a oscurecer

   - Supongo que se quedan a comer ¿no? - suplico Peter.

   - Yo paso, otro día- le dije con una voz cansada.

    - Yo también, arreglamos para otro día facha- le dice Julian sonriendo.

   - por favor Jenny por lo menos quedate vos- le rogó Peter.

   - Bueno no tengo ningún compromiso, yo me quedó - le dijo sonriendo con un poco de vergüenza.

Me levante y le pregunte a Julian si quería que lo lleve a la casa, él super respetuoso, como siempre, me respondió.

  - como quieras Ori, si no tenés apuro, sino voy caminando, no te preocupes.

No podía ser tan tímido al hablarme

  - si no quería ni te decía- le dije y los dos reímos.

   Salude a Jenny y en vos baja sin que escuchen los otros dos le ordene

  - cuando llegas a tu casa me mandas un mensaje y me contas todo- era obvio que ellos dos estaban hasta las manos, por lo menos, Julian y yo lo disimulamos bastante bien pensé por dentro.

   - ¡Obvio!- exclamó Jenny.

Peter nos acompaño hasta la puerta y nos despidió.

Desactive la alarma y subimos al auto...