Esto se llama amor

Capitulo 16

  - No sé porque lo decís, pero no sos eso Oriana-. Cerró la canilla, se secó las manos y se acercó a mi. Me agarró las mejillas con sus manos y me dio un beso, el beso más tierno que podrían haberme dado, tarde unos segundos en responderle, y finalmente nuestras lenguas se entrelazaron. Me suelta y me agarra las manos.

   - Deja de basurearte, algo escondes y no me interesa lo que sea pero empeza a quererte Ori, hace una semana que te conozco pero siento que paso más tiempo, sos hermosa por dentro y por fuera, dejame quererte porfavor- me dijo Julian con una voz sincera y con los ojos brillantes. Yo asentí y estuve a punto de decirle lo que era,  pero no, tengo miedo, si le cuento que soy una asesina se ira de mi para siempre, y sorpresivamente es lo último que quiero. Lo abrazé y mi celular interrumpió el abrazo mas lindo de mi vida.

  Lo agarro y atiendo, era Tiziana.

   - Hola Titi ¿que paso?

   - Estaba preocupada son casi las cuatro de la tarde y no volviste ¿donde estas?- me preguntó preocupada.

   - Estoy en lo de un compañero de la facu, nos invito a comer a Jenny y a mi, ahora voy para casa- respondí sin sacar la mirada hacia los ojos de Julian.

   - Bueno me hubieses avisado nena, ¿Te aviso mami que se fueron a Pinamar? -

   - Si me mando un mensaje, ahora voy y hablamos, chau fea.

   - Chau boba-  Cortamos.

 

    -Era mi hermana, estaba preocupada por mi ¿no es un amor?- le dije a Julian sarcásticamente.

    - Si es igual a vos, lo debe ser- respondió tímido.

Sonreí y un impulso hizo que lo abrazara nuevamente, esta vez me hizo dar una vuelta en el aire. Reimos.

   - Bueno yo ya me voy, mis viejos se fueron a Pinamar a pasar el fin de semana, tengo que ir a poner orden a mi casa- le dije a Juli y enseguida entró Peter escuchando lo que le decía.

  - ¿Osea que hoy hay fiesta en tu casa?- preguntó riendo.

   - No, fiesta no, pero algo podemos hacer- respondí mirando a Jenny que se acercaba a nosotros tres.

   - Yo me prendo- dijo la colorada sonriendo.

   - Ya me voy ¿ quieren que los tire en su casa? - les pregunte a los chicos. Los dos asintieron.

  Agarramos nuestras cosas y Julian nos acompaño hasta el auto.

  - Bueno después arreglamos que hacemos a la noche, si quieren obvio- les dije mientras desactivaba la alarma del auto.

  - Yo no tengo problema Ori- dijo Julian tímido.

  - Yo menos, la verdad que no quiero quedar cursi pero la paso bien con ustedes- dijo Peter riendo- Che ahora que me doy cuenta ¿y Nicolás?- Preguntó.

  - Después te cuento- le dijo Julian con voz enojada, seguramente recordando lo que había pasado anoche.

  - Dale facha, nos wattsapeamos.

  - Chau Juli- dijo Jenny entrando al auto, Julian le guiño el ojo.

   - Bueno después hablamos y arreglamos para hacer algo- le dije mientras me acercaba a su mejilla para depositarle un beso.

  - Dale Ori, obvio- responde mientras apoya su boca en mi cachete. Le Sonreí y subí al auto. Lo puse en marcha y salimos, toque bocina, mientras miraba de reojo a Julian entrando al edificio.

   - Esta hasta las manos este pibe Oriana ¿te diste cuenta no?- me dice Peter serio. Yo solo Sonreí y mire a Jenny.

   - Callate Peter- le ordenó la colorada.

Deje a Peter y después a Jenny. Cuando llegue subí el auto a la vereda, baje, active la alarma y entre a casa.

   - Hola titita de mi vida- le dije a Titi que estaba tirada en el sofá del living.

    - ¿qué haces vestida así?- preguntó y empezó a reírse a carcajadas.

   - Lo que pasa es que no volví directamente, fuimos todos a bailar, desayunamos en la casa de Julian y nos dormimos, nos levantamos al mediodía y comimos- le dije seria disimulando mi risa.

   - Epa epa, así que se llama Julian la razón de tu buen humor todos estos días- me dijo mientras se acomodaba en el sillón.

  - Callate- debía cambiar de tema antes que logre ponerme mas incomoda de lo que estaba- ¿que vas hacer a la noche? Me parece que no tendrías que salir- le dije mientras me tiraba en el otro sofá.

   - ¿por qué no?- no pasa nada Ori.

   - ¿Y si  pasa algo? No esta ni mamá ni papá, por favor, no salgas porque no voy a poder estar tranquila pensando si estas bien- le suplique. No hacia falta aclarar que le pedía esto porque no podría soportar que le pase algo, y menos estando solas, salia con amigas en auto y eso ya era preocupación para mi, ojala nunca suceda pero nadie estaba libre de que le pase algo como a mi aquel 14 de diciembre.

   - Esta bien, no salgo- me respondió mirando tiernamente, Titi sabia que yo había quedado algo sensible de aquel horroroso episodio y que estando solas era mejor que nos quedemos en casa.

  - Voy a invitar a Ines y a Paloma a cenar y a dormir, ¿por qué no invitas a tu grupo de la facu? ¡Podríamos hacer noche de pelis y pochoclos!-  exclamo Tiziana.