Harry Styles.
El alcohol se me había bajado de un solo golpe luego de lo sucedido con Samantha.
Samantha... ¿por qué la morena sigue apareciendo en mi vida? ¿por qué se está empeñando en que nos volvamos encontrar? No entendía como la persona que conocí meses atrás y se mostraba como una mujer carismática se había vuelto en alguien tan caprichosa y entrometida.
Estaba efectivamente hasta las cubas pero estaba pasando un rato excelente, mi burbuja de alcohol estaba centrada en bailar y hablar estupideces de borracho con los chicos. ¿Por qué tuvo que aparecer? ¿Por qué entre todos los malditos clubs de Londres se tuvo que aparecer en ese?
La vida siempre estaba llena de casualidades, pero cuando venían de ella, no estaba segura de que en realidad lo fuesen.
—Adiós, hermano.— los brazos de Niall rodeando mi cuerpo me sacan de mis pensamientos. Correspondo su fuerte abrazo y suspiro en el proceso.
—Te voy extrañar.— por un momento creo que las lágrimas se me van a salir.
—No te pongas sentimental o terminaremos llorando.— no está su risa y el corazón se me achica. Es como separarnos otra vez.
—Suéltame o lloraré.— digo en un susurro. Se separa de mi dándome un me beso la mejilla.—Te quiero mucho, Horan.
—Y yo a ti, Harry.— le sonrió por última vez y se vuelve a subir al auto.
—Maldito Liam.— le palmeo el trasero al verlo dormido sobre todo el asiento trasero del auto de Niall.—Te quiero, Payno.— susurro antes de cerrar la puerta.
Cuando Niall pone en marcha el auto, Louis y yo le damos un último adiós agitando nuestras manos. Nos giramos y trato de abrir la puerta pero al final no pude. El alcohol había bajado en demasiado pero mi cuerpo aún se sentía un poco inestable.
—Eres un desastre.— me dice Louis riendo. Me empuja haciendo que me cayera sobre unas plantas que había a lado de la puerta. Comienza a reír a carcajadas y le doy una patada en la pierna.
—Agh, mi culo.— trato de levantarme y luego de dos intentos fallidos, Louis me estira su mano.—Te odio.
—Claro.— rodea lo ojos y termina abriendo la puerta luego de un par de intentos. Yo por otro lado, me limpio la tierra de la ropa antes de ingresar a casa.—Deberíamos dormir aquí abajo.
—¿Por qué?
—Porque roncas como la mierda cuando estas borracho y a menos que quieras despertar a Hannah.— se encoge de hombros.
—Pero quiero dormir con ella.— hago un puchero inconscientemente haciendo reír a Louis.
—Es increíble ver el poder que tiene esa chica en ti.— ríe por lo bajo y me plamea el hombro.
—Imposible de negarlo.
—Hazz.— carraspea.—¿Sabes que tienes que hablarlo con ella no? Aunque no haya pasado nada ella tiene que saberlo.— de nuevo el recuerdo de Samantha vuelve a mi mente y la angustia crece en mi pecho.
—Por supuesto. Lo haré en cuanto despierte.— el asiente.
—Como sea, estoy cansado, así que me voy.— luego de un corto abrazo de su parte busca camino hasta la habitación de invitados que hay pasando la sala de estar.— Sólo dile a Elle que baje.
Me voy a las escaleras y trato de subirlas los más silencioso que puedo pero me tropecé como tres veces porque olvidé encender las luces. Cuando estoy frente a mi habitación, me quito los zapatos antes de entrar y los dejo a un lado de la puerta. Saco mi celular del bolsillo trasero de mi pantalón y busco la linterna para guiarme y evitar hacer más ruido del que hice camino acá.
